La Segunda República Española: Del Bienio Reformista a la Guerra Civil

1. Introducción

Tras los sucesos de Casas Viejas y la presión ejercida desde el centro derecha (Lerroux), el Gobierno presidido por Azaña sufrió un desgaste que le obligó a convocar elecciones. La derecha española se había reorganizado en torno a la CEDA, que agrupaba a las clases medias y populares católicas. Las Juventudes de Acción Popular (JAP) mostraban ya rasgos fascistas, mientras que Renovación Española, era dirigida por Calvo Sotelo. Finalmente, la Falange Española de José Antonio Primo de Rivera se fusionó con las Juntas de Ofensiva Nacional Sindicalista (JONS) de Ramiro Ledesma.

Por el contrario, el sector republicano de izquierdas se había disgregado, marcado por la ruptura entre el PSOE y el Gobierno y su gran atomización. El PSOE estaba dirigido por un grupo de líderes a menudo enfrentados. El PCE seguía las nuevas directrices de la Komintern y buscaba una alianza de la izquierda contra el fascismo, mientras que la CNT seguía ligada a la acción revolucionaria y propugnó la abstención en las elecciones.

En estas elecciones, por primera vez, se hizo efectivo el voto femenino. No hay evidencia de que el voto de las mujeres inclinara la balanza hacia los sectores conservadores, aunque la izquierda española, con figuras como Margarita Nelken, intentó impedir que las mujeres votaran, argumentando que su voto iría mayoritariamente a las corrientes más conservadoras.

2. Evolución Política entre 1934 y 1936

2.1. El Bienio Conservador (1933-1936)

Lerroux formó un gabinete conformado exclusivamente por miembros de su partido. Se vio obligado a iniciar lo que los grupos de derecha reclamaban: una política de rectificación de las reformas del bienio anterior. Esta nueva política se concretó en:

  • a) Freno a la Reforma Agraria, incluso con devolución de tierras a la aristocracia.
  • b) No se aplicó la Ley de Confesiones y Congregaciones, lo que permitió que los colegios católicos siguieran funcionando y la Iglesia siguiera recibiendo fondos.
  • c) En legislación laboral, se modificó la Ley de Jurados Mixtos, dando más poder a los empresarios.
  • d) En el ejército, se promocionó a militares marginados en el bienio anterior, designándose para puestos clave a militares claramente antirrepublicanos como Franco, Goded o Mola, y se aprobó una ley de amnistía que favorecía a los implicados en la intentona golpista del general Sanjurjo.
  • e) Paralización de las reformas educativas.
  • f) Enfrentamiento a los nacionalismos. Se frenó el proyecto de Estatuto de Autonomía y se produjeron enfrentamientos con la Generalitat catalana, presidida por Lluis Companys.

Todo ello creó un clima de enorme tensión, tanto política como social. El campo, en 1934, estuvo marcado por una huelga general. Pero el problema principal fue la insurrección de octubre de 1934. La CEDA exigió entrar en el gobierno para intensificar las líneas de acción más conservadoras. En octubre de 1934 se formó un nuevo gobierno con tres ministros de la CEDA. Esta fue la señal para la insurrección.

Podemos señalar tres fases:

  1. Huelgas generales en las principales ciudades que fracasan.
  2. Proclamación del Estat Catalá por Lluis Companys y la suspensión del Estatuto.
  3. Revolución de Octubre en Asturias. Se produjo una verdadera alianza entre obreros de todos los signos que se manifestó en una insurrección armada. Durante nueve días, los obreros asturianos controlaron la provincia. La respuesta fue durísima, y vino de la mano de La Legión, dirigida por el general Franco.

La represión política produjo más de mil trescientos muertos, el doble de heridos y treinta mil detenidos, entre ellos Companys y Azaña. La reacción del gobierno fue el endurecimiento de su política. En el año 1935, el gobierno radical-cedista entró en crisis. La crisis definitiva vino con un escándalo de corrupción, el escándalo del Estraperlo, que afectó a altos cargos gubernamentales. Lerroux y el Partido Radical cayeron en un descrédito total. La aparición de nuevos escándalos precipitó el fin de la legislatura y la convocatoria de nuevas elecciones a Cortes en febrero de 1936.

2.2. El Frente Popular (1936)

El panorama era distinto: las derechas se presentaban desunidas y las izquierdas formando un bloque denominado Frente Popular, un pacto electoral firmado por: PSOE, PCE, POUM, Izquierda Republicana y Esquerra Republicana de Catalunya. La CNT no pidió la abstención y apoyó de forma tácita a la coalición de izquierdas. La coalición de los grupos de derecha, formada por la CEDA y Renovación Española, acudió con un programa basado en el miedo a la revolución social. La Falange y el PNV se presentaron por su cuenta.

Tras las elecciones, Manuel Azaña fue nombrado Presidente de la República. Se formó un gobierno presidido por Casares Quiroga y formado exclusivamente por republicanos de izquierda, sin la participación del PSOE. Las principales medidas políticas fueron:

  • a. Amnistía de la Revolución de Octubre.
  • b. Reposición en sus puestos de los trabajadores y empleados públicos despedidos por causas políticas.
  • c. Tribunal de Garantías Constitucionales.
  • d. Restauración de los puntos de la Constitución suspendidos durante el bienio anterior.
  • e. Reinicio de la Reforma Agraria, desbordada por la acción de los jornaleros.
  • f. Protección a pequeños productores y pequeños empresarios.
  • g. Restauración de la legislación social.
  • h. Restablecimiento del Estatuto de Cataluña y tramitación de nuevos estatutos.
  • i. Alejamiento de Madrid de los generales más sospechosos: Franco, Mola y Goded fueron destinados a Canarias, Navarra y Baleares, respectivamente.

3. Conclusión: El Golpe de Estado de Julio de 1936

El gobierno del Frente Popular tomó posesión en medio de una grave situación de crisis social y una conspiración de la derecha que desembocó en una rebelión militar:

  • a. El ambiente social era cada vez más tenso. La izquierda obrera adoptó una postura claramente revolucionaria y la derecha buscaba el fin del sistema democrático. Se sucedieron los enfrentamientos violentos callejeros entre falangistas y milicias socialistas, comunistas y anarquistas.
  • b. La conspiración militar contra el gobierno avanzaba. Por un lado, existía una trama política conformada por figuras de la derecha como Gil Robles, Calvo Sotelo y José Antonio Primo de Rivera. Por otro lado, crecía el número de generales implicados: Franco, Goded, Fanjul, Varela, y Emilio Mola, entre otros. Muy pronto se iniciaron los contactos con Mussolini y Hitler.
  • c. El 12 de julio era asesinado por extremistas de derecha un oficial de la Guardia de Asalto, el teniente Castillo. La respuesta llegó la siguiente madrugada con el asesinato de José Calvo Sotelo a manos de miembros de las fuerzas de seguridad. El enfrentamiento era inevitable. El 17 de julio, el ejército español, bajo el mando de Franco desde Marruecos, iniciaba la rebelión contra el gobierno de la República. El triunfo parcial del golpe desencadenó la Guerra Civil Española.

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