El Sexenio Democrático (1868-1874)
La Sublevación de 1868 y la Constitución de 1869
La sublevación de 1868, liderada por militares como Serrano y Prim, contó con el apoyo de progresistas y republicanos. Su objetivo era superar la crisis económica y democratizar la vida política. Se celebraron elecciones a Cortes por sufragio universal masculino, y se aprobó la Constitución de 1869, la más democrática hasta la fecha. La Corona perdió poderes políticos y se reconocieron numerosas libertades públicas, incluida la libertad de culto.
El Reinado de Amadeo I de Saboya
Las Cortes eligieron como rey a Amadeo I de Saboya, de talante democrático. A pesar de su respeto a la Constitución, la falta de apoyos, la agitación republicana y el nuevo levantamiento carlista le llevaron a abdicar. Ese mismo día, las Cortes proclamaron la República.
La Primera República (1873-1874)
La Primera República, que duró once meses, intentó consolidar el sistema democrático iniciado en 1868. Sin embargo, se enfrentó a graves problemas: la división interna de los republicanos, una nueva guerra carlista, la guerra de Cuba y el cantonalismo, un movimiento federalista que buscaba la creación de cantones independientes. Estos problemas provocaron su inestabilidad y fracaso. En enero de 1874, el general Manuel Pavía dio un golpe de Estado, disolviendo la República y abriendo paso a la Restauración monárquica.
La Restauración Borbónica (1874-1931)
El Sistema Político de la Restauración
Con el retorno de la monarquía con Alfonso XII, se instauró un nuevo sistema político que limitaba el acceso al gobierno a dos partidos:
- El Partido Conservador, liderado por Antonio Cánovas del Castillo, formado por la unión de moderados y progresistas.
- El Partido Liberal, liderado por Sagasta, compuesto por demócratas y algunos republicanos.
Estos partidos pactaron un turno pacífico, alternándose en el gobierno durante más de cuarenta años. Este sistema, conocido como bipartidismo, se basaba en el fraude electoral, con los caciques locales asegurando la mayoría necesaria para el partido en el poder.
El Reinado de Alfonso XII y la Regencia de María Cristina
El reinado de Alfonso XII se caracterizó por la no injerencia del monarca en política y la estabilidad gubernamental, con el Partido Conservador en el poder durante la mayor parte del periodo. Tras su muerte, su esposa, María Cristina de Habsburgo, asumió la regencia hasta la mayoría de edad de su hijo, Alfonso XIII. Durante la regencia, se mantuvo el bipartidismo. El Partido Liberal, en sus años de gobierno, abolió la esclavitud en Cuba e implantó el sufragio universal masculino.
La Crisis de 1898
Antecedentes y Problemas Internos
La década de 1880 fue una época de dificultades para España, con problemas en la agricultura y la industria textil, sumados al mal funcionamiento político de la Restauración. El mayor problema fue la guerra colonial que culminó con la independencia de Cuba y Filipinas.
Las Guerras Coloniales y la Intervención de Estados Unidos
Cuba era la principal productora mundial de azúcar, café y tabaco. Estados Unidos tenía importantes intereses económicos en la isla. La dura represión española ante las reivindicaciones autonomistas provocó varias insurrecciones. Casi simultáneamente, estalló una revolución en Filipinas. Estados Unidos declaró la guerra a España.
El Tratado de París y sus Consecuencias
El Tratado de París (1898) puso fin al conflicto. Puerto Rico, Filipinas y la isla de Guam fueron cedidas a Estados Unidos por 20 millones de dólares. Las pérdidas económicas alteraron las finanzas y los precios aumentaron, afectando a las clases humildes, que también sufrieron las pérdidas humanas. Las clases altas podían evitar ir a la guerra pagando ciertas tasas. El desastre colonial agravó la crisis del régimen de la Restauración y provocó una crisis cultural, reflejada en la Generación del 98.