El desprestigio del régimen de Isabel II llevó a una alianza entre progresistas y demócratas, que firmaron un pacto conocido como los Pactos de Ostende, 1866, que incluía el acuerdo para destronar a Isabel II. En septiembre de 1868 la armada española dirigida por el almirante Topete se sublevó, con el apoyo de los generales Prim y Serrano. Comenzó así la Revolución Gloriosa. El movimiento se extendió con levantamientos populares y se organizaron juntas revolucionarias locales. Serrano venció al ejército gubernamental en Alcolea, e Isabel II huyó a Francia. La revolución había triunfado. El poder se confió en el general Serrano quien tomó medidas para estabilizar la revolución como la convocatoria de Cortes constituyentes. Las elecciones dieron la mayoría a la coalición de unionistas, progresistas y demócratas. Elegidas por sufragio universal, confirmaron en su cargo a Serrano y pero además existía una gran variedad de ideologías entre los diputados; en dos grandes rasgos estaban quienes estaban contra el régimen (isabelinos y carlistas) y los que estaban a favor del régimen (republicanos y monárquicos). Durante la regencia de Serrano (1870) se elaboró la Constitución de 1869 que destaca por las siguientes características: libertad de imprenta, libertad de enseñanza, reconoce la soberanía nacional y la división de poderes. Tras ser aprobada, era preciso encontrar un candidato para el trono español, quien finalmente fue Amadeo de Saboya (1871-1872). Pero nada más llegar al país tenía en su contra a los republicanos, a los alfonsinos, a los carlistas, a la iglesia y la aristocracia y a las clases bajas. Esto provocó una inestabilidad política y la sucesión de diferentes gobiernos. Finalmente Amadeo I busca un pretexto para su dimisión y lo encuentra en el ejército y el gobierno, con los que tiene problemas. Finalmente, tras su dimisión, se llega de nuevo a una monarquía constituyente sin rey. Esta situación se resolverá mediante una votación con la que se proclamará la Iª República (1873). Esta es elegida por votación porque supone la única salida posible de la situación que vivía España. Se encontró con una serie de problemas, principalmente la oposición de carlistas, alfonsinos y constitucionales, la dudosa legitimidad del modelo de estado republicano y la división interna de los republicanos en federales (intransigentes y moderados) y unitarios. También E.E.U.U y Suiza son los únicos países que reconocen la república. Se sucedieron 4 presidentes. El primero fue Figueras con el que se celebraron elecciones a Cortes Constituyentes en las que triunfaron los republicanos federalistas, ya que los otros partidos utilizaron el retraimiento (acción política que consiste en evitar que se acuda a las votaciones y estas sean poco válidas por la elevada abstención). También suprimió la esclavitud en Puerto Rico. Finalmente dimitió y fue sucedido por Pi i Margall con el que se empezó a elaborar la Constitución y estalla el conflicto cantonalista, que busca instaurar el federalismo desde abajo debido a la lentitud de las reformas electorales. Pi i Margall se niega a tomar decisiones violentas contra los cantones y dimite. A él le sucede Salmerón quien junto a Castelar hicieron un uso excesivo de la autoridad. Salmerón pidió poderes extraordinarios a la cámara y se apoyó en el ejército (compuesto por una mayoría monárquica). Termina dimitiendo ya que se niega a firmar penas de muerte. Por último Castelar instaura las quintas y suspende los derechos constitucionales. Se acerca más al ejército y se apoya en los partidos monárquicos y constitucionales. Tras la presidencia de Castelar, se produce una división y la derecha adquiere más apoyos de la república derechista. Se pretende realizar una moción de censura contra Castelar, y durante la votación se produce un golpe de Estado dirigido por Pavía, disolviéndose las Cortes. Castelar termina por dimitir.

Tras este golpe finaliza la república, y se vuelve a un gobierno provisional. Se impone la dictadura de Serrano (1874) hasta la Restauración. Durante esta etapa se pretende volver a la Constitución del 69. También se disuelve la 1ª Internacional, vuelven los impuestos de consumo y se termina con el cantonalismo.

Conflictos del Sexenio Democrático

Hay tres conflictos destacados durante el Sexenio Democrático:

• En primer lugar se inicia la guerra de Cuba (1868-1878), provocada por dos causas diferentes en cada zona. En la zona rica hay una inconformidad por parte de la oligarquía debido a la abolición de la esclavitud y en la zona pobre se sublevan por la restricción de comercio, esto provoca un malestar ya que Cuba y E.E.U.U quieren entablar relaciones comerciales. La guerra inicia con el grito de Yara y finaliza con la Paz de Zanjón, que es similar a una tregua. En 1898 se reanudará la guerra.
• La guerra carlista inicia durante el reinado de Amadeo I (1872) y finaliza en 1876, sus causas son la defensa de lo rural, el formalismo y la necesidad de imposición de su rey. Se plantean dos vías de lucha, una política que fracasa y se recurrió a la segunda, la armada.
• Por último, en la República se inicia el cantonalismo en contra de la derechización de la república y para instaurar el federalismo. El cantonalismo inicia en Cartagena y los cantones se proclaman independientes y no aceptan la autoridad de Madrid. El conflicto finaliza en 1874 con la dictadura de Serrano.