la mitad de España. artículo 1º “…una República democrática de trabajadores de toda clase, que se organiza en régimen de libertad y de justicia”. Reconocía también la libertad de expresión, de reunión y de asociación. “La República constituye un Estado integral compatible con la autonomía de los Municipios y las Regiones”. Las provincias que al unirse deseasen formar una región autónoma deberían, necesariamente, presentar a las Cortes de la nación un proyecto de Estatuto de Autonomía.las escuelas serían públicas, mixtas, gratuitas y obligatorias.situaciónde la Iglesia +más polémica y enfrentamientos. Los radicales y anticlericales x disolución de todas las órdenes religiosas y la confiscación de bienes. no se aplicó y se decidió disolver aquellas congregaciones religiosas que tuvieses “obediencia a autoridad distinta de la legítima del Estado (Compañía de Jesús). Prohibida la docencia y dedicarse a actividades comerciales e industriales. libertad de cultos y la separación entre la Iglesia y el Estado se iba acentuando. El que sería presidente del gobierno, Manuel Azaña, había puesto el dedo en la llaga al afirmar en los debates parlamentarios que “España había dejado de ser católica”. Las relaciones con la Iglesia se enturbiaron y una buena parte de la sociedad católica española se distanció del régimen republicano.
libertad de expresión , el voto femenino x 1ª vez en la historia de Espa, las mujeres pudieran ocupar cargos públicos y también el dcho al divorcio. Se establece el matrimonio civil y la igual de dchos entre los hijos legítimos e ilegítimos. La legislación laboral era también moderna y justa, protegiendo los derechos de los trabajadores (seguros de desempleo, enfermedad…). Especialmente revolucionario era el artículo 44 que preveía que “la propiedad de toda clase de bienes podrá ser objeto de expropiación forzosa por causa de utilidad social mediante adecuada indemnización … Los servicios públicos y las explotaciones que afecten al interés común pueden ser nacionalizados”. Las ilusiones de los jornaleros sin tierra aumentaron y la oposición de los propietarios latifundistas creció, aunque “en ningún caso se impondrá la pena de confiscación de bienes”. Decho a la ppdad propiedad privada y a la libre iniciativa individual, aunque ambas se subordinaban a los intereses de la economía nacional, dejándose así la puerta a la nacionalización , socialización e intervención estatal en la economía. Presidente de la Segunda República española, Alcalá Zamora y Jefe del GobiernoAzaña. El presidente de la República elegido por un periodo de seis años, sería el encargado de nombrar al Presidente del Gobierno y a los ministros que éste propusiese.suponçia una democratización profunda de las estructuras anticuadas del Estado y era más moderna que alguna de las europeas de su entorno. No fue, sin aceptada por todos los grupos políticos lo que sin duda le hubiese dado +estabilidad. Era Constitución de izqdas q recogía la ideas de una mayoría de parlamentarios socialistas y republicanos. La dcha -marginada y arrinconada. Era una Constitución burguesa que no satisfacía a las derechas, que se sentían perjudicadas, ni a la extrema izquierda, que veía en ella la muralla para una revolución social.-La Política Reformista de Azaña: reformista por la gran cantidad de cambios en poco tiempo. quería expropiar los latifundios y repartir la tierra entre los campesinos; crear un ejército profesional y democrático, obediente al poder civil; limitar la influencia de la Iglesia, secularizar la vida social y promover una educación liberal y laica, y rectificar el centralismo estatal concediendo autonomía primero a Cataluña y eventualmente al País Vasco y tal vez a Galicia y a otras regiones.esto habría supuesto la reconstrucción del Estado que España parecía requerir. Pero hubo algo más. L. Caballero – medidas encaminadas a mejorar las condiciones laborales de los trabajadores, – protección social al campo, y vio aprobadas una Ley de Términos Municipales que reforzó sensiblemente el poder de los sindicatos campesinos en la contratación de las tareas agrícolas y una ley de Jurados Mixtos, que. Prieto diseñó una política ambiciosa de obras públicas, cuyo objetivo principal era la extensión del regadío a la España seca mediante la realización de un gran plan de construcciones hidráulicas. culminó aquel espléndido y sorprendente despertar de la cultura española. La República nombró a Cossío y Unamuno ciudadanos de honor, Personalidades como Pérez de Ayala, Marañón o Antonio Machado ejercieron un ascendiente excepcional en la vida pública, académica y social. gran esfuerzo educativo y cultural . Los presupuestos de educación se elevaron en un cincuenta por ciento. Entre 1931 y 1933 se construyeron unas 10.000 escuelas. las reformas agraria, militar, religiosa y territorial, polarizaron la vida política (x resistencia que a las reformas hicieron los sectores afectados por ellas, la Iglesia y las España Católica, los propietarios de tierras y parte del Ejército; pero y x el escaso acierto con el que aquéllas se plantearon).
reforma militar, – reducción de jefes y oficiales del Ejército, la eliminación de algunos regimientos… La reforma agraria, aprobada por ley el 9 de septiembre de 1932 , – la expropiación de latifundios y el asentamiento de campesinos en las tierras expropiadas. La reforma religiosa-, significó la separación entre Iglesia y Estado, la disolución de la Compañía de Jesús, la prohibición de la enseñanza a las órdenes religiosas, la libertad de cultos, la introducción del divorcio, la supresión del presupuesto del clero y la secularización de los cementerios. La reforma territorial, – la autonomía a Cataluña ( Maciá y con su propio Parlamento).Reforma Militar fue técnicamente excelente y respondía a necesidades básicas del Ejército español. Con todo, no logró sus objetivos: el número de oficiales retirados fue de unos 6500, no los 12.000 que quería el gobierno. Provocó además, divisiones en el seno del ejército y fue recibida por muchos militares con reserva y hasta con hostilidad. Azaña la planteó con poca habilidad política o al menos no buscó el consenso del propio Ejército. La supresión de cargos y distinciones fue vista como un ataque a la tradición militar; los recortes presupuestarios que afectaron al Ministerio de Defensa impidieron la modernización en material,…La reforma agraria resultó técnicamente muy compleja, quedó detenida hasta el verano de 1932.- espejismo latifundista y castigó por razones ideológicas a la nobleza. Ignoró los problemas de la mediana y pequeña propiedad y de los arrendatarios. Su aplicación tropezó, además, con dos dificultades adicionales: la complejidad burocrática y las limitaciones presupuestarias del gobierno. La reforma territorial fue indudablemente positiva:
dio solución al problema catalán, los hombres de 1931 tuvieron muy presente e recuerdo del desastre federalista de 1873: creían en la necesidad de un Estado central fuerte como instrumento de la reforma democrática del país, y partían de una concepción que veía a España como una entidad unitaria, como una unidad histórica y cultural, en la que, en todo caso, coexistían tres enclaves particulares: Cataluña, País Vasco y Galicia. A Cataluña se le dio la autonomía en 1932 En el País Vasco no hubo autonomía vasca hasta el 1 de octubre de 1936. En Galicia, la autoconciencia nacionalista era sin duda menos acusada,la Guerra Civil estalló antes de que lo aprobara el Parlamento español.La reforma religiosa y educativa:
En España implicaba el riesgo político de provocar un entrenamiento entre la opinión católica y el nuevo régimen. De hecho fu lo que ocurrió. La política laicista-movilización política de los católicos-, la CEDA, El gobierno se enajenó, en otras palabras, a grandes sectores de las clases medias urbanas y rurales que desde 1932 perdieron buena parte de su confianza en la República como régimen. La reorganización de la derecha fue expresión de ello. Grupúsculos de ideología nacional-socialista y fascista, alguno anterior a la República, se unieron en octubre de 1931 en las Juntas de Ofensiva Nacional-Sindicalista (JONS)
Ideólogos y
políticos del monarquismo autoritario y nacionalista crearon en diciembre de 1931 la asociación política y la revista Acción Española:
Casi todos ellos encabezaron Renovación Española, el partido de la derecha monárquica encabezado por Calvo Sotelo y Antonio Goicoechea, creado en febrero de 1933. El Carlismo se reunificó y se reorganizó en la Comunión Tradicionalista Española.
En octubre de 1933 José Antonio Primo de Rivera, hijo del ex dictador, y un grupo de colaboradores jóvenes, fundaron Falange Española, la variante española del fascismo (a la que en 1934 se adhirieron las JONS).la República no había terminado de satisfacer la revolución de expectativas que había generado. Por lo menos ni las reformas sociales de Largo Caballero ni las importantes concesiones salariales ganadas por los trabajadores lograron estabilizar las relaciones laborales-desempleo- crisis económica internacional y de la política. Pero la política de confrontación laboral de la CNT, tuvo seguramente máxima responsabilidad. La dirección moderada desbordada por el ala insurreccionista y revolucionaria, articulada en torno a la FAI. Desencadenó numerosas huelgas generales locales-reprimidas con dureza- y varios conatos de insurrección los cuales dejaron numerosas víctimas y consecuencias muy negativas.Los gobiernos de Azaña – duras medidas policiales para controlar el orden público. Las continuas alteraciones del orden desacreditaron al nuevo régime. oposición a Azaña creciente. La derecha pronto se pasó a exigir la rectificación de la República de 1931. oficiales descontentos pasaron a conspirar. Sanjurjo creyó que el malestar creado por la concesión de autonomía a Cataluña, el descontento de los católicos y la alarma creada por huelgas ydesórdenes públicos expresaban un clima propicio para un funcionamiento militar al estilo de Primo de Rivera. El intento del golpe, “la sanjurjada” el general no pretendía derribar la República, sino crear un gobierno republicano de signo claramente derechista. Azaña, orden a la Guardia de Asalto para que detuviera a los conspiradores. Así se hizo tras un breve tiroteo en Madrid. En Sevilla, Sanjurjo proclamó el estado de guerra y detuvo a la partir de aquel momento la posibilidad de un golpe de Estado militar dejó de ser pura especulación.la reacción de la opinión católica, la erosión permanente del orden público y las huelgas desgastaron la popularidad de Azaña y de sus gobiernos. Los sucesos de Casas Viejas de enero de 1933 en los que en el transcurso de una sublevación anarquista, guardias civiles y de Asalto fusilaron a catorce campesinos de aquella localidad andaluza provocaron la aireadísima reacción de toda la oposición en el Congreso y una feroz campaña de la prensa de la derecha contra Azaña, que en buena medida hirieron de muerte a su gobierno y a él mismo. Las elecciones generales-triunfo a la derecha. la CEDA-emergió como el primer partido político del país. Los radicales de Lerroux lograron 102 escaños; los socialistas 58 y Azaña el gran derrotado, cinco.
La República de Derechas: El Bienio Radical-Cedista (1934-1936)
El triunfo de la derecha en 1933- etapa de expectativas e incertidumbre. La CEDA era una partido católico y confesional, ideológicamente vinculado a la defensa del catolicismo y de las doctrinas sociales de la Iglesia cuya indiferencia en materia de gobierno y su respeto a la legalidad republicana no suponían en modo alguno la aceptación de la República. La CEDA aspiraba a rectificar sustancialmente el rumbo del régimen: a proceder por tanto a una ruptura radical con el sistema democrático de 1931 desde la propia legalidad republicana, para ir a un tipo de Estado desde luego conservador y católico y posiblemente corporativista y autoritario.El problema fue doble. Primero, el equilibrio parlamentario obligó a la CEDA a contar con el Partido Radical de Lerroux. Segundo, Gil Robles, no pudo superar ni sus indefiniciones ni los conflictos ideológicos y de intereses que coexistían en su interior,, no habría gobiernos coherentes y duraderos: hubo un total de siete, presididos por Lerroux, Samper y Chapaprieta; Entre diciembre de 1933 y abril de 1935 – derogación de la ley de Términos Municipales de Largo Caballero, la devolución de tierras a la nobleza, la dotación de un presupuesto para el creo y la amnistía para los colaboradores de la Dictadura de Primo de Rivera y para los implicados en el intento del Golpe de Sanjurjo. Se dieron pasos también para un posible nuevo Concordato. Luego pareció que se paralizaba el proceso autonómico, primero en Cataluña, y también en el País Vasco..Se endureció además, sensiblemente la política de orden públicopor ejemplo en las huelgas campesinas que la UGT desencadenó en Andalucía y en Extremadura. Tras la revolución de octubre de 1934 se suspendió, aunque no se derogó, el Estatuto de Autonomía de Cataluña. A partir de mayo de 1935, el ministro de Agricultura, impulsó una verdadera contrarreforma agraria (devolución de tierras expropiadas, recortes drásticos en los presupuestos para la reforma, aumentos de la indemnizaciones por las expropiaciones, expulsión de pequeños arrendatarios insolventes). En suma, prácticamente no hubo en el bienio sino tres acusaciones positivas: ley de Arrendamientos Rústicos el ministro (de la CEDA) Giménez Fernández,ley que facilitaba el acceso de los arrendamientos a la propiedad; la política de promoción de viviendas de alquiler del ministro Salmón (también de la CEDA), y la política de “pequeñas obras públicas” de Luis Lucía, el líder de Derecha Regional Valenciana, uno de los pilares de la CEDA,.La CEDA no violó la legalidad republicana. No hubo revisión constitucional después del triunfo de la derecha en noviembre de 1933, como no hubo marcha atrás sustantiva ni en materia educativa ni en materia militar; la misma reforma agraria continuó hasta la llegada de Velayos al ministerio. Pero, el rechazo de la República por parte de la España Conservadora era escasamente dudable. El mismo Gil Robles, en el tiempo en que fue ministro de la Guerra (mayo-diciembre de 1935), incorporó a los más altos puestos o del ministerio o del Ejército a cuatro de los generales más significativamente desafectos a la República: Fanjul, Govedad, Mola y Franco.Además, ante la decepción por la derrota electoral de noviembre de 1933 y ante el auge internacional de la derecha .la izquierda obrera y por tanto el PSOE, vieron en el avance de la CEDA la versión española del ascenso del fascismo, interpretación favorecida por la existencia en el interior de la CEDA de sectores próximos a la ultraderecha, y por la misma política de posesión de la calle puesta en práctica por el partido y su líder, ejemplificada en actos como las grandes concentraciones de masas que la CEDA organizó en 1934 en lugares particularmente significados como Covadonga, cuna de la Reconquista, y el Escorial, encarnación de la Contrarreforma. Especialmente, el sector caballerista del socialismo español consideró liquidada la etapa de colaboración con la democracia burguesa y llegado el momento de la revolución social. Prieto mismo-más un demócrata radical que un socialista- amenazó abiertamente desde principios de 1934 con la revolución, probablemente para disuadir a la derecha de sus planes más extremados y para no verse totalmente desplazado por Caballero del control de la organización socialista.La combinación de ofensiva antirrepublicana de la derecha y la radicalización socialista condujo a la revolución de octubre de 1934.
La Revolución de Octubre de 1934
En octubre de 1934 sufrió la Segunda República la crisis más grave acaecida hasta entonces: el día 5, a las pocas horas de que tres ministros (Agricultura, Trabajo y Justicia) de la CEDA entrasen a formar parte del gobierno presidido por Lerroux, dio comienzo el movimiento revolucionario, capitaneado por los socialistas, que llamaron al país a la huelga general y a la insurrección armada, aunque eran conscientes de que se estaban sublevando contra un gobierno democráticamente elegido. La