Primo de Rivera

En 1923 el capitán general de Cataluña Primo de Rivera dio un golpe de estado. Previamente Primo de Ribera había viajado a Madrid para pedir al gobierno plenos poderes para afrontar la lucha contra el terrorismo, que el gobierno le negó. Primo de Ribera dio el golpe en Barcelona de súbito, sin rumores ni derramamiento de sangre y dominó Barcelona que en aquel momento era el centro neurálgico de la política española. Tuvo el apoyo del monarca que le encomendó la tarea de formar un nuevo gobierno, poniendo así fin a la Restauración. Tuvo el apoyo de la burguesía catalana, los terratenientes, el PSOE y el pueblo. En contra tuvo al Partido comunista, CNT y a grupos de intelectuales. Las causas que expuso por las que dio el golpe fueron el fracaso del sistema parlamentario debido a la corrupción, incompetencia e inmoralidad de los políticos; las derrotas en Marruecos, especialmente el desastre de Annual; La crisis social, los desordenes públicos y el aumento de la violencia; los atentados terroristas anarquistas y la inseguridad ciudadana y el aumento del republicanismo y los nacionalismos periféricos. Primo de Rivera estableció un directorio militar de 1923 a 1925 cuyos objetivos eran la solución al problema de Marruecos, la garantía del orden público, impedir el triunfo a los revolucionarios, acabar con el terrorismo anarquista y con los nacionalismos. Las acciones de este gobierno fueron la suspensión de la Constitución, la disolución de las Cortes, la prohibición de los partidos políticos, la iniciación de una dictadura y la amnistía a los responsables del desastre de Annual. Las medidas que tomó fueron la implantación del Estado de guerra 2 años (Eliminando la constitución y censurando la prensa); Acabar con el caciquismo (Sustituyendo a los gobernadores locales civiles por militares); Eliminación de los Ayuntamientos (Que fueron sustituidos por un comité con los mayores contribuyentes de la ciudad); la creación de un nuevo estatuto con más autonomía para municipios y provincias; Solucionar el problema del terrorismo anarquista; Mejorar las actividades agrarias e industriales (Gracias a una economía mundial boyante y una política proteccionista, mejorando la economía nacional) y la solución al conflicto de Marruecos. En 1925 desembarca en Alhucemas con la colaboración de Francia y pronto logra la rendición de Abd el-Krim. En 1927 se pone fin al protectorado, con lo que se logra un lavado de imagen para el nuevo régimen y el ejército. En 1925 primo de Rivera intenta institucionalizar el régimen introduciendo 6 civiles de extrema derecha en el gobierno. Se creó la “Unión Patriótica”, que era un partido sin programa político definido y que daba apoyo social a la dictadura y estaba formado por católicos, funcionarios y caciques rurales. En 1927 se crea la Asamblea Nacional Consultativa formada por miembros de la Unión Patriótica elegidos por sufragio censitario cuya función era la de asesorar al dictador. Se llevaron ha cabo reformas económicas por Calvo Sotelo, que hizo grandes inversiones públicas para promover el intervencionismo y el proteccionismo. Se crearon infraestructuras como carreteras, escuelas, obras hidráulicas, etc. Y Monopolios como CAMPSA, Tabacalera, Telefónica y Loterías. Los principales beneficiados fueron los inversores capitalistas ya que el estado se endeudó y los obreros, aunque mejoraron su calidad de vida, continuaron con bajos salarios. Socialmente se suprimieron las organizaciones radicales y se intervino en la regulación del trabajo introduciendo sectores moderados del movimiento obrero y creando los comités paritarios (Protocolo para la gestión de conflictos entre patronos y obreros con un representante del gobierno presente). La Oposición a la dictadura fueron los líderes de los antiguos partidos dinásticos; algunos sectores del ejército (Que intentaron levantamientos); los republicanos, que con la “Alianza republicana” ejercieron una oposición continua; los nacionalistas ya que se llevaron a cabo medidas anti catalanistas y anti vascas; Anarquistas; Obreros , que al inicio le apoyaban pero veían mal la continuación del Régimen, además de que tendieron a posiciones republicanas; los intelectuales que sufrieron la censura, que llegó a cerrar universidades y la Opinión pública que con la crisis de 1929 y el fin de la expansión económica se volcó en contra de la dictadura. La oposición a la monarquía se vio incrementada en 1929 por lo que el Rey retiró su favor del dictador, que dimitió en 1930. El general Dámaso Berenguer organiza unas elecciones pero no es fácil ya que los partidos políticos están muy desprestigiados además de la impopularidad y oposición al monarca, que está muy organizada. En 1920 se firma el “Pacto de San Sebastián” por republicanos, catalanistas de izquierdas y PSOE y organizan un proyecto político para crear un comité revolucionario. Berenguer es sustituido por Aznar que retrasa las elecciones a 1931. En estas elecciones la republica gana en las zonas urbanas mientras que las zonas rurales apoyan más a la monarquía. Finalmente Alfonso XIII abandona España dando comienzo a la II República.