12.3 Isabel II (1843-1868) El reinado efectivo

Tras la caída de Espartero los moderados se hacen con el poder. Su modelo político es el liberalismo doctrinario basado en la soberanía compartida, sufragio censitario, censura de la prensa, liberta de expresión limitada, eliminación del jurado y la milicia nacional.
Su programa practica el orden y es socialmente oligárquico (burguesía terrateniente, industrial, financiera y los altos mandos del ejército. Su éxito político se debe a la mano dura para evitar la revolución teniendo un sistema autoritario, excluyente y centralista. Tienen una una política de camarillas y corrupción electoral. En la constitución de 1845 se expresa el ideario político del moderantismo con una soberanía compartida entre Rey y Cortes. Hay una declaración de derechos que son regulados posteriormente y se limita la libertad de prensa. Las cortes son bicamerales, tienen un sufragio censitario restringido y se reducen las atribuciones de las cortes para legislar y aprobar contribuciones y aumentan las atribuciones del rey. El rey puede reunir, suspender y disolver el congreso además de nombrar y deponer ministros teniendo el derecho a veto. Como religión adoptan la confesionalidad católica, se elimina la milicia nacional y no hay poder judicial, se habla de administración de justicia.El estado liberal es un estado centralizado y uniformado en el que se admite el sistema foral en Navarra y País Vasco además de estar jerarquizado en jefes políticos provinciales, diputaciones, alcaldes y ayuntamientos. La Legislación liberal crea la guardia civil que combate el crimen en zonas rurales y vela por el orden público, una Ley de Ayuntamientos en la que los alcaldes son elegidos por la corona, una reforma fiscal por Alejandro Mon que incrementó la presión fiscal en impuesto directos e indirectos además de la  fiscalidad en los monopolios de tabaco y lotería y se implantó el sistema métrico decimal y la unificación de las pesas y medidas. También se creó una legislación educativa que fue continuada por Moyano en el 57 en la que había una educación secundaria y universitaria como instrumento del estado habiendo facultades de Derecho, Filosofía, Ciencias, Medicina y Farmacia. Se comienza con un código civil y un código penal y se establece un concordato que sienta las relaciones iglesia-estado autorizando las órdenes religiosas. Y por último se creas una Ley de funcionarios en la que se da un acceso a la administración del estado. En cuanto a su desarrollo político destaca la segunda guerra civil carlista “Guerra dels martiners”, el surgimiento del partido demócrata como consecuencia de los ecos revolucionarios de 1848 y la crisis del moderantismo que se precipitó tras el intento del ultraconservador Bravo Murillo.

En 1854 hay una revolución que nace con el pronunciamiento militar de O´Donell, Dulce y Serrano “La vicalvarada”. Esta revolución triunfa después del manifiesto de Manzanares redactado por Cánovas del Castillo.
Isabel II entrega el gobierno a Espartero y se crea la constitución de 1856, la “non nata” que incluye la soberanía nacional, la milicia nacional, tolerancia religiosa, libertad de imprenta, ampliación de la ley electoral y ayuntamiento y diputaciones electivas. Como medidas económicas está la desamortización de Madoz con la ley de ferrocarriles y la ley de de sociedades Bancarias y Crediticias. El bienio progresista que acaba en 1856 fracasa por la conflictividad social fruto de la epidemia de cólera, del alza de los precios del trigo, las malas cosechas y las huelgas obreras. Ante esto O´Donell reprimió duramente las revueltas. Tras esto se liquida la obra del bienio y se vuelve a la constitución de 1845 liberalizada mediante un acta adicional. La unión liberal que es un partido formado por moderados y progresistas trata de salvar la corona y de modernizar España superando el bipartidismo. Su proyecto político consistía en aislar políticamente  a los sectores más reaccionarios del anterior régimen queriendo ofrecer vías de participación legales al progresismo. Formado por moderados puritanos aperturistas y progresistas resellados se hizo una reformulación del moderantismo en clave puritana. El gobierno de O´donell se caracteriza por la tolerancia llevando a cabo una política oportunista en la que se quiere impulsar obras públicas y prestar atención a cuestiones económicas. En su política exterior destaca una exaltación del nacionalismo y se hacían intervenciones en el extranjero de forma ocasional para desviar la atención en cuestiones políticas básicas como la intervención en indochina apoyada por el colonialismo francés, la campaña en Marruecos, la incorporación de la República Dominicana y la expedición a Méjico  y la guerra del pacífico frente a Perú. Sin embargo la unión liberal era una frágil coalición en la que se marginan los partidos de derechas e izquierdas. Esto junto al resurgimiento del Moderantismo reaccionario apoyado por la corona  y la utilización del poder monárquico en beneficio de los moderados se llega a una crisis política.Tras esto, surgen motines y pronunciamientos como la primera algarada estudiantil por la destitución de Castelar como catedrático por un artículo que criticaba a la reina y la sublevación del cuartel de San Gil. Todo esto lleva a una crisis económica en 1866 que paraliza la construcción del ferrocarril por la falta de rentabilidad y de mercado interior, por la crisis de la industria algodonera y por las malas cosechas y el alza del precio del trigo. El reinado de Isabel II finaliza con el Pacto de Ostende y se exilia a Francia abdicando en el príncipe Alfonso.