El texto que vamos a comentar corresponde al manifiesto del General Miguel primo de Rivera, que aparecen publicados en el ABC, el 14 de septiembre de 1923. Se trata de un texto narrativo y de contenido es esencialmente político-
Social
Podríamos considerarlo igualmente como fuente histórica y con carácter público.
Las circunstancias históricas que enmarcan el documento se caracterizan por una grave crisis social que tiene su base en la situación estructural de la economía española, agravada por la coyuntura internacional provocada por la primera guerra mundial que origina, con radicalización del movimiento obrero, que se concreta en el Trienio Bolchevique de 1918-1920. El fin de la 1ª guerra mundial, con sus secuelas de recesión económica y para empeorará la situación.
La crisis social está acompañada de graves problemas políticos, fruto, de la descomposición de los partidos turnantes. Por otra parte, se producen fracaso del proceso democratizador que debía adecuar la realidad política a los cambios sociales experimentados en el país a comienzos del siglo XX. Esta realidad provoca un aumento de los sectores opuesto al sistema restaurador.
A esta situación, se añadirá entre 1921 y 1923 el problema militar generado por el desastre que el ejército español de Marruecos sufrió en Annual en 1921 ante los rifeños de Ab-el-Krim. La apertura de una investigación con la intención de depurar las responsabilidades precipitó el golpe.
El autor es en General Miguel Primo de Rivera, militar y político español que supo agrupar el descontento derivado de las insuficiencias que había mostrado el régimen de la Restauración y, con el apoyo de los sectores más conservadores, se alcanzó el 13 de setiembre de 1923 en Barcelona contra los “profesionales de la política” instaurando un directorio militar. En 1930 será destituido por Alfonso XIII, emigrando a Francia.
El análisis del lenguaje utilizado por el autor, resulta de un enorme interés para su comprensión última, destaca la utilización del plural de modestia en las formas verbales, cuya significación, es tratar de demostrar la neutralidad y objetividad, hasta la aparición de una referencia a una primera persona, que cambia radicalmente el sentido del discurso, pero no matizado por la confianza puesta en él. Siendo esta nota discordante en la que más llama la atención ya que pone de manifiesto el carácter dictatorial del autor. Continúa después de una forma impersonal que ratificará aquella intención de objetividad.
La aparición de expresiones negativas para referirse a la realidad existe antes se contrapone a términos positivos que discrimine a los objetos propuestos.
En el documento destacan dos ideas fundamentales, en por un lado, las causas que en opinión del autor, provocan el golpe, que no serian otra que las rebeldías masas, la vergüenza y el desorden. Por otro, los objetivos que se persiguen: ponerles pronto radical remedio. Finalmente, como ideas secundarias, las justificaciones aducidas por el autor para llevar a cabo el golpe: el pueblo sano lo manda e impone.
Seguidamente, abordaremos el comentario a través: Las causas del golpe. El deterioro de la situación política España, consecuencia del desmoronamiento y ruptura de los dos partidos tradicionales (liberal y conservador) y los fallidos intentos democratizadores, que intentaban acomodar la realidad política a los cambios sociales, provocaron una gran inestabilidad gubernamental. Esto impide afrontar con rigor los graves problemas sociales y coloniales de España. La crisis de 1917 la abre un periodo y gran agitación social que se prolonga con el denominado Trienio Bolchevique y los sucesos de Marruecos en 1921. Estas rebeldías mansas, son responsables, para el autor, de los acontecimientos. A esto se le une el escaso apoyo gubernamental al acción española en Marruecos, motivado en gran medida por la fuerte contestación social que provoca. Esto le llevará algún mental que los gobiernos que ha tenido en parís en los últimos años no sólo no han resuelto los problemas, sino que incluso favorecen, el ataque a la institución militar. Esta sería el único reducto de disciplina, consecuentemente llamado a resolver los problemas de España.
El golpe de estado que vulnera los principios constitucionales, encontraría su justificación del carácter de servicio del ejército tanto España como al rey. Es el pueblo sano que lo manda e impone como única solución para salvar al país de la hecatombe. Es evidente que el autor se refiere a los sectores que la apoyaron y que no son otros que la burguesía catalana, asustada ante el peligro de retroceso social, y la clase media aterrorizada por el desorden, que puede provocar su proletarización. El recurso recurrente los dictadores a la patria y a los valores más puros de la misma, no es más que pura retórica que tratar, entre otras cosas, evitar la crítica al situar a los opositores como individuos o grupos contrarios a la patria.
Los objetivos vendrían determinados por la situación que provoca el golpe. Así, no es extraño que la primera preocupación del nuevo régimen sea mantener el orden público. Con ese fin, el directorio lleva a cabo una serie de medidas comenzando por disolver las Cortes y que encuentran continuidad en la prohibición de las actividades los partidos políticos, la condena del separatismo y la represión del anarquismo.
Se pretende dar una sensación de normalidad al país asegurando el “funcionamiento normal de los ministerios de organismos oficiales”, con el fin de alcanzar la idea de que el golpe es el resultado lógico de la situación y que en, realmente, lo que se modificaría seria el “desorden callejero” y los “males” que afligen a la patria.
La idea de construir ministerio con los hombres “rectos”, “sabios” y “laboriosos”, que ofrezca el país no se verá corroborada por los hechos, por cuanto la única actuación, fue la creación, por Primo de Rivera, de un partido único y una Asamblea Nacional, de inspiración netamente fascista.
En cambio de coyuntura internacional, unido al aumento a la posición al régimen, que perdió el apoyo de la UGT y el PSOE a partir de ese año, provocando la destitución de primo de Rivera en 1913. Esencialmente, se trata de un manifiesto que pretende justificar el golpe de estado por la situación social y política que atraviesa el país, proponiendo como solución un poder fuerte que restablezca el orden. La implicación de la monarquía en los hechos que provocará su caída dando lugar a la aparición de la II República en 1931.