Aceifas o razias:
Expediciones militares musulmanas con las que pretendían imponer su autoridad sobre los reinos cristianos del norte de la Península y obtener un cuantioso botín. A finales del Siglo X las frecuentes incursiones de Almanzor mantuvieron a las poblaciones cristianas del Norte en peligro constante.
Taifas
: Deriva del término árabe que significa «bandería». Se aplicaba a las distintas etnias, árabe, bereber y eslava, que se repartieron el gobierno de las diferentes ciudades y territorios de al-Ándalus desde la descomposición del Califato de Córdoba. Aunque la etapa de los primeros reinos de Taifas se extiende entre 1031 y 1090, también se utiliza el término para referirse a los diferentes Estados andalusíes que se formaron tras las crisis de los imperios almorávide y almohade (segundas y terceras taifas, respectivamente).Aljama:
Comunidad judía local, similar al municipio, creada en la Edad Media. Organizaba la vida social, económica y religiosa. Contaba con impuestos propios sobre el consumo de la carne y el vino, autorizaba las construcciones y los negocios en los barrios judíos, y realizaba labores de tipo asistencial. Se identifica por extensión con los barrios específicos que ocupaban los judíos dentro de ciudad medieval, las juderías.Inquisición:
tribunal eclesiástico encargado de perseguir y castigar a los herejes y otros delitos como la brujería, la blasfemia o la bigamia. Institución que existía desde el Siglo XIII en diversos países pero dependía de los obispos y en última instancia del Papa. Los Reyes Católicos en 1478 establecieron la Inquisición en Castilla, dependía exclusivamente de la monarquía, al obtener del Papa Sixto IV la facultad de nombrar inquisidores. El Santo Oficio fue integrado en el sistema político de los Consejos, era el único que abarcaba todos los reinos de la monarquía. Tanto el Inquisidor General como los miembros del Consejo eran nombrados por el rey. Su esfera de acción se extendíó además de las herejías judaizantes, a morisco s y protestantes. Se convirtió en una de las principales y más temidas instituciones de la Edad Moderna y en un doble instrumento político y religioso al servicio de la monarquía absoluta. Fue definitivamente suprimida en 1834.Sentencia arbitral de Guadalupe
Promulgada en 1486 en Cataluña puso fin al largo conflicto de los payeses de remensa que había dado lugar a dos guerras. Por la sentencia arbitral fueron abolidos los malos usos y los campesinos obtuvieron la libertad personal y el dominio útil de de la tierra a perpetuidad a través de contratos enfitéuticos, a cambio los señores mantuvieron la jurisdicción señorial el dominio directo y el derecho a percibir censos y otros derechos.Tratado de Alcagobas
(1479). Tratado de paz entre Portugal y Castilla por el que el rey Alfonso V evacuó los territorios ocupados y se volvíó a las fronteras anteriores entre ambos reinos; reconociendo a Isabel como reina de Castilla. En contrapartida, Castilla se comprometíó a no interferir en la expansión portuguesa en la costa africana.Tratado de Tordesillas:
1494: Acuerdo firmado entre Portugal y Castilla un año después de la mediación del papa Alejandro VI (Bula Inter Caetera), las reticencias de Portugal a aceptar la delimitación establecida en esa Bula, llevan a ambos reinos a establecer en el tratado de Tordesillas una distancia de 370 leguas al Oeste de Cabo Verde. Esta delimitación posibilitaría los derechos portugueses sobre Brasil.Guerra de los Treinta Años:
Conflicto bélico europeo en el que se mezclaron problemas políticos y religiosos. Iniciada en 1618, en defensa de los intereses territoriales de los Austria en el Imperio alemán terminó siendo una guerra de carácter europeo y finalizó en 1648 con la Paz de Westfalia. Sucesivas potencias europeas, en su mayoría protestantes, se enfrenta Paz de Westfalia:Firmada en 1648 supuso la creación de una nueva Europa con dos nuevos estados independientes (las repúblicas de Holanda y Suiza), una nueva potencia política (Francia) y los dos imperios de los Habsburgo en franca decadencia. Significó el triunfo de la concepción horizontal del poder, que consistía en que el emperador alemán y el papa no tendrían mayor preeminencia que el resto de los países fueran católicos o protestantes.