FASES DE LA Guerra Civil ESPAÑOLA
La Guerra Civil duró casi tres años. La dinámica de la contienda, se redujo a un avance casi constante de los sublevados. La Guerra Civil puede dividirse de hecho en cuatro fases principales
La primera fase se prolongó de Julio a Noviembre de 1936. Fue, , la puesta en marcha del segundo proyecto bélico de los militares insurgentes la pinza de los ejércitos del norte al mando de Mola y las tropas africanas dirigidas por Franco desde el sur. Mientras el primero logró una rápida conexión de los territorios bajo control nacionalista en la Meseta, a principio de Agosto se produjo el traslado de las tropas en África hasta la Península; ante el control casi absoluto de la Marina por tropas leales a la República, el traslado del ejército colonial en Marruecos se realizó mediante el primer gran puente aéreo de la historia, para lo que se necesitó la ayuda de la aviación alemana. Franco controló rápidamente Cádiz y en uníón con Yagüe desde Sevilla dominaron los núcleos antes aislados de Córdoba, Málaga y Granada. Una rápida movilidad hacia Extremadura permitíó la comunicación directa entre las dos grandes zonas controladas por los nacionales. Inmediatamente se ordenó el avance sobre Madrid, aunque fue aplazado unos días para ocupar Toledo, donde se habían hecho fuertes y resistían el cerco los cadetes y mandos de la Academia de Infantería. En Octubre se inició la primera ofensiva sobre Madrid, pero fue frenada por la acertada defensa desarrollada por Miaja, el general más prestigioso que permanecíó a las órdenes del Gobierno republicano, y, sobre todo, con la respuesta entusiasta de una población con un exaltado sentido de defensa de la República que además contó con los primeros auxilios de las brigadas internacionales. Tras la sorpresa que supuso la dura resistencia de la capital, lo que supónía el fracaso del segundo plan de los nacionales, la segunda fase de la guerra se caracterizó por la reorganización de los frentes, la incorporación del elemento civil al ejército en la zona nacional, la internacionalización de la guerra y el definitivo establecimiento del liderazgo de Franco en el bando nacional. Una segunda ofensiva sobre Madrid fue frenada de nuevo en Febrero y Marzo (batallas de Jarama y Guadalajara, ésta con la intervención mayoritaria de soldados italianos en el bando nacional); esto hizo variar sensiblemente los planes y los combates se centraron en el frente norte. De Mayo a Octubre de 1937, la bolsa septentrional, todavía bajo control republicano, fue cayendo paulatinamente: Bilbao en Junio, Santander en Agosto, Asturias en Octubre. Para aliviar la presión el mando republicano realizó dos maniobras de distracción: en Brunete, para romper el cerco sobre Madrid, y en Belchite, para tomar Zaragoza; sin embargo, ambas tentativas fueron rechazadas. La tercera fase de la guerra estuvo determinada por el logro del bando nacional de dividir en dos partes el territorio todavía controlado por la República. La iniciativa en esta ocasión correspondíó al mando republicano, que lanzó un fuerte ataque para tomar Teruel en Diciembre de 1937; aunque el Estado Mayor nacionalista pretendía reactivar el cerco sobre Madrid para provocar su definitiva caída, Franco no podía permitir un paso atrás en Aragón. Con condiciones climáticas muy adversas, el resultado de esta decisión fue la toma, por unos y por otros, de la ciudad de Teruel, imponiéndose definitivamente las tropas de Franco. Desde ese emplazamiento una serie de movimientos condujo a la conquista de Vinaroz y con él la llegada de las tropas naciones al Mediterráneo y la división de la zona republicana en dos partes incomunicadas. Para evitar esta escisión el Gobierno republicano lanzó un duro ataque cruzando el Ebro y tratando de unir Valencia y Cataluña para rodear al ejército nacional recién llegado al Mediterráneo. Esta campaña dio origen a la larga y sangrienta batalla del Ebro, que se prolongaría de Julio a Diciembre de 1938 y sería ganada por el ejército rebelde, marcando así la definitiva suerte de la República. La última fase de la guerra es la de la rápida caída de los dos territorios bajo control republicano. Desde finales de Diciembre a Febrero de 1939 fue ocupada sin grandes problemas Cataluña. A finales de ese mes Franco es reconocido oficialmente como Jefe del Estado por los gobiernos de Francia y Gran Bretaña. Desde comienzos de Marzo el avance de las tropas nacionales sobre territorio republicano es constante y sin obstáculos. En Madrid se formó una Junta de Defensa para negociar el final de la guerra, pero Franco exigíó la rendición incondicional. Tratando de evitar un sangriento asalto sobre la capital, Madrid cayó el 28 de Marzo y en los dos días siguientes, los grandes centros aún bajo control de un Gobierno republicano que había partido hacia el exilio: Valencia, Cartagena, Murcia, Almería y Menorca. El día 1 de Abril de 1939 todas las emisoras de radio difundieron el último parte de guerra, prólogo de la dictadura que acababa de comenzar: «En el día de hoy, cautivo y desarmado el ejército rojo, han ocupado las tropas nacionales sus últimos objetivos militares. La guerra ha terminado».
CONSECUENCIAS DE LA GUERRA
Durante la Guerra Civil la represión contra ciertos grupos de personas que se opusieron fue muy dura al igual que sus consecuencias. En el ámbito demográfico una de las consecuencias más importantes fueron la pérdida de miles de vidas humanas, debido a esto la natalidad descendíó notablemente, cientos de miles de personas tuvieron que marchar al exilio. Otra causa muy importante fueron las epidemias, el hambre generada en ese momento. Las consecuencias económicas sociales y políticas fueron las siguientes: Daños en viviendas e infraestructuras fueron cuantiosos, pueblos enteros desaparecidos, la producción del sector agrario de 1939 bajó un 20% respecto a los años anteriores. En el sector industrial la producción se contrajo un 30%, el índice de coste de vida aumento y hasta 1954 la renta per cápita no volvíó a pasar los niveles anteriores a la guerra. Otro aspecto fue la deuda que quedó a España al tener que devolver a los países que nos ayudaron en ese momento. Los vencidos fueron humillados, marginados, sancionados económicamente, expulsados de sus empleos y encarcelados. En 1939 desaparece el derecho a huelga y entre Enero y Febrero de ese mismo año, cuando la guerra estaba casi terminada y los nacionales ocuparon Barcelona miles de republicanos tuvieron que salir exiliados a países como Francia. También un cuantioso número de funcionarios pertenecientes sobre todo a la enseñanza fueron ejecutados, lo que se conocíó como la depuración de funcionarios. La falta de productos de primera necesidad llevó al racionamiento y favorecíó la ruralización del país.
EVOLUCIÓN POLÍTICA DE LAS DOS ZONAS DURANTE LA Guerra Civil
Evolución política del bando republicano
Por lo que al bando republicano se refiere podríamos distinguir 4 grandes momentos:
1. La impotencia del poder legal republicano (Julio-Septiembre 1936). Colapso del Estado republicano, incapaz de controlar su propio territorio. Nada más producirse el golpe militar, se llevó a cabo un intento frustrado de constituir un Gobierno de conciliación con los rebeldes. Al fracasar esta opción el Gobierno presidido por José Giral procederá a armar a las milicias obreras, que se convirtieron, paradójicamente, en las defensoras de un Gobierno republicano en el que no participaban. Se procede también a reprimir a todo sospechoso de colaborar con los rebeldes y los sindicatos llevarán a cabo numerosas incautaciones de propiedades privadas y del clero, servicios públicos, tierras e industrias. En numerosos núcleos controlados por la República, los sindicatos y partidos obreros quieren desatar una revolución olvidándose de que estaba en marcha una Guerra Civil.
2. El gobierno de coalición de Largo Caballero (Septiembre-Mayo 1937). Sindicatos y partidos obreros entran a formar parte de un gobierno de coalición presidido por Largo Caballero y parece que toman conciencia que antes era ganar la guerra que desatar una revolución. A pesar de las medidas que adoptó, la retirada del Gobierno a Valencia ante lo que se percibía como la inminente caída de Madrid en manos de los sublevados, hizo descender su popularidad. Los enfrentamientos internos entre las distintas fuerzas gubernamentales (CNT, UGT, POUM, PSUC) estallarán finalmente en Mayo de 1937 en Barcelona, culminando con la dimisión de Largo Caballero, la disolución del Gobierno de coalición y el acceso a la presidencia del doctor Juan Negrín.
3. El gobierno de Negrín (Mayo 1937-Febrero 1939). Se procede a la normalización institucional, ya sin la presencia de ugetistas y cenetistas. El Gobierno se trasladó a Barcelona, recuperó el control del Estado, se restringieron las colectivizaciones y se redujo el poder obrero. En este período constatamos las diferentes concepciones sobre cómo llevar la guerra que existían entre los republicanos. Mientras que Negrín propónía una resistencia a ultranza a Franco, figuras como Prieto y Azaña se mostraban partidarias de una salida negociada con los rebeldes.
4. El golpe del coronel Casado (Febrero-Abril 1939). Las diferencias en el seno republicano vuelven a emerger en los últimos meses de la contienda. Concretamente una trama conspiratoria liderada por el coronel Casado en la que también participaron socialistas como Besteiro y cenetistas madrileños, entabla una serie de negociaciones con Franco que precipitan el final de la guerra.
Evolución política del bando sublevado
4 grandes fases:
1. La organización provisional de la sublevación (Julio-Septiembre 1936). Inicialmente la sublevación no dejó de ser un pronunciamiento militar clásico, aunque frustrado, que tenía por objeto derrocar al Gobierno. En las primeras semanas no existíó ningún tipo de proyecto político común entre los militares sublevados, salvo crear un poder militar que anulara la legislación del Frente Popular y liderara la represión sistemática de quienes apoyaron al Gobierno republicano. La encargada de administrar esta doble política de contrarrevolución y represión fue, en principio, la Junta de Defensa Nacional de Burgos.
2. El mando único de Franco (Septiembre-Noviembre 1936). El 1 de Octubre de 1936 en Burgos, Franco fue elegido para ostentar el mando militar y político único con los títulos de Generalísimo y jefe del Gobierno del Estado español. Amén del ejército, durante esta etapa se concreta el apoyo explícito de la Iglesia católica a los sublevados. La sublevación no tardó en ser calificada de cruzada guiada por el Caudillo.
3. Hacia la unificación (Noviembre 1936-Abril de 1937). Se desarrolla entonces el proceso de unificación de las fuerzas políticas que apoyaban a Franco, carlistas y falangistas, creándose la Falange Española Tradicionalista y de las JONS.
4. La configuración del nuevo Estado. El primer Gobierno (Abril 1937-Abril 1939). El poder absoluto de Franco se vio reforzado con la creación de dos nuevos organismos políticos: la Junta Política y el Consejo Nacional de FET de las JONS y en Febrero de 1938 se formó un primer Gobierno compuesto por 11 ministros y presidido por Franco, que ostentará hasta 1973 la doble jefatura de Estado y de Gobierno