3.5 EXPLORACIÓN Y COLONIZACIÓN DE AMÉRICA. CONSECUENCIAS DE LOS DESCUBRIMIENTOS
En las dos primeras décadas los españoles consolidaron su dominio sobre las Antillas. Los descubridores que destacaron fueron: Juan Díaz con la desembocadura del río de la plata, Vasco Núñez de Balboa que atravesó el istmo de Panamá descubriendo el pacífico y confirmando la existencia de un nuevo continente llamado América, Magallanes y Juan Sebastián con la expedición que culminó con la primera vuelta al mundo… Tras las conquistas empezó un proceso de colonización y explotación de los recursos. Desde España los asuntos americanos se llevaban a través de La casa de contratación de Sevilla y luego el concejo de Indias.
En América se utilizó la división en virreinatos, gobernaciones, capitánías y audiencias. Desde el punto de vista moral se promulgaron las Leyes nuevas que prohibían ciertos abusos, desde el demográfico el aumento de la mortalidad obligó a traer mano de obra esclava de África, desde el social los criollos constituirán el nuevo grupo privilegiado de la sociedad e intensa mezcla de razas que fomentará la extensión de culturas… Desde el económico los viajes a América se organizaron mediante un sistema de flotas. El intercambio de nuevos productos y la llegada de grandes cantidades de oro y plata producirán el fenómeno de la revolución de los precios.
3.6 LOS AUSTRIAS DEL Siglo XVII: EL GOBIERNO DE VALIDOS. LA CRISIS DE 1640
Los monarcas que reinaron en la España del Siglo XVII tuvieron como carácterística común el empleo de validos en el gobierno de la monarquía que tenía como ventaja que el Rey nunca era responsable de una decisión errónea. Los conflictos internos están relacionados con la crisis económica y demográfica, el empobrecimiento social y la decadencia política e institucional de la monarquía.
Felipe III continuó la política de intolerancia religiosa y decretó la expulsión de los moriscos en Valencia, Aragón y Castilla, esto produjo despoblamiento y falta de mano de obra. Otro problema era el valido de Felipe IV, el Conde Duque de Olivares que propuso la unificación jurídica e institucional de la monarquía expuesta en el Gran Memorial.
La Uníón de Armas fue rechazado por las cortes, la alta nobleza se quejaba de su marginación del poder… Esta situación desencadenó levantamientos en los años 30 que llevaron a la crisis de 1640 cuando estallaron rebeliones independentistas en Cataluña y Portugal. En Cataluña se dio muerte al Virrey (Corpus de Sangre), esta revuelta no finalizó hasta la conquista de Barcelona. La rebelión portuguesa tuvo un carácter nobiliario y anti castellano y la nueva monarquía de Juan IV se consolidó con la ayuda francesa e inglesa y España tuvo que reconocer su independencia en 1668. Felipe IV muere y la paz social tardaría en llegar, la monarquía española demostraba debilidad y decadencia.
3.7 LA GUERRA DE LOS TREINTA AÑOS Y LA PÉRDIDA DE LA HEGEMONÍA ESPAÑOLA EN Europa
Con Felipe III se consigue la Paz de Londres con Inglaterra y La tregua de los Doce Años con Holanda que permitíó la recuperación de la Hacienda Real. Con Felipe IV España se enfrenta junto con los Habsburgos austríacos con los protestantes alemanes y holandeses primero y luego con Francia, Dinamarca y Suecia en la Guerra de los Treinta Años.
Este conflicto finalizó con la Paz de Westfalia que supuso la independencia de las provincias unidas, la pérdida de la hegemonía española en Europa… Por la Paz de los Pirineos
Felipe IV cedía Rosellón y Cerdeña a la Francia de Luis XIV y se producía el enlace con la infanta española María Teresa de Austria que posibilitó la entrada de los Borbones en el trono español. Con Carlos II continuaron los enfrentamientos con Francia. Tras la independencia de Portugal, conservamos Ceuta por el Tratado de Lisboa.
Los últimos problemas de la monarquía son el problema sucesorio con Carlos II que daría lugar a la Guerra de Sucesión y el final de la Casa de Austria.
3.8 PRINCIPALES FACTORES DE LA CRISIS DEMOGRÁFICA Y ECONÓMICA DEL Siglo XVII Y SUS CONSECUENCIAS
Bajo los Austrias menores (Felipe III, Felipe IV y Carlos II) el Imperio español entró en una grave crisis general que se manifestó en derrotas militares y ruina económica. Las causas se encuentran en la herencia económica del Siglo XVI: el descenso demográfico, la ruina financiera del Estado, la inflación, la mentalidad rentista de la sociedad… Las consecuencias : la caída de la producción agraria y el empobrecimiento de los campesinos (sometidos a altos impuestos, endeudados…) que tuvieron que emigrar a las ciudades, la artesanía y manufacturas entraron en crisis, se colapsó el comercio interior debido a las malas comunicaciones… La sociedad siguió siendo estamental con algunos rasgos propios como una élite aristocrática que ocupaba los altos cargos diplomáticos y militares, la consolidación del sistema gremial, el requisito de “limpieza de sangre” mientras la burguésía quería ennoblecerse y el campesinado se arruinaba. A partir de 1680 se comienza a apreciar una lenta recuperación económica y demográfica que favorecerá la expansión.
3.9 CRISIS Y DECADENCIA DE LA MONARQUÍA HISPÁNICA: EL REINADO DE Carlos II Y EL PROBLEMA SUCESORIO
Carlos II subíó al trono con cuatro años por lo que se encargó la regencia a la reina Mariana de Austria junto con un consejo de regencia que sustituyó por el valimiento de su confesor. La corte se convirtió en una lucha por el poder que no se soluciona ante la incapacidad del rey durante su madurez para las labores de gobierno.
Este reinado de inestabilidad estaba marcado por el problema sucesorio: Carlos II se casó dos veces sin tener descendencia, por lo que se convirtió en un tema de política internacional ya que había dos posibles herederos:
Carlos de Austria o Felipe de Anjou en un momento de hegemonía francesa y de temor por parte de algunas potencias europeas que acabará con el estallido de la Guerra de Sucesión a la muerte de Carlos II.
En el plano Internacional buena parte del reinado estuvo sometido a la política expansiva de Luis XIV de Francia que llevó a la pérdida de territorios en Europa y la consideración de la monarquía como un actor secundario en el plano de las relaciones europeas.