CAMBIOS SOCIALES CULTURALES Y Económicos musulmanes en Al-Ándalus


Al-Ándalus
Durante siglos, con grandes diferencias según las zonas de la Península, Al-Ándalus aportó a la vida de las gentes que habitaban ese territorio formas de producir y vivir distintas a las de los reinos cristianos de la Europa Occidental, sobre todo en los primeros siglos de la Edad Media.
Cambios económicos:
La aportación musulmana a la agricultura fue determinante para la conformación del paisaje agrícola de gran parte de España. Introdujeron el regadío, una enorme variedad de árboles frutales y verduras y la agricultura intensiva, que generó excedentes
orientados sobre todo al mercado urbano. Tuvo un especial desarrollo la agricultura basada en la gran propiedad trabajada mayoritariamente por pequeños campesinos en 
régimen de arrendamiento.
Los musulmanes impulsaron la trilogía mediterránea 
(cereales, vid y olivos) y aportaron especies como los cítricos (naranja, limón, lima) y otras frutas y verduras como la caña de azúcar, el algodón, el azafrán, el arroz…. Lo 
más determinante fueron los sistemas de regadío, con la introducción de norias y acequias para conducir el agua. 
En la ganadería, abundaban ovejas, cabras, caballos y mulas.
Con respecto a la minería, extrajeron hierro, plomo, cinabrio, cobre y estaño. De los ríos obténían oro y piedras preciosas. También se interesaron por las maderas, la sal, el mármol y las piedras de construcción.Las actividades artesanales se desarrollaban en pequeños talleres cuyos artesanos e agrupaban en una especie de gremios, aunque también había grandes talleres del Estado. La producción abastecía al mercado local y comarcal, pero se destinaba asimismo al comercio exterior. Trabajaron, sobre todo, el textil (tejidos de seda y lino). También trabajaron: pieles, cueros, vidrio, papel, cerámica, armas, y objetos con oro, plata, marfil y piedras preciosas procedentes de la minería.En cuanto al comercio, Al-Ándalus estaba integrado en un circuito económico exterior que se extendía por todo el Mediterráneo, se adentraba en África, hasta las minas de oro de Sudán, y se extendía hacia Oriente (India, China…) y la zona del Báltico. La existencia 
de una moneda fuerte y estable -el dinar de oro y el dírham de plata- permitieron almundo musulmán controlar, hasta el Siglo XIII, gran parte del comercio en esa zona sin competencia de los reinos cristianos europeos. Se comerciaba con oro Sudánés, esclavos negros, especias y productos de lujo. En las ciudades, el comercio interior se realizaba en un zoco constituido por un laberinto de callejuelas especializadas cada una en un determinado producto. La actividad del zoco era estrictamente vigilada por el almotacén.Cambios sociales.Las ciudades no decayeron, como en el resto de Occidente, y fueron el centro de la vida económica, política y social.
La mayoría de las ciudades eran de la época romana, pero también se crearon ciudades nuevas (Almería, Madrid, Calatayud, …). Algunas de las ciudades andalusíes eran las más grandes de Occidente medieval, como el caso de Córdoba. Córdoba era, sobre todo, el centro del poder musulmán en Al Ándalus y, aunque contaba con numerosos arrabales, el centro de la ciudad era la medina. En la medina se encontraba el alcázar, la mezquita mayor y el zoco, y los poderes públicos se encargaban de hacer reformas urbanas, y de instalar mercados, baños, hipódromos y bibliotecas públicas. Córdoba era una ciudad abierta en la que convivían musulmanes, cristianos y judíos.Dos nuevos grupos sociales llegarán a la península con la llegada de los musulmanes. La minoría de origen árabe que formaba la élite social. Estos serán los grandes propietarios de las mejores tierras y ocupaban altos cargos en la administración. El grupo de origen bereber que tenía una posición inferior. Muchos eran miembros del ejército y de los cargos menores en la administración. También podían tener otros trabajos como artesanos, agricultores, etc. En ocasiones protagonizarán revueltas.La mayoría de la población musulmana estaba formada por los muladíes, es decir, descendientes de los antiguos hispanovisigodos que adoptaron la religión, la lengua y las costumbres islámicas. Algunos lo hicieron porque de esa manera no tenían que pagar impuestos. Una vez que la población hispanovisigoda se islamiza, surgirá un nuevo grupo social, los mozárabes, los cuales se conformaron como una minoría cristiana dentro de esa mayoría musulmana. Como no eran musulmanes, debían pagar un impuesto especial. Los judíos formarán una minoría muy activa en el terreno económico.
Cambios culturales.
La lengua árabe, las costumbres islámicas y los conocimientos aportados por su relación con territorios de Bizancio y Oriente pasaron a formar parte de nuestro patrimonio cultural.
Las aportaciones de la presencia musulmana en la Península son innumerables y forman parte de nuestro patrimonio cultural. El castellano tiene más de4000 palabras de origen árabe, entre ellas muchos topónimos. Los árabes alcanzaron Un gran desarrollo científico y social: la Astronomía, la Botánica, la Medicina, la Farmacología y las Matemáticas (álgebra, geometría, aritmética y trigonometría) fueron Las ciencias más estudiadas Eran musulmanes los mejores médicos, como Abu bekr-muhammad ben Zakaría Arr- Hazí, los mejores matemáticos, como Mohamed ben musa al-juwarizmi, los mejores Filósofos, como Avizena y Averroes, los mejores geógrafos e historiadores, como Ibn Jaldún, los mejores alquimistas y astrónomos… Desde al-Ándalus, los aportes Científicos de los árabes fueron difundidos por Europa. Así los europeos conocieron entre otros, la pólvora, el papel, la numeración arábiga, la Brújula… Se enteraron de los nuevos descubrimientos en matemáticas, en física, en Alquimia… todas esas aportaciones fueron muy importantes para el desarrollo de nuestra Civilización. La España musulmana produjo una cultura floreciente, sobre todo tras la llegada al Poder del califa Al-Hakam II (961-976). A él se le atribuye la fundación de una biblioteca De cientos de miles de volúMenes (más de 400.000) que era impensable en la Europa de Ese tiempo. 
En cuanto al arte, la ornamentación es, sin duda, uno de los aspectos que más han Contribuido a la unificación del arte musulmán, se logra un efecto tridimensional que dota A los edificios de cierto misterio y ligereza. La luz y el agua son elementos Indispensables para lograr ese efecto casi irreal. 
En cuanto a la arquitectura, son numerosos los edificios hispano-musulmanes que aún Se pueden admirar en España. Entre los de carácter religioso constan las mezquitas. De Gran interés son las murallas y alcazabas, construcciones típicamente defensivas Que, en ciertas ocasiones, albergan en su recinto auténticas ciudades residenciales. Dentro de la arquitectura residencial destacan también los palacios y alcázares, Algunos tan suntuosos como el de la Alhambra y el de Medina Azahara, auténtica ciudad- Palacio. Elementos de la vida cotidiana como la gastronomía provienen de la herencia Musulmana. También parte de nuestra música, instrumentos y folklore

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