Los Austrias Mayores. Política exterior. Los Austrias Mayores llevaron a cabo una política de hegemonía política basada en la monarquía autoritaria, y territorial que les condujo a costosas guerras, al agotamiento de los recursos y a la bancarrota de la Hacienda que provocaron que ya a finales del siglo aparecieran los primeros signos de crisis económica. Con la muerte de Fernando el Católico, se produce el advenimiento de Carlos V de Alemania , de la familia de los Austrias debido a la incapacitación de Juana, hija de los Reyes Católicos y madre de Carlos V. Entre sus dominios encontramos la herencia paterna, Países Bajos y Franco Condado, de la herencia materna, Corona de Castilla, Canarias y América, la herencia del abuelo materno, Corona de Aragón, Nápoles, Cerdeña, Sicilia y posesiones africanas y la de su abuelo paterno Austria,Tirol y el título de emperador Carlos V. A pesar del ideal imperial, la prioridad de Carlos V en política exterior consistíó en la defensa obstinada de su herencia dinástica, por lo que se dotó de un cuerpo de embajadores por Europa y un ejército permanente, ambos financiados con el oro y la plata llegados desde América. Con todo, durante su reinado Carlos V tuvo que hacer frente a grandes conflictos tanto nacionales como internacionales. Esta revuelta termina con la victoria de Carlos V en Villalar . Al igual que había ocurrido en Castilla, Carlos V reprimíó duramente los levantamientos y practicó una política de represión severa contra las ciudades sublevadas como Valencia y Játiva que dejó una profunda huella en la economía y sociedad de los reinos afectados. En política internacional, el conflicto con Francia fue prolongado, los dominios de Carlos V impedían al rey francés Francisco I el acceso a los Países
Bajos y a Italia, por lo que Carlos V se enfrentó con el monarca francés hasta en seis ocasiones. Carlos V consiguió territorios italianos al apoderarse de los Ducados de Milán y la Toscana, lo que implicaba presiones sobre el papado en cuanto a su control de la Iglesia y aunque sus victorias aumentaron su prestigio militar la contrapartida más importante de las guerras con Francia fue la ruina financiera que supusieron para su Imperio
. Por otro lado, el Imperio Otomano amenazaba al Imperio de Carlos V en torno al Danubio y en el Mediterráneo, pero para el emperador no supónía una prioridad. Por último, en Alemania, tuvo que enfrentarse a la difusión del protestantismo de Lutero, que se uníó a la Liga Esmalcalda, coalición política y económica contra la Monarquía Hispánica. Sin embargo, Carlos V tenía como objetivo llegar a un compromiso con los protestantes para así poder atraer a los príncipes alemanes contra Francia promoviendo la convocatoria de un Concilio. Así, Carlos V inició una guerra de carácter político contra los que se habían revelado contra su autoridad. Con la Paz de Augsburgo otorgó la libertad religiosa a los príncipes alemanes y finalmente dividíó sus posesiones entre su hijo Felipe, que heredó la Monarquía Hispánica, los territorios borgoñones en los Países Bajos y centro Europa, y su hermano Fernando al que le dejó los territorios en Alemania Y el título de emperador del Sacro Imperio. Con la abdicación de Carlos V, su hijo, Felipe II , heredó todo el territorio peninsular de su padre. En cuanto a la política interior, los principales conflictos tuvieron como causa la actitud de intolerancia religiosa del monarca y el afán centralista en su política.
En Aragón, el intento de Felipe II como virrey a un castellano dio lugar a una rebelión que puso de manifiesto la yuxtaposición entre la legalidad foral y la voluntad centralizadora del monarca y que fue duramente sofocada por las tropas del monarca. La política exterior de Felipe II se centró en la hegemonía europea, la lucha contra los turcos en el Mediterráneo y la defensa del catolicismo. Tras la muerte sin descendencia del rey de Portugal en 1580, Felipe II recibíó esta corona por ser el hijo de Isabel de Portugal. Las Cortes de Thomar, lo reconocieron oficialmente como rey de un gran Imperio marítimo, que marcó el viraje definitivo de la política de Felipe II hacia el Atlántico. Felipe II envió al duque de Alba para intentar acabar con la oposición política y religiosa. Con todo esto, se considera la política de Felipe II un fracaso por la carencia de una flota de guerra, la derrota en la guerra de propaganda y las dificultades financieras del rey. El conflicto en el Mediterráneo fue la prioridad de los primeros años del reinado de Felipe II, quien lleva acabo una política defensiva de costas y buscó nuevos aliados. Por otro lado, la corona inglesa, cada día más interesada en América, donde España se reservaba el monopolio comercial, favorecíó los continuos actos de piratería y apoyó a los rebeldes flamencos y holandeses, hecho que provocó que Felipe II decidiera enfrentarse a Inglaterra. El prestigio internacional que lograron los Austrias Mayores en sus reinados llevó a que esta etapa fuera conocida por su gran esplendor en la Historia de España a nivel político y de identificación cultural con los valores del catolicismo, sin embargo esto no se tradujo en una mejora del nivel de vida de las clases urbanas y campesinas ya que la llegada de metales preciosos provocó una enorme inflación.