Tras el Desastre del 98, que supuso la pérdida del Imperio colonial, las autoridades españolas encontraron en
Marruecos uno de los pocos territorios africanos que quedaban por repartir entre las potencias europeas) un lugar donde recuperar el prestigio internacional del país, poner fin al aislamiento, y alcanzar otros intereses (políticos, militares, económicos).
En 1904, ante la conjunción de intereses de Francia y
España sobre el territorio y la oposición británica a que los franceses dominaran la otra orilla del Estrecho de Gibraltar, se acordó repartir el sultanato de Marruecos de la siguiente manera:
- a España le correspondíó la zona del Rif (pequeña regíón montañosa al norte con yacimientos mineros)
- y a Francia la mayoría del país (zonas más ricas).
Este reparto no gustó al emperador alemán, Guillermo II, que abagó por un Marruecos independiente. Así, en 1906 se convocó la Conferencia de Algeciras, en la que se confirmó el reparto del territorio acordado dos años antes entre Francia y España con el apoyo del Reino Unido.
En 1909, el ejército español inició la ocupación militar de la zona, pero las tribus bereberes del Rif, llamadas cabilas, lideradas por Abd el-Krim, mostraron resistencia y derrotaron a las tropas españolas en el Barranco del Lobo.
Además, para evitar la caída de Melilla el gobierno de Maura decidíó movilizar a los reservistas y aumentó el número de soldados españoles en el Rif. Como consecuencia, se produjo la Semana Trágica de Barcelona (1909): un movimiento de protesta popular en Barcelona apoyado por anarquistas. Socialistas y republicanos. No obstante, el sistema de quintas permitía que varones adinerados se libraran de ser reclutados para la guerra. El sindicato de orientación anarquista, Sociedad Obrera, promovíó una huelga general, apoyada por la UGT (sindicato socialista) y por grupos republicanos. Aunque comenzó de forma pacífica, la llegada de noticias sobre la derrota de las tropas españolas en el Barranco del Lobo, donde fallecieron unos 200 soldados españoles desembocaron en una espiral de protestas y violencia que se extendíó durante siete días entre Julio y Agosto. El anti-belicismo se transformó en anticlericalismo con la quema de más de 60 iglesias y hubo unos 150 muertos. Como consecuencias:
– La represión de Maura incluyó cinco condenas a muerte, entre ellas la del anarquista y pedagogo Francisco
Ferrer i Guardia.
- la desestabilización de los partidos de turno y a la caída del gobierno de Maura (dimitíó en Octubre 1909)
- el rey disolvíó las Cortes y entregó el gobierno a José
- Canalejas, líder liberal. Este realizó un intento reformista desde dentro del sistema de Restauración.
Finalmente, fue asesinado por un anarquista. En este momento, los partidos dinásticos quedaron fragmentados y sin un líder. Por ello, se alternaron el poder. Tomó el mando el Partido Conservador. Con Eduardo Dato, quien murió también en un atentado anarquista. - Se produjo una reorganización de las fuerzas de la oposición, como el fortalecimiento del republicanismo y el acercamiento de las fuerzas de izquierdas.
- Además, la Alianza Republicano-Socialista crecíó, al igual que el desencanto de muchos obreros.
- Por último, se ocasiónó un reforzamiento del catalanismo republicano independentista y de izquierdas, por el desprestigio de la Liga Regionalista.
En 1912 se formó el Protectorado español en Marruecos (con capital en Tetuán) mediante el cual España controló política y económicamente su área de influencia, respetando formalmente a las autoridades locales. El dominio del protectorado de Marruecos estaba sostenido por Alfonso XIII y por una parte del ejército, los militares africanistas.
En el verano de 1921, para consolidar la ocupación del territorio las tropas españolas iniciaron un avance desde Melilla, planificado por el general Silvestre. Silvestre planteó una operación militar arriesgada sobre la bahía de Alhucemas que fue abortada por el ejército de Abd-el-Krim provocando la muerte de 12.000 soldados españoles y la llegada del eiército rifeño a las puertas de Melilla.
El llamado Desastre de Annual conmociónó a la opinión pública española que se rebeló (as familias pobres que no podían acceder a la redención y solo beneficiaba a un sector del ejército (los militares africanistas) con afán de prestigio y a un grupo de empresas (interesadas en explotar las minas de hierro de la zona). Las consecuencias políticas de esta derrota fueron importantes:
- Republicanos y socialistas culparon al rey por animar a
- Silvestre a una acción imprudente mientras que los militares culparon a los parlamentarios por no darles
- medios suficientes.
- Maura fue llamado en Agosto de 1921 a presidir un gobierno de concentración nacional
- La presión de la opinión pública provocó la formación de una comisión de investigación para averiquar responsabilidades.
El resultado fue el denominado Expediente Picasso, que reveló el estado de corrupción e ineficacia del ejército. Días antes de que este informe llegara al Congreso y se dirimieran las responsabilidades políticas (entre las que podía estar involucrado el propio rey), el general Primo de Rivera dio un Golpe de Estado en Septiembre de 1923 que acabó con el sistema parlamentario de la Restauración.
Una de las razones esgrimidas por los golpistas para justificar su actuación fue acabar la guerra de Marruecos.
Después de Annual, Abd-el-rim había atacado también la zona francesa. Esto facilitó la colaboración de las tropas francesas y españolas, que consiguieron una gran victoria en el desembarco de Alhucemas (1925). Abd-el-Krim se rindió y se acabó con la resistencia de las cabilas por lo que en 1927 finalizó la guerra. El territorio marroquí fue controlado por España hasta que, en 1956, régimen de Franco le concedíó la independencia.