(1833-1874) 6.1 El reinado de Isabel II (1833-1868): la primera guerra carlista. Evolución política, partidos y conflictos. El Estatuto Real de 1834 y las Constituciones de 1837, 1845 y 1856
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Con la muerte de Fernando VII desaparece el absolutismo y comienza a implantarse el sistema liberal.
La heredera,Isabel,tenía sólo tres años y su madre, María Cristina, asumíó la regencia. Los absolutistas apoyaron a Carlos, hermano de Fernando VII. Para defender el trono de su hija, la Regente seapoyóen los liberales. Se inició así una Guerra Civil que parecía un conflicto sucesorio pero en realidad era un enfrentamiento ideológico entre absolutistas y liberales. La pequeña nobleza, el bajo clero y el campesinado apoyaban el carlismo. Querían el retorno del Antiguo Régimen, defendieron los valores tradicionales, la monarquía de origen divino, la Iglesia y la conservación del sistema foral. Los isabelinos (liberales),tenían el apoyo de la nobleza, la Iglesia, la burguésía y las clases populares urbanas. Controlaban el ejército y los órganos de poder. La primera guerra carlista enfrentó a loscarlistas con el ejército de Madrid. Los carlistas no consiguieron ni extender el conflicto ni ocupar ciudades importantes. El Convenio de Vergara firmado por Maroto (carlista) y Espartero (liberal) puso fin a la guerra, pero se produjeron otras dos guerras. Durante el período de las regencias de María Cristina y Espartero, se asentó el Estado liberal y se diferencian dos tendencias. Por un lado los moderados, partidarios de reformas limitadas y contrarios a cambios radicales, defendían la soberanía compartida, amplios poderes para la Corona, libertades limitadas, derecho a la propiedad privada, voto censitario muy restringido, apoyo a la Iglesia católica y rechazo de la Milicia Nacional. Sus partidarios eran las clases altas. Por otro lado estaban los progresistas,defendían las grandes reformas, sufragio censitario, elecciones populares para los ayuntamientos, libertades amplias, desconfianza del clero católico, soberanía nacional, poder limitado del monarca y Milicia Nacional. Eran apoyados por clases medias y dejaban al margen a obreros y asalariados. La transición del absolutismo al liberalismo estuvo protagonizada por monárquicos reformistas como Cea Bermúdez y liberales moderados. Martínez de la Rosa adopta las primeras medidas liberales como la supresión del monopolio de los gremios. En 1834 se redacta el Estatuto Real, una carta otorgada hecha desde la Corona para el pueblo que regula la convocatoria de unas Cortes bicamerales conservadoras. El gobierno moderado de Martínez de la Rosa fue incapaz de dirigir el paíspor lo que en 1835 la Regente da el poder a los progresistas liderados por Mendizábal que aprobó una serie de medidas de guerra decisivas para el triunfo cristino y para suprimir el Antiguo Régimen y el régimen señorial. Por otro lado, amplía el número de votantes, reorganiza la Milicia y crea las Diputaciones Provinciales. Su política radical le enfrentó a moderados y a María Cristina, quien entregó el gobierno a un moderado. El intento de la regente de acabar con las reformas provocó la sublevación de la Guardia Real en la Granja de San Ildefonso, la regente tuvo quepromulgar la constitución de Cádiz y entregar el gobierno a los progresistas. Se inicia así el bienio progresista.
El nuevo gobierno presidido por Calatrava continuó con la labor de demolición del absolutismo y del Antiguo Régimen. Los progresistas convocan elecciones a Cortes y promulgaron la Constitución de 1837, más corta y moderada que la de 1812, de carácter progresista. Reconoce la soberanía nacional, la división de poderes, el sistema bicameral y amplios derechos y libertades individuales, el sistema electoral era censitario. En 1840 el intento de modificar la ley municipal provoca una insurrección progresista con el apoyo de Espartero. María Cristina dimitíó y abandonó el país, dando lugar a la regencia de Espartero. Su gobierno estuvo marcado por las disputas internas. Impone un gobierno autoritario que reprime las protestas. El intento de un acuerdolibrecambista con Gran Bretaña, levanta a la burguésía barcelonesa y a los obreros, las revueltas fueron sofocadas con el bombardeo de Barcelona. Los moderados y algunos progresistas organizan un pronunciamiento militar dirigido por Narváez, moderado, que obligó a Espartero a dimitir, esto hizo que Isabel fuera proclamada reina antes de tiempo y se implantara el Estado liberal moderado. Con Narváez se impuso el nuevo Estado liberal conservador, unificado y centralista. Fue un régimen de gobiernos autoritarios yoligárquico. La estabilidad del régimen se basa en la Constitución de 1845. De carácter moderado conforme al liberalismo doctrinario, refuerza los elementos moderados de la Constitución de 1837. Establece un sufragio muy restringido y la soberanía compartida además de un sistema bicameral y las libertades y los derechos muy restringidos. Se reorganizó la administración estatal con un sistema centralista basado en las provincias y en su control desde el gobierno a través de gobernadores. La Ley Municipal establecía el nombramiento de los alcaldes de las ciudades por el gobierno, además se impuso la uniformización administrativa; País Vasco y Navarra conservaron sus derechos forales. Se disolvíó la Milicia Nacional y se creó la Guardia Civil. Se aprobó la reforma de hacienda, crearon nuevos impuestos como el de consumo y se elaboró un Código Penal. Se restablecieron las relaciones con la Iglesia a través de un Concordato con la Santa Sede por el cual el Papa reconocía a Isabel II como reina y aceptaba la pérdida de los bienes a cambio de que elEstado financiara a la Iglesia. En 1849 surge el Partido Demócrata que reivindica la soberanía popular, el sufragio universal, la libertad religiosa, la supresión de los consumos y el reconocimiento de derechos, cuenta con el apoyo de las clases populares. Se sucedieron varios gobiernos salpicados de escándalos financieros y corrupción. A comienzos de 1854 las Cortes fueron suspendidas y el gobierno actuaba por decretos, esto causó un descontento político y social que derivó en el bienio progresista. En 1854, el general O´Donnell apoyado por progresistas y moderados, se enfrentó con las tropas del gobierno en La Vicalvarada. Los sublevados ganan el apoyo popular con el Manifiesto de Manzanares que recoge reivindicaciones progresistas como la reforma de la ley electoral. Otros jefes militares se sumaron al golpe y obligaron a la reina a entregar el gobierno a Espartero, que intenta restaurar la Constitución de 1837. El gobierno convoca elecciónes a unas Cortes Constituyentes y se forma la Uníón Liberal, partido presidido por O´Donnell,formado por moderados y progresistas para unificar ambas fuerzas, ganaron las elecciones y gobernaron en coalición. Las Cortes aprobaron una Constitución en 1856 que incluía una amplia declaración de derechos, limitaba los poderes de la Corona y del ejecutivo y ampliaba la participación electoral, pero no entró en vigor. Se reformaron la ley de imprenta y la electoral y se aprobaron una serie de leyes para la modernización económica comola Ley de Desamortización de Madoz. El bienio trascurríó en un clima de conflicto social, dando comienzo las primeras manifestaciones del movimiento obrero. Las clases populares retiraron su apoyo a los progresistas. En Julio de 1856, Espartero dimítió y la reina encargó el gobierno a O´Donnell. Comienza así el período conocido como la crisis del sistema isabelino. Entre 1856 y 1863 la Uníón Liberal controló la vida política. La prosperidad económica permitíó a los unionistas gobernar sin problemas. Fue una época de euforia económica con la construcción de ferrocarriles e inversiones bancarias.El desgaste del gobierno y las divisiones de la Uníón Liberal llevaron a O´Donnell a dimitir. A partir de entonces se suceden gobiernos autoritarios e inestables entre O´Donnell y Narváez. En cuanto a la política exterior de esta etapa, encontramos el deseo de una expansión comercial con expediciones a la Conchinchina o a Santo Domingo. Los progresistas se retiraron y dirigidos por el general Prim pasaron junto a demócratas y republicanos a la oposición. En 1865 hay una protesta estudiantil, la Noche de San Daniel, la policía disparó contra los estudiantes que se manifestaban en apoyo al rector destituido y un año después se sublevan los sargentos del cuartel de San Gil. Desde el exilio, la oposición isabelinaforma el Pacto de Ostende entre progresistas y demócratas para derribar a la reina y convocar Cortes. Prim es colocado al frente de la conspiración. La reina huyó, dando paso al Sexenio Democrático.