1.
Introducción
gobierno provisional, monarquía de Amadeo de sabots y 1 república. Sin embargo, no fueron capaces de solucionar las enormes dificultades de este periodo y, en 1874, un nuevo golpe militar pondría fin a la experiencia democrática y abriría el camino al retorno de borbones.
2. El pacto de Ostende y la revolución de 1868
En 1866 firmaban el pacto de Ostende progresistas, demócratas, y unionista contra la monarquía de Isabel 2. En 1868, se iniciaba la revolución gloriosa, liderada por topete, prim y serrano. El gobierno y la corona se encontraron completamente aislados, puesto que su actitud había provocado que solo contasen con el apoyo de un grupo muy reducido. Cuando las escasas tropas fieles al gobierno fueron derrotadas en Alcolea, el gobierno no vio más salida que dimitir e Isabel || partíó en exilio a Francia.3. El gobierno provisional y la constitución de 1869 los firmantes del pacto de Ostende constituyeron un gobierno provisional que puso rápidamente en marcha un programa de reformas siendo inmediatamente reconocidos la libertad de imprenta, el derecho de reuníón y asociación y el sufragio universal masculino; se aprobó la reforma de la enseñanza, la desamortización de ayuntamientos… al mismo tiempo, el gobierno provisional convocó elecciones a cortes constituyentes por sufragio universal masculino y que dieron la victoria a la coalición gubernamental, mies tras que los carlistas, los moderados y los républicanos obténían una representación menor en el parlamento. La constitución de 1869 presentaba un carácter liberal y democrático, con un régimen de libertades que coincidía con las reformas llevadas a cabo por el gobierno provisional: soberanía nacional, elección por sufragio de los ayuntamientos y confirmando el sufragio universal masculino (varones mayores de 25 años). Incluía una amplísima declaración de los derechos en la que junto a los tradicionales se garantizaba la libertad de residencia, enseñanza o culto. La monarquía se mantuvo como forma de gobierno, aunque se limitaba el poder del Rey, acercándose así al principio de la monarquía democrática de que el “rey reina, pero no gobierna”. El poder legislativo quedaba depositado en las cortes bicamerales. El poder judicial queda depositado en mis tribunales, que además se declaran inviolables. Para garantizar la independencia del poder judicial se establecían oposiciones a jueces, lo que acababa con el nombramiento de estos por el gobierno. La política económica de esta etapa se caracterizó por la defensa del librecambismos y por la apertura del mercado español a la entrada del capital extranjero
En un intento de unificar el sistema monetario se fijó la peseta como unidad monetaria; pero el problema más grave fue la situación de la hacienda con una elevada deuda pública que forzó a utilizar parte del patrimonio minero, mediante su venta o concesión, para sanearla. Sin embargo, la forma de gobierno monárquica disgustó a los republicanos; el mantenimiento del culto y del clero no era del agrado de sectores anticlericales y, el modelo socioeconómico continuo intacto, con lo que campesinos, jornaleros o trabajadores de fábrica no vieron mejorar su situación 4. La monarquía de Amadeo de Saboyá (1870-1873)
el triunfo en las elecciones de los partidos que defendían la monarquía dio lugar a que la principal tarea del gobierno consistiese en encontrar a un monarca q sustituyese a los bombones. El general Prim fue el encargado de sondear a todos los embajadores extranjeros a fin de encontrar un consenso internacional sobre el candidato hasta que, por fin, consiguió imponerse la candidatura de ama del de Saboyá. La elección del nuevo rey se produjo por 191 votos a favor de los 311 diputados, lo que nos indica la debilidad política con que se iniciaba. Además, el inmediato asesinato de Prim, su principal valedor, le privaba de su apoyo más firme. El reinado d Amadeo de Saboyá estuvo repleto de problemas en todos los niveles. Desde el punto de vista político, Amadeo I contó desde el principio con la oposición de los moderados, al frente del cual se situó Cánovas del Castillo, y partidarios de la restauración de la monarquía en el hijo de la reina, el príncipe Alonso. Esta opción contó con el apoyo de la iglesia, en contra de la situación tras el decreto de Prim q obligaba al clero a jurar la constitución de 1869. Desde el punto de vista económico, la burguésía desconfío de un monarca que permitía una legislación que atentaba contra sus intereses: abolición de la esclavitud en Cuba, regulación del trabajo infantil… Tampoco podía contar con el apoyo de los republicanos y sectores populares. Los sectores carlistas, por su parte, se volvieron a alzar en armas en 1872, animados por las posibles expectativas de sentar en el trono a su candidatos Carlos VII (tercera guerra carlista). Por otro lado, se había iniciado en Cuba, con el llamado grito de Yara, la guerra de los 10 años. Aunque el gobierno intentó sacar adelante un proyecto de abolición de la esclavitud, la negativa por parte de los sectores económicos españoles con intereses en Cuba frustró una solución pacífica. También en 1872 se produjeron una serie de insurrecciones lideradas por sectores anarquistas, socialistas y republicanos,q aumentaron la inestabilidad del régimen. La crisis final del reinado fue provocada por la ruptura d la coalición gubernamental q dejó al monarca sin apoyos. Privado d todo apoyo, en Febrero de 1873,Saboyá presentaba su renuncia al trono.
5. La primera república (1873-1874)
Las Cortes, en las q se depositaba la soberanía en ausencia del monarca, decidieron someter a votación la proclamación d una República, q fue aprobada el 11 de Febrero de 1873. Aunque gran parte d la cámara era monárquica y su voto a favor fue una estrategia para acelerar el proceso del deterioro político q diera tiempo a organizar el retorno d los Borbones . El régimen republicano propugnaba un sistema de pactos entre los distintos pueblos o regiones como una forma nueva de articular el Estado español. Eran además partidarios del laicismo del Estado, de la ampliación de los derechos democráticos y de la intervención del Estado en la regulación de las condiciones laborales. Se llevaron acabo una serie de reformas de carácter popular, social y democratizador como fue la supresión del impopular impuesto de consumos, la eliminación de las quintas y la creación de un ejército profesional, la reducción del derecho a voto a los 21 años, la separación de la Iglesia y el Estado, la reglamentación del trabajo infantil o la abolición dela esclavitud en Puerto Rico . A nivel político se elaboró un proyecto de constitución (constitución de 1873) que convertía España en un Estado federal, con 17 estados regionales miembros dotados de amplia autonomía política, administrativa y económica. Sin embargo, la República no contó nunca con verdaderos apoyos sociales (el proletariado se sentía más atraído por el anarquismo y desconfiaba ya de cualquier solución política de carácter burgués), y tuvo siempre en contra a los poderes reales: la gran burguésía industrial y financiera; los mandos del ejército, muy apegados a la dinastía borbónica; y la iglesia que tenía el anticlericalismo republicano y que era contrario a la libertad de cultos defendída por los republicanos. Debemos sumar a todo esto las divisiones internas entre republicanos unitarios y federales. De esta forma durante los 11 meses de duración de la primera República se sucedieron cuatro presidentes (Figueras, pi i Margal, Salmerón y Castelar) que no consiguieron dar estabilidad al sistema. Los problemas con lo que tuvieron que enfrentarse fueron gravísimos, pues a las continuas conspiraciones de militares Alfonsinos, había que sumar, la guerra independentista de Cuba. Que se había iniciado en 1868, la nueva Guerra Civil carlista (Carlos VII), la división interna entre republicanos federalistas y unionistas y los sublevaciones cantonales protagonizadas por numerosos cantones (Cartagena, Sevilla, Cádiz, Torrevieja, Almansa, Bailén, Andújar y Málaga) que se declaraban independientes del gobierno central.
En Enero de 1874 el General pavía ponía fin a la primera fase de la República, cuando culminó un Golpe de Estado penetrando al frente de la guardia civil en el edificio de la corte y disolvíéndolas cuando se dispónían a elegir un nuevo presidente. Tras este Golpe de Estado, Serrano gobernó durante un año de forma autoritaria suspendiendo la Constitución y las cortes no volvieron a convocarse.Al mismo tiempo, el príncipe Alfonso había firmado el manifiesto de Sandhurst que sintetizaba el programa de la nueva monarquía: conservadora y católica y defensora del orden social. En Diciembre de 1874, el general Martínez Campos se pronunció en Sangunto proclamando a Alfonso XII de Borbónico como nuevo rey de España.