EL FRANQUISMO: LA DICTADURA (1939-1959)

Un régimen dictatorial. Características del franquismo. El régimen franquista formó un Estado caracterizado por un gran autoritarismo. Sus rasgos más relevantes son: el totalitarismo de la dictadura inspirada en el modelo fascista italiano y nazi, suprimió la constitución, prohibió todos los partidos y sindicatos. Franco se impuso el título de caudillo de España, era el jefe del estado y presidente del gobierno, además de generalísimo de todos los ejércitos. España se concibió como un estado unitario y centralista, aboliendo los estatutos autonómicos y fomentando el españolismo. Todos los partidos de la oposición fueron víctimas de una represión que tenía carácter sistemático y constante. Todos los medios de comunicación estaban sujetos a la censura franquista.

Los pilares del régimen

Fueron el ejército, el partido único y la iglesia católica. El ejército participó activamente en el poder, el partido único, denominado Falange Española y de las JONS, dotó al régimen de su ideología y de controlar las comunicaciones y suministrar los cargos públicos. Para contar con apoyo social, se crearon 4 organizaciones: el frente de la sección femenina, el frente de juventud, el sindicato español universitario y la central nacional sindicalista. La iglesia católica tuvo un papel destacado en la legitimación y construcción del estado franquista que se definía como confesional católico, a cambio de este apoyo, la iglesia obtenía una gran financiación.

Los apoyos sociales

Respecto del franquismo se han definido de 3 formas: el apoyo, la pasividad y el rechazo. El apoyo de las élites económicas y sociales que recuperaron el poder económico, social y político. Las clases medias formaban un grupo concertado, era un grupo pasivo y apolítico. Y los sectores populares se consideraban perdedores de la guerra civil, sin embargo, el miedo a la represión les condujo a la pasividad política.

Las familias del régimen

Habían mostrado su adhesión al caudillo, formaban el movimiento nacional, existían varias familias, los falangistas, los carlistas, ultra católicos, y monárquicos Alfonsinos. La iglesia también creó asociaciones como la asociación católica nacional de propagandistas o el Opus Dei.

La estructura del nuevo estado – Las leyes fundamentales

Concluyeron con la promulgación de la ley orgánica del estado. Con el primer gobierno, se comenzó a construir el estado, se concentraron los poderes en Franco, que era jefe del estado, presidente del gobierno y generalísimo de los ejércitos. Tras la derrota del Eje, el régimen de Franco promulgó el Fuero de los españoles, el fuero de trabajo, la ley del referéndum nacional, ley de sucesión, ley de principios del movimiento nacional, entre otras leyes.

EL FRANQUISMO: DESARROLLISMO E INMOVILISMO (1959-1975)

El viraje de la economía española. Los gobiernos del desarrollismo fueron formados por Franco en 1957 y supusieron un profundo cambio en el franquismo. Esta segunda etapa predominaban los tecnócratas, que consideraban el crecimiento económico como la principal garantía de estabilidad social y su principal objetivo era incorporar unos criterios de racionalidad y eficacia a la gestión del estado. Este camino vino dado por la situación económica de finales de los 50.

El plan de estabilización

Pretendía estabilizar la economía elevando los impuestos para reducir la inflación, limitando la concesión de préstamos y congelando sueldos. Se liberó interiormente la economía, llevándose a cabo a partir de la eliminación de organismos estatales interventores, y se liberalizó la economía con el exterior para facilitar la entrada de capital extranjero. A cambio de estos compromisos diversos organismos internacionales le concedieron diversos préstamos a España para hacer frente a la grave situación económica y para evitar la suspensión internacional de pagos.

Los planes de desarrollo

Fueron tres: la comisaría del plan de desarrollo se creó para supervisar dichos planes que tenían una planificación económica indicativa para impulsar desde el estado el crecimiento de la economía española. Tenían dos líneas de actuación la primera, que pretendía solucionar las deficiencias de la industria y ya segunda eran los polos de desarrollo que intentaban reducir los desequilibrios económicos. En general la política franquista fue un fracaso en buena parte porque la ejecución de los planes estaba condicionada por los rendimientos inmediatos de los grupos económicos cercanos al poder que por los intereses económicos generales, El mayor logro de estos planes fue dotar a la iniciativa privada de infraestructuras y materias básicas que favorecieron su desarrollo