El Sexenio Democrático
Pacto de Ostende y Revolución de 1868
Los progresistas y demócratas pactaron el Pacto de Ostende para derrocar la monarquía de Isabel II. Posteriormente, se les unieron Serrano y la Unión Liberal. La crisis económica y política facilitó la participación de las masas populares en la revolución de 1868.
Gobierno Provisional y Constitución de 1869
El gobierno provisional presidido por Serrano disolvió las Juntas Revolucionarias. Se eligieron por sufragio universal unas Cortes Constituyentes que aprobaron la Constitución de 1869, basada en la soberanía nacional, la división de poderes y los derechos y libertades de los ciudadanos, incluido el sufragio universal masculino.
Reinado de Amadeo I de Saboya
Como rey se escogió a Amadeo I de Saboya. Durante su breve reinado enfrentó problemas como el asesinato de Prim, la oposición de los monárquicos tradicionales, los alfonsinos y los carlistas, que iniciaron una nueva guerra carlista, y la crisis colonial.
La Restauración
Vuelta de los Borbones
Cánovas preparó la vuelta de los Borbones mediante el manifiesto de Sandhurst, pero fue el golpe de Martínez Campos el que permitió la llegada de Alfonso XII como nuevo rey. Se inició así el periodo de la Restauración.
Sistema Político
Cánovas sentó las bases institucionales y jurídicas del sistema en la Constitución de 1876, que establecía la soberanía compartida entre las Cortes y el Rey, la declaración de derechos y el bipartidismo, formado por los conservadores y los liberales de Sagasta. El turno pacífico entre estos dos partidos dinásticos se garantizaba mediante el fraude electoral manejado por los caciques locales.
Oposición al Sistema
La oposición al sistema político estuvo representada por el carlismo, los republicanos, los nacionalismos de Cataluña y el País Vasco y el movimiento obrero (anarquismo y socialismo). El periodo se vio sacudido por la crisis de 1898.
La Guerra Civil de 1936-1939
Causas
La crisis e inestabilidad de la Segunda República Española llevaron al general Franco a sublevarse en Melilla el 18 de julio de 1936. El alzamiento triunfó en gran parte de la península, pero fracasó en las ciudades más importantes.
Las causas de la guerra civil fueron la creciente polarización social, el temor de los sectores conservadores a la revolución democrática, la conspiración militar y los asesinatos de Castillo y Calvo Sotelo.
Desarrollo
El golpe de Estado contó con apoyos civiles y eclesiásticos. La España republicana enfrentó problemas como la revolución social, el caos organizativo y los problemas militares. El bando sublevado se organizó como dictadura militar bajo el mando de Franco y anuló las reformas republicanas.
La defensa de la República se identificó con la defensa de la democracia. Los antifascistas de otros países apoyaron a la República, mientras que los sublevados recibieron asistencia de Alemania e Italia.
Consecuencias
La guerra civil tuvo graves consecuencias: muertos y heridos, destrucción material, disminución de la producción agropecuaria, establecimiento de una dictadura, eliminación de partidos políticos y sindicatos, y represión de los vencidos.