La Creación del Estado Franquista (1939-1975)

El Estado franquista se basaba en el poder total de Franco, quien controlaba los poderes ejecutivo, legislativo y judicial. El régimen buscaba inculcar sus ideas a través del control de la población en todos los niveles: medios de comunicación, cultura, educación, sindicatos, juventud, mujeres y oposición.

El Franquismo se caracterizó por la ausencia de una constitución, regulando la organización del Estado mediante una serie de Leyes Fundamentales:

• El Fuero del Trabajo (1938): Reguló la organización laboral prohibiendo las huelgas.
• La Ley Constitutiva de las Cortes (1942): Reguló la representación popular.
• El Fuero de los Españoles (1945): Reguló los derechos y deberes de los ciudadanos.
• La Ley del Referéndum Nacional (1945): Reguló la celebración de algunas votaciones, creando un sistema de falsa democracia.
• La Ley de Sucesión (1947): Reguló la jefatura del Estado, estableciendo a España como un reino sin rey y dando un poder vitalicio a Franco.
• La Ley de Principios del Movimiento Nacional (1958): Reguló la ideología del régimen.
• La Ley Orgánica del Estado (1967): Reguló la organización del régimen.

Fundamentos Ideológicos y Apoyos Sociales (1939-1975)

El franquismo se basaba en una ideología compleja que combinaba elementos como:

• Anticomunismo: Se oponía a la izquierda, desde la extrema izquierda hasta la burguesía democrática.
• Antiparlamentarismo: Consideraba la democracia parlamentaria como un sistema antiespañol y asociado al marxismo.
• Nacionalcatolicismo: La Iglesia controlaba la vida social, la educación y la censura, con presencia en los medios de comunicación.
• Tradicionalismo: Exaltaba los símbolos de la historia de Castilla.
• Militarista: El Ejército tenía un papel central en el régimen.
• Fascista: Presentaba rasgos fascistas como símbolos, uniformes, un partido único y la exaltación del líder.

El régimen se caracterizaba por ser totalitario, dictatorial, caudillista, centralista y nacionalista español. La represión y el control de los medios de comunicación eran elementos clave.

Diversos grupos ideológicos colaboraron con el régimen, formando las llamadas»familias del régime»:

• Falangistas: Proporcionaron la ideología fascista al régimen y dominaban la vida económica y social a través de organizaciones como el Frente de Juventudes, la Sección Femenina y la Organización Sindical.
• Militares: Muchos de los jefes sublevados fueron colaboradores de Franco.
• Católicos: Procedían de asociaciones de la Iglesia y del Opus Dei, aportando ideología y dirigentes.
• Monárquicos: Los carlistas y juanistas aspiraban a restablecer una monarquía católica y autoritaria.
• Oligarquía terrateniente, industrial y financiera, y clases medias rurales: Apoyaron al franquismo por la eliminación de la conflictividad obrera y la recuperación de sus empresas y propiedades.
• Clases medias urbanas, burguesía, parte del campesinado y católicos: Por su mentalidad tradicional.
• Jornaleros y obreros: No apoyaron inicialmente la dictadura, pero con el tiempo, parte de los trabajadores aceptaron el régimen (obreros apolíticos).

Evolución Política, Social y Económica del Régimen Franquista (1939-1975)

El Primer Franquismo (1939-1959)

La dictadura de Franco inició su andadura aliada con la Alemania nazi y la Italia fascista. Durante la Segunda Guerra Mundial, España se declaró neutral. En 1940, Franco y Hitler se entrevistaron en Hendaya, pero no llegaron a un acuerdo sobre las contrapartidas exigidas por Franco para participar en la guerra. Tras las derrotas alemanas en 1942, Franco intentó acercarse a los aliados y eliminó la simbología fascista.

Entre 1945 y 1950, las potencias aliadas aislaron internacionalmente al franquismo por su apoyo a Alemania e Italia. La resolución de la ONU de 1946 acusó al régimen de Franco de fascista y se le negó el acceso al Plan Marshall. La supervivencia del régimen dependió de la importación de petróleo estadounidense y trigo argentino.

La situación cambió en los años 50, con el reconocimiento internacional de España como consecuencia de la Guerra Fría. En 1953, la firma de un acuerdo militar y económico con EEUU, que autorizaba la instalación de cuatro bases militares, supuso el reconocimiento internacional del régimen franquista. El mismo año, la firma del Concordato con el Vaticano reafirmó la alianza entre la Iglesia y el franquismo, proporcionando un nuevo respaldo internacional.

En 1955, España fue admitida en la ONU, poniendo fin al aislamiento internacional de la dictadura. En 1959, España se unió al FMI y al BM, y se programó una visita del presidente de EEUU a España.

Políticamente, el Estado era de estilo fascista y nacionalsindicalista, con ministros falangistas, militares y católicos. Tras la derrota nazi en 1945, la dictadura intentó mejorar su imagen aumentando la influencia de la Iglesia y el número de ministros católicos. Se inició una etapa de nacionalsindicalismo, con Carrero Blanco como colaborador cercano de Franco.

Las relaciones con los monárquicos se enfriaron a partir de 1945, con el Manifiesto de Lausana, en el que Juan de Borbón declaraba su apoyo a una transición democrática. Entre 1951 y 1959, la influencia católica creció y Carrero Blanco se consolidó como la mano derecha de Franco. En 1956, las protestas estudiantiles obligaron a Franco a introducir a los tecnócratas del Opus Dei en el gobierno, liderados por López Rodó.

Los tecnócratas y Carrero Blanco desplazaron a los falangistas del poder y aumentaron la influencia monárquica. Los militares perdieron poder y se produjo una mayor liberalización económica. La represión social y política, y los elementos típicos de un régimen dictatorial, se mantuvieron.

Económicamente, el período entre 1939 y 1959 se conoce como autarquía. España era un país arruinado demográfica y económicamente, y la mayoría de la población sufría hambre. El régimen respondió con la autarquía económica y la intervención del Estado.

El objetivo era la autosuficiencia económica para fortalecer la independencia del país. La política autárquica actuó en tres ámbitos:

• Comercio exterior: Se reglamentó y pasó a estar controlado por el Estado.
• Industria: Se fomentó la industria de interés estratégico y de bienes de equipo. Se crearon empresas públicas y se nacionalizaron sectores indispensables. En 1941, se creó el INI para promover la política industrial. Se crearon empresas como Iberia, Endesa y Seat.
• Agricultura: Se reguló la producción, comercialización, precios y consumo de los productos agrícolas.

Los resultados de la autarquía fueron nefastos, provocando un estancamiento económico por el colapso del comercio exterior, el descenso de la producción y consumo, y la disminución del nivel de vida de la población.

El Tardofranquismo y el Desarrollismo (1959-1973)

Los años 60 supusieron la legitimación internacional definitiva del franquismo. Se intentó modernizar la estructura política con una apertura sin cambios democráticos y con una reforma de las instituciones que asegurase su continuidad. Se inició un distanciamiento entre la Iglesia y el régimen. También resurgieron las tensiones nacionalistas y en 1959 se fundó ETA.

Económicamente, los años que van de 1959 a 1973 se conocen como los años del desarrollismo.

La primera acción económica fue el Plan de Estabilización en 1959, con el objetivo de poner fin al intervencionismo estatal y liberalizar la economía. Fue un éxito. Entre 1964 y 1975, se pusieron en marcha los Planes de Desarrollo Económico y Social con el objetivo de impulsar el crecimiento de la economía española. Fueron un fracaso.

En conjunto, el crecimiento español entre 1961 y 1973 fue elevado y constante.

El Final del Franquismo (1973-1975)

Tras el asesinato de Carrero Blanco en 1973, en un atentado de ETA, Franco nombró presidente a Arias Navarro. En enero de 1974, se constituyó un nuevo gobierno que provocó la división del bloque franquista en dos sectores: los aperturistas, partidarios de pequeñas reformas desde dentro, y el búnker, sector inmovilista e intransigente.

El clima de inestabilidad política y de protesta ciudadana iba en aumento, y la represión era cada vez más desproporcionada. El 1 de octubre de 1975, Franco hizo su última aparición pública. El 20 de noviembre, murió dejando a España con grandes posibilidades de futuro, pero inmersa en una profunda crisis y con un régimen político que no era democrático.

e no era democrático.