Los Austrias del siglo XVII: Gobierno de validos y conflictos internos
Felipe III (1598-1621)
Felipe III, hijo de Felipe II, carecía de vocación política. Las cuestiones de gobierno quedaron en manos de validos, quienes actuaban como primeros ministros. El valido de Felipe III fue el Duque de Lerma, un personaje ambicioso y mediocre.
Felipe IV (1621-1665)
En 1621 muere Felipe III y le sucede Felipe IV. Su valido fue el Conde Duque de Olivares. Felipe IV fue un monarca más culto y con mayor interés por los problemas de España. Olivares, por su parte, poseía una gran inteligencia política.
Regencia de Mariana de Austria (1665-1675)
Muere Felipe IV y le sucede Carlos II, con tan solo 4 años. La reina regente, Mariana de Austria, deposita su confianza en Nithard. La Corte se convirtió en un escenario de continuas disputas por el puesto de valido. Distintos validos se sucedieron en el poder, lo que generó una gran inestabilidad política.
Política Interior
- Felipe III decretó la expulsión de los moriscos, lo que supuso pérdidas cualitativas y cuantitativas para la economía.
- Durante el reinado de Felipe IV, el Conde Duque de Olivares intentó recuperar el prestigio exterior de la Monarquía Hispánica.
- Olivares impulsó una reforma interna con el objetivo de unificar la monarquía bajo unas mismas leyes e instituciones.
- Se planteó el proyecto de la Unión de Armas, que pretendía formar un ejército permanente de 140 mil hombres. Este proyecto fracasó por la oposición de las Cortes de los reinos de la Corona de Aragón.
- Las necesidades financieras de la monarquía obligaron a aplazar las reformas y a tomar medidas que agravaron la crisis social y económica.
- El descontento social y la oposición a la política de Olivares, sobre todo de los reinos periféricos, fueron en aumento.
- Los miembros de la alta nobleza se quejaban del poder del valido.
Crisis de 1640
Los conflictos y protestas contra Olivares fueron constantes, y se produjeron rebeliones en Vizcaya, Cataluña, Portugal y Nápoles. El momento más crítico para la monarquía llegó en 1640 con las rebeliones independentistas de Portugal y Cataluña.
Rebelión de Cataluña (1640-1652)
Olivares llevó la guerra contra Francia por la frontera catalana. La introducción de tropas italianas y castellanas, y los roces con el campesinado, provocaron el estallido de una guerra civil en 1640. La Generalitat de Cataluña se separó de la monarquía y aceptó la soberanía de Francia a cambio de apoyo militar. La rebelión finalizó con la capitulación de Barcelona en 1652 y la vuelta de Cataluña a la monarquía hispánica, aunque se respetaron sus leyes e instituciones.
Segregación de Portugal (1640)
La incorporación de Portugal a la monarquía de Felipe II en 1580 trajo más inconvenientes que ventajas para los portugueses. España era incapaz de garantizar una defensa adecuada ante los ataques hacia sus territorios coloniales. En 1640 estalló una rebelión con carácter anticastellano, independentista y nobiliario, liderada por el duque de Braganza, quien se proclamó rey con el nombre de Juan IV. La nueva monarquía portuguesa se consolidó con ayuda inglesa y francesa. España tuvo que reconocer la independencia de Portugal tras tres intentos fallidos de conquista militar.
La España del siglo XVII: Ocaso del imperio español en Europa
La política pacifista de Felipe III y del duque de Lerma pretendía mantener la supremacía de los Habsburgo: paz con Inglaterra, Países Bajos y Francia. Sin embargo, tres años antes de la muerte de Felipe III comenzó la Guerra de los Treinta Años, que significó el fin de la hegemonía de los Habsburgo.
Guerra de los Treinta Años (1618-1648)
Empezó siendo una guerra de religión entre católicos y protestantes, pero acabó convirtiéndose en una guerra general. Los Habsburgo de Viena aceptaron la Paz de Westfalia en 1648, por la que España reconoció la independencia de Holanda. Sin embargo, la guerra con Francia continuó.
Paz de los Pirineos (1659)
Tras la derrota en la batalla de Las Dunas (1658), Felipe IV firmó la Paz de los Pirineos en 1659, en la que España perdió Flandes y algunos territorios de Cataluña a favor de Francia.
Pérdidas territoriales durante el reinado de Carlos II (1665-1700)
Durante el reinado de Carlos II, España perdió numerosos territorios a favor de Francia.
Evolución económica y social
La crisis del siglo XVII fue general en toda Europa. Esta crisis fue causada por la disminución de la afluencia de metales preciosos de América, lo que provocó un colapso económico en los países europeos. Los precios de los productos aumentaron gravemente. Uno de los aspectos fundamentales de la crisis fue el descenso o estancamiento demográfico.
La economía española en el siglo XVII: decadencia
- Malas cosechas: Provocaron hambrunas.
- Abandono en la Meseta de muchas explotaciones agrarias.
- Expulsión de un gran número de agricultores activos: los moriscos.
- Decadencia de las ciudades artesanales y comerciales de Castilla.
- Apuros crecientes de la Hacienda real: Se resolvían con emisiones de moneda de baja calidad, lo que provocó una grave inflación.
Crisis social
Los grupos sociales relacionados con la producción fueron los que más sufrieron la crisis. Aumentó el paro y la delincuencia. Los grupos más poderosos, nobles y grandes propietarios, aguantaron mejor la crisis. Se buscaron nuevas inversiones. El modelo de prestigio social en Castilla era el del noble que no trabaja y vivía de sus rentas. Otro elemento que perjudicó el desarrollo de las actividades productivas fueron los certificados de limpieza de sangre. Debido a la crisis, los campesinos se vieron más endeudados con los poderosos. Muchos campesinos pasaron a ser arrendatarios de tierras que antes poseían; este proceso se llama refeudalización.