Concepto de nación y nacionalismo
Nación se utiliza para designar aquellos grupos humanos que creen compartir unas características culturales comunes (lengua, raza, historia, religión…) y que basándose en ellas consideran legítimo poseer un poder político propio, sea un estado plenamente independiente o un gobierno autónomo dentro de un Estado.
Las características culturales comunes se toman como criterio para diferenciarse de otros pueblos. Los criterios culturales han presentado muchas dificultades para agrupar a los colectivos, por lo que se ha acabado aceptando que son naciones aquellos grupos humanos cuyos miembros sienten o quieren ser nación.
Más difícil que precisar el significado de nación es hacerlo con nacionalismo. En primer lugar, llamamos nacionalismo al sentimiento que los individuos poseen de identificarse con las comunidades, con la tierra en que han nacido, que en casos extremos llega a la identificación completa y a tal grado de lealtad a esas patrias o naciones que sus miembros se declaran incluso dispuestos al sacrificio de su vida (entendiéndose matar a otro).
Un segundo significado es la doctrina o ideología política, de acuerdo con la cual cada pueblo o nación tiene el derecho a ejercer el poder soberano sobre el territorio que habita.
Y por último, deberíamos llamar nacionalista a la creencia de que los seres humanos se encuentran agrupados en pueblos estables en el tiempo y diferenciados entre sí.
El meollo de la cuestión se halla en el segundo significado que hemos dado. Lo que significa que la territorialidad es el principal objetivo de los nacionalistas. Todos los partidos nacionalistas empiezan diciendo: “nosotros somos diferentes”, y acaban diciendo: “esta tierra es nuestra”. Lo cual, añaden los nacionalistas más cívicos, no significa que se vaya a prohibir que viva en él otra gente o que se les vaya a discriminar; por el contrario, nadie sufrirá merma de sus derechos.
O sea, que una vez que se consigue el control del territorio, lo de que “somos diferentes” pasa a un segundo plano.
Orígenes de los movimientos nacionalistas y regionalistas (1833 – 1901)
1. Causas
- Los fenómenos nacionalistas no son movimientos exclusivamente españoles, sino europeos. Se debe a la influencia de ese movimiento cultural denominado Romanticismo. Este movimiento cultural, defensor de la libertad individual, también defendió la singularidad de los pueblos. Fomentó la búsqueda de la personalidad nacional y de las raíces históricas de cada pueblo, de un pasado frecuentemente mitificado.
- A lo largo del siglo XIX Cataluña y el País Vasco se convirtieron en las regiones industriales más dinámicas e importantes, a las que emigraron muchos trabajadores del resto del territorio español. Al mismo tiempo, Cataluña y el País Vasco se diferenciaron del resto del territorio de España, que continuó siendo agrario.
- Se creó un estado liberal centralista y castellanizante. Eso provocó una reacción de Cataluña y el País Vasco. Surgieron movimientos políticos que pedían reivindicar una España plural, donde se reconociera la igualdad de las diferentes regiones, culturas y lenguas.
- La escasa eficacia nacionalizadora que el Estado español mostró durante el siglo XIX. No fue capaz de nacionalizar suficientemente las zonas no castellanohablantes de su territorio; ni hacer arraigar los símbolos de identidad nacional (bandera, himno…).
- En otros estados como Francia la uniformidad cultural y la identidad nacional se desarrollaron gracias a un sistema escolar público y gratuito que extendió el uso del francés en todo el territorio.
2. El catalanismo
Surgió a finales del siglo XIX y principios del XX y a las reivindicaciones lingüísticas y literarias añadió la exigencia de un sistema de autogobierno propio para Cataluña; durante el siglo XIX los catalanistas exigieron la descentralización política (autonomía). Los primeros grupos independentistas no aparecieron hasta más tarde, en el siglo XX.
2.1. La Renaixença
Fue el movimiento cultural que se desarrolló en Cataluña, que pretendía recuperar el uso de la lengua catalana, que en gran parte se había perdido, y los signos de identidad, pero sin ningún proyecto político.
El desarrollo de la lengua y literatura llevó a las autoridades catalanas el deseo de convertir el catalán en lengua oficial junto con el castellano y contar con una escuela en catalán.
2.2. Formación del catalanismo político a finales del siglo XIX
Entre los primeros ideólogos que defendieron el catalanismo se encuentra Valentí Almirall, quien consideraba que el reconocimiento de la personalidad política de Cataluña contribuiría a la democratización y el progreso de España.
En 1881 intentó crear un partido político intrínsecamente catalán, que llamó “Centre Catalá”. Tenía una ideología progresista y laica que asustaba a la burguesía catalana, que renegó su apoyo, y su vida política fue muy corta.
2.3. El catalanismo conservador: La Lliga Regionalista
A partir de los años 90 la hegemonía dentro del catalanismo se decantó hacia los sectores conservadores y católicos. En 1892 se creó la “Unió Catalanista”, una confederación de grupos catalanistas. En la ciudad de Manresa aprobó su programa político denominado “Las Bases de Manresa”, que es considerado el primer proyecto de estatuto de autonomía de Cataluña. El programa defendía la plena soberanía de Cataluña en el proceso interior y competencia absoluta en numerosas materias.
En 1901 se creó el primer partido político catalanista: “La Lliga Regionalista”. Se presentó a las primeras elecciones municipales, obteniendo la victoria. A partir de ese momento se transformó en uno de los principales partidos en Cataluña. Su base social estaba formada por las clases medias urbanas y por medianos y grandes propietarios rurales. Por primera vez en la España de la Restauración, grupos sociales conservadores y católicos asumían posturas democráticas, rompían con el caciquismo y exigían el autogobierno regional. La Lliga Regionalista conservadora mantuvo la hegemonía política en Cataluña hasta la llegada de la Segunda República, en 1931.
3. Los orígenes del nacionalismo vasco
Tuvo características muy diferentes del catalanismo, debidas a las peculiaridades del País Vasco.
En primer lugar, las tres provincias vascas habían conservado sus fueros hasta 1876. La pérdida, con motivo de la Guerra Carlista, fue una de las causas en el origen del nacionalismo vasco. Las tres provincias vascas eran territorios con grandes diferencias internas, tanto económicas como culturales. La lengua vasca había desaparecido en Álava y en Vizcaya. La crítica situación de la lengua vasca es una de las causas del desarrollo del nacionalismo vasco.
El nacionalismo vasco fue menos homogéneo socialmente que el nacionalismo catalán. Coincidieron muchos más grupos sociales diversos. Algunos de los que defendieron el nacionalismo vasco, campesinos y clases medias, se sintieron preocupados por la gran inmigración de otras provincias españolas que, desde su punto de vista, ponían en peligro la esencia de los vascos. El nombre despectivo que se les llamó a estos inmigrantes fue: “maketos”. Otros sectores se apuntaron al nacionalismo vasco (la burguesía, clases más adineradas) por razones económicas, no ideológicas, les interesaba el mantenimiento de los fueros.
El patriarca es Sabino Arana (1865-1903), procedente de las filas del carlismo. En 1895 se fundó el PNV (Partido Nacionalista Vasco), que envió sus primeros diputados al Congreso.
Las ideas del nacionalismo que presentó:
- Defensa de la separación de España y creación de un estado vasco independiente, formado por los territorios vascos más Navarra y el País Vasco francés. Para designar a ese territorio se usó “Euskadi”.
- La defensa de una existencia, una raza vasca. Exaltación racista y xenófoba.
- Defensa y promoción de la lengua vasca y recuperar las tradicionales. Apología del mundo rural vasco en peligro no sólo por la llegada masiva de españoles, sino por la gran industrialización del mundo vasco.
- Integrismo católico. El futuro estado vasco debía estar al servicio de Dios.
- Antiterrorismo y antisocialismo.
Dentro del partido nacionalista vasco aparecieron dos tendencias: una más radical, más independentista; y otra más moderada, que no defendía la independencia, sino la autonomía.
2.4. Los orígenes del nacionalismo gallego
A mediados del siglo XIX en Galicia surgió el “Rexurdimento”, que defendía el uso literario del gallego y el redescubrimiento de las tradiciones propias. También el gallego era una lengua, solo que la hablaban los campesinos, había sido despreciada por las clases cultas y en ese momento se empezaba a considerar como un signo de identidad. Tras la reivindicación cultural nació la política, el galleguismo político aparece a partir de 1887, en el que se elaboró, por una Asamblea Federal de la Región Gallega, un proyecto de constitución para un Estado galaico. Lo que pedían era una autonomía para la región en una España casi federal. También este movimiento se puede considerar como conservador. La importancia del nacionalismo gallego fue muy escasa, entre otras razones porque en el propio territorio no hubo muchos seguidores. Ha sido en los años recientes, cuando el nacionalismo gallego ha adquirido cierta importancia.
2.5. Otros movimientos regionalistas
El valencianismo
Se vio afectado por el movimiento cultural catalán, la “Renaixença”, y al calor de este fenómeno se plantearon la recuperación del valenciano como lengua, iniciar una producción literaria y una recuperación de los signos de identidad. No llegó a crearse un valencianismo político que se plantease reivindicar una autonomía.
El andalucismo
:
No tenía argumentos APRA hincar una autonomía. Sin embargo, se fue creando un movimiento reivindicativo argumentando la situación de atraso, de pobreza que el resto de España. El personaje principal es Blas Infante, el ideólogo del nacionalismo andaluz. N constituyó ningún movimiento político importante.
6- Los orígenes del nacionalismo Canario.
El origen está único a Segundino Delgado. Nació en Santa Cruz y emigra hacia América y en Caracas intenta movilizar a los isleños a favor de Canarias. Cuando vuelve crea el PP. y exige la autonomía del archipiélago.
En 1902 se detiene y encarcela a Segundino acusado de conspirar contra el régimen español cuando estuvo en Cuba.
Dejó su huella en el Partido Nacionalista Canario organizado en Cuba.
2.4- ls orígns dl nacionalismo gayego.
a mdia2 dl siglo xix en galicia surgiól “rxurdimnto” k dfndíal uso litrario dl gayego yl rdscubrimiento d ls tradicions propias. tambiénl gayego era 1a lngua oral sólo k lo ablaban ls campsinos, abía sido dsprciada x ls class cultas. u en s momnto s empzaba considrar cm 1 signo d idntidad. tras la rivindicación cultural nació la política,l gayegismo político parc a partir d 1887 enl k slaboró x 1a asambla fdral d la rgión gayega aprobó 1 proyecto d constitución xa 1 stado galaico. lo k pdían 1a autonomía apra la rgión en 1a spaña casi fdral. también st movimiento s pued considrar cm consrvador. la imxtancia dl nacionalismo gayego fue muy scasa entr otras razons xk enl propio trritorio no ubo muxos sguidors. as ido en ls años r100ts, cuandol nacionalismo gayego abía adkirido cierta imxtancia.
2.5 otros movimientos rgionalistas.
-l valncianismo:
s vio afctado x l movimiento cultural catalán la “rnaixença” yl calor d st fnómno s plantaron la rcupración dl valncianismo cm lngua, iniciar 1a producción litrario 1a rcupración d ls signos d idntidad. no yegó a crars 1 valncianismo político k s plantas rivindicar 1a autonomía.
-l andalucismo:
no tnía argumntos apra incar 1a autonomía. sin embargo, s fue crando 1 movimiento rivindicativo argumntando la situación d atraso, d pobrza kl rsto d spaña.l prsnaj principal s blas infant,l idólogo dl nacionalismo andaluz. n constituyó ningún movimiento político imxtant.
6- ls orígns dl nacionalismo canario.
el orign stá único a sgundino dlgado. nació en santa cruz y emigra acia américa y en caracas intnta movilizar a ls islños a favor d canarias. cuando vuelv cral pp. y exig la autonomía dl arxipiélago.
en 1902 s dtien y encarcla a sgundino acusado d conspirar contral régimn spañol cuando stuvo en cuba.
djó su ueya enl partido nacionalista canario organizado en cuba.