de Rivera enfermo, dimite y se exilia a Francia. Así Alfonso XIII, consciente del rechazo que suscitaba el dictador, aceptó su dimisión.
El rey manda formar gobierno al militar Dámaso Berenguer con una función principal que es la vuelta a la Constitución de 1876, pero fracaso porque tanto el Partido Liberal como el Conservador desconfían del rey y se niegan a participar en el gobierno. La Unión Patriótica no quiere volver a la Constitución ya que prefiere un gobierno autoritario, así crecen los partidos republicanos (Acción Republicana dirigida por Manuel Azaña siendo un partido de izquierdas, Partido Republicano Radical Socialista, Partido Radical Republicano de Lerroux, Partido Regionalista de Izquierda Gallego denominado ORGA de Casales Quiró, Esquerra Republicana de Cataluña y el Partido Republicano de Derechas dirigido por Alcalá Zamora) que quieren acabar con la monarquía.
En agosto de 1930 todos los partidos republicanos junto al PSOE y el apoyo de las organizaciones obreras firman el Pacto de San Sebastián, encabezado por Alcalá Zamora, para acabar con la monarquía e instaurar la República en España. De esta forma se crea un comité revolucionario encargado de contactar con el ejército o con los sectores favorables a la República para llevar a cabo un levantamiento militar y contactar con las organizaciones obreras para que realicen manifestaciones. En Jaca, dos oficiales, Fermín Galán y García Hernández se sublevan contra la monarquía e intentan dar un golpe de estado, pero fracasa y son fusilados. Así todo el comité revolucionario queda detenido y encarcelado. Varios intelectuales publican un manifiesto a favor de la República que coincide con reivindicaciones estudiantiles y en 1931 Berenguer dimite, por lo que Alfonso XIII encarga la formación del gobierno al general Juan Bautista Aznar que convoca elecciones municipales para el 12 de abril de 1931 para controlar el caciquismo. En las principales ciudades ganan los representantes republicanos y el 14 de abril de 1931 se proclama la II República.
En el período de 1930-1931 tuvo lugar “La Dictablanda” debido a la lentitud con que se restablecieron las libertades constitucionales y la falta de plazos concretos para la vuelta al régimen parlamentario fueron debilitando el poco prestigio del nuevo Gobierno (algunos miembros de la oligarquía financiera y caciquil se presentaron a colaborar como Romanones o La Cierva). Además el Gobierno no supo afrontar la situación económica, cada vez peor conforme se deterioraba la economía mundial. El resultado fue que la producción se hundió más, aumento el paro y aumentó la desesperación de los industriales y obreros.
14.3. LA SEGUNDA REPÚBLICA: LA CONSTITUCIÓN DE 1931 Y EL BIENIO REFORMISTA (INCLUYENDO LA POLÍTICA DE REFORMAS Y REALIZACIONES CULTURALES).
14.3.1. PROCLAMACIÓN DE LA II REPÚBLICA.
Tras la sublevación de Jaca y las elecciones del 12 de abril de 1931, se proclama la II República en España el 14 de abril de 1931 hasta el 18 de julio de 1936. Coincide con una situación internacional marcada por la crisis económica de 1929 (crack de la bolsa con una crisis económica y financiera), la crisis de las democracias occidentales y el ascenso de los fascismos en Europa (autoritarismos). Se trata del primer ensayo de publicación de masas, progresista, moderno, democrático, complicado y precario que no triunfó debido al contexto poco favorable.
Desde el primer momento cuenta con el apoyo de la mano trabajadora, de los intelectuales (Ortega y Gasset y Marañón fundaron, como diputados, la agrupación al servicio de la República) y las clases medias. Pero obtienen la oposición, debido a la desconfianza, de una importante parte del ejército, terratenientes, banqueros, burgueses, industriales, la oligarquía tradicional y la Iglesia que funda otro partido político cuyo lema es “Religión, Familia, Orden, Trabajo y Propiedad”.
14.3.2. LAS ELECCIONES PARA CORTES CONSTITUYENTES CUYA FUNCIÓN ES SACAR ADELANTE UN TEXTO CONSTITUCIONAL.
El día 12 de abril se celebraron las elecciones municipales. Nadie se esperaba un cambio radical, porque se veían solo como un sondeo ante las legislativas posteriores. Pero sus resultados, mucho más favorables a la opción republicana y socialista de lo esperado, desencadenaron la abdicación del rey y la proclamación de la II República. Estas elecciones se celebraron con calma. Alcalá Zamora es nombrado presidente de la República y Manuel Azaña se hace cargo del Gobierno como jefe.
Tras la implantación, se producen conflictos como la quema de conventos y el gobierno se ve obligado a declarar el estado de guerra. A pesar de ello, hay una tarea fundamental que es elaborar una nueva Constitución, aprobándose la de 1931.
14.3.3. LA CONSTITUCIÓN DEMOCRÁTICA DE 1931.
Se trata de un texto flexible que permite gobernar tanto a la Derecha como a la Izquierda. Sin embargo fue frontalmente rechazada por la Iglesia y por la Derecha a causa, sobre todo, del tratamiento dado a la cuestión religiosa. Así la aprobación de los correspondientes artículos ocasionó una crisis al dimitir los ministros de la Derecha.
España es una república de trabajadores de toda clase, la cual establece una serie de novedades: por primera vez el sufragio universal (voto de la mujer), derechos y libertades, protección y derecho del trabajo (posibilidad de expropiar las tierras a los latifundistas que no trabajaban la tierra o la cultivaban mal), por encima de la propiedad privada está el interés colectivo con indemnización, el reparto de la tierra para los trabajadores y la Constitución estableció también el matrimonio civil, el divorcio y la equiparación de derechos de hijos legítimos e ilegítimos.
Innovaciones: se trata de un sistema unicameral (congreso) al que se le concede la mayor importancia ejerciendo exclusivamente el poder legislativo a través de las Cortes, es una República donde existe un presidente de la república (elegido cada 6 años) al cual le corresponde el poder ejecutivo y un jefe del gobierno (cada 4 años). El poder judicial es totalmente independiente y se crea el Tribunal de Garantías Constitucionales, supervisando cualquier ley.