Constitución de 1812

Tras la invasión de España por Napoléon en el año 1808 y la abdicación del rey
Carlos IV y su hijo Fernando VII, se produjeron revueltas y un vacío de poder que ocupan las juntas patrióticas formadas por las élites locales. Las juntas locales se organizaron en juntas provinciales y estas en una Junta Suprema Central. Pero esta junta no pudo hacer frente  a las derrotas militares y al acoso de los absolutistas, por lo que tomó el poder un gobierno encabezado por el Obispo de Ourense

Destacar que la creación de la Junta Suprema de Canarias con sede en La Laguna fue contestada por la Junta de Gran Canaria, considerando este hecho uno de los primeros episodios de la ‘“disputa insular canaria”.

La redacción de una Constitución se inició a la vez que la Guerra de la Independencia, tras una convocatoria de Cortes Generales y Extraordinarias,  reunidas en Cádiz ya que la ciudad no estaba ocupada por los francese.Tras año y medio de discusión, se promulgó el 19 de Marzo de 1812, por eso es conocido como La Pepa.

Los diputados quisieron unir la tradición española con el nuevo espíritu revolucionario liberal.
Los principios más destacables de la Constitución vinieron a ser los siguientes:

a. Afirmación de la soberanía nacional: el poder se encontraba en la nacíón.

b. División de poderes: el poder legislativo correspondía a las Cortes el poder ejecutivo a cargo del rey y el poder judicial era independiente.

c. Elección de los representantes en las Cortes por sufragio universal masculino indirecto.

d. Reconocimiento de la igualdad ante la ley y de las libertades y derechos individuales a la Educación, libertad de imprenta, propiedad privada, inviolabilidad del domicilio, …

e. Reconoce la confesionalidad católica del Estado.

f. Organiza territorialmente el Estado en municipios y provincias gobernadas por ayuntamientos y diputaciones.

g. Se crea la Milicia Nacional para defender las leyes liberales ante quienes se opusieran.

La constitución apenas pudo aplicarse debido al contexto de la guerra.
La restauración absolutista de 1814 la elimino, pero volvíó a entrar en vigor durante el Trienio Liberal (1820-1823) y finalmente dejó de ser aplicada durante la Década Ominosa (1823-1833). Pero fue una referencia durante la mayor parte del Siglo XIX. Y se convirtió en un mito para el liberalismo universal y un modelo para las revoluciones liberales europeas y americanas.

En las Cortes de Cádiz participaron cuatro diputados canarios.

Cánovas

El 29 de Diciembre de 1874 se produjo el pronunciamiento de Martínez Campos en Sagunto que favorecíó a proclamar rey de España a Alfonso XII, hijo de Isabel II. Dicho pronunciamiento estuvo condicionado por el conjunto de las agitaciones campesina y obrera, que motivaron un compromiso entre los grandes propietarios y los industriales. Alfonso XII reinaría desde 1875 a 1885, año de su temprana muerte. El régimen de la Restauración se consolidó debido a que parte de la burguésía de los negocios y de los grandes propietarios de tierras apostaron por una fórmula que garantice la estabilidad  frente a las convulsiones sociales y políticas anteriores. El creador de este sistema fue el político Antonio Cánovas del Castillo, quien hubiese querido la vuelta de Alfonso XII por medios legales y sin pronunciamiento militar.La Restauración pasa por tres etapas: –

Reinado de Alfonso XII

1875-1885. -Regencia de Mª Cristina: 1885 – 1902. -Reinado de Alfonso XIII: 1902-1931. Los elementos de este sistema político son: *La Constitución de 1876, Una Monarquía con amplios poderes,el Bipartidismo y turno pacífico de los partidos dinásticos y el mecanismo electoral:
Ley Electoral, encasillado y pucherazo. *La Constitución de 1876 fue un texto flexible y no partidista, creada como un equilibrio entre las constituciones anteriores. Su carácter liberal permitíó que el sistema ideado por Cánovas fuera factible durante un periodo de tiempo bastante extenso convirtiéndose en uno de los elementos básicos de sostén del sistema. Algunas de sus carácterísticas son: La soberanía compartida entre el Rey y las Cortes, la corona es la clave del sistema. Es una fuerza real y efectiva que y dirige el juego político, el poder ejecutivo lo ejercía la Corona a través de los ministros, nombrados por el rey, al igual que el Presidente del Gobierno, el poder legislativo correspondía a las Cortes y al Rey.La Corona puede vetar leyes y disolver las Cámaras. Está compuesto por el Congreso y el Senado y el poder judicial era  independiente.El Bipartidismo se basaba en la existencia de dos grandes partidos que fueron llamados partidos dinásticos y ambos se alternaban el poder de forma regular, de ahí que a este sistema se le conociera como turnismo. El Partido Conservador tenía como líder a Antonio Cánovas del Castillo quien agrupo en sus filas a los sectores más conservadores de la vida política y social del país: aristocracia y alta burguésía y funcionarios de alto nivel. El Partido Liberal tenía como líder a Mateo Sagasta quien integró a la antigua izquierda liberal progresista. Fuera de este sistema quedan los llamados partidos antidinásticos. Los dos partidos del sistema se alternaban en el poder y El Rey según la Constitución era el encargado de administrar el poder, por lo que nombrado un nuevo presidente de gobierno inmediatamente se convocaban elecciones. El sistema funcionaba, por lo tanto, de forma pacífica, de arriba a abajo. Estos dos partidos se “repartieron” los turnos alternándose en el poder “civilizadamente”.El turno fue un fraude político, destinado a mantener apartados del poder a las fuerzas que quedaban fuera del estrecho sistema diseñado por Cánovas. El turno en el poder no era la expresión de la voluntad de los electores, sino que los dirigentes de los partidos lo acordaban y pactaban previamente. Una vez acordada la alternancia se producía el siguiente mecanismo electoral: El Rey nombraba un nuevo Jefe de Gobierno y le otorgaba la decisión de disolver las Cortes El nuevo gobierno convocaba unas elecciones completamente adulteradas, “fabricaba” los resultados mediante el  “encasillado”, los escaños se asiganaban previamente dejando alguno a la oposición.El fraude electoral generalizado que caracterizó el sistema del turno tiene lugar en el contexto de un país agrario y atrasado. La clave de la adulteración electoral estaba en los “caciques”, que eran los encargados de los resultados electorales acordados por las élites de los partidos, quienes siguiendo las instrucciones del Gobernador Civil, amañaban las elecciones. Los gobernadores habían sido a su vez informados por el ministro de Gobernación de los resultados que “debían” salir en sus provincias, siguiendo el “encasillado” acordado.Los métodos desplegados por los caciques durante las elecciones fueron muy variados: violencia y amenazas; cambio de votos por favores o simplemente trampas en las elecciones, el conocido popularmente como el “pucherazo”.