LA CRISIS DE LOS BALCANES
La desintegración del Imperio Otomano estuvo
acompañada de las reivindicaciones nacionalistas de los nuevos estados surgidos
en el siglo XIX. El nacionalismo se mezcló con problemas de carácter étnico,
religioso y cultural. Las grandes potencias intervinieron en todos ellos según
sus intereses, bien de forma directa, caso de Austro-Hungría, Rusia e Italia, o
indirecta, como ocurrió con Alemania, Francia y Gran Bretaña.Una serie de
crisis contribuyeron a la inestabilidad
de la zona y al estallido de la Gran
Guerra:La anexión austro-húngara de Bosnia y Herzegovina (1908)Bosnia y
Herzegovina eran territorios con mayoría musulmana que habían permanecido bajo
dominio turco hasta 1877. A partir de entonces pasaron a depender
administrativamente de Austria-Hungría que finalmente, en 1908, los anexionó a
su imperio, provocando la frustración de Serbia que aspiraba a integrarlos
dentro de la Gran Serbia (futura Yugoslavia). En la capital bosnia, Sarajevo,
se produjo el 28 de junio de 1914 el asesinato del heredero al trono austríaco
Francisco Fernando y su esposa a manos de un estudiante bosnio perteneciente a
la «Mano Negra», organización secreta nacionalista proserbia.Laprimera
guerra balcánica (1912)Esta contienda enfrentó al bloque compuesto por Serbia,
Bulgaria, Grecia y Montenegro (secundados por Rusia) con Turquía y Austria.
Derrotada Turquía hubo de retirarse de la zona y ceder a Bulgaria una salida al
mar Egeo.Lasegunda guerra balcánica (1913)Los que fueron aliados en la primera
guerra balcánica se enzarzaron en una lucha entre sí: Bulgaria atacó a Serbia,
a Grecia y a Montenegro con el objetivo de anexionarse los territorios abandonados
por Turquía. Ésta última, junto a Rumanía se unió a Serbia y a Grecia. Bulgaria
fue derrotada y los territorios en disputa pasaron a Serbia.A partir de
entonces el objetivo de Serbia fue alcanzar el rango de
gran potencia de la
zona (Gran Serbia), aspiración que quedó ensombrecida por los tratados de
Londres y Bucarest (1913), que reconocieron a Albania como nuevo estado en
detrimento de los planes que Serbia se había fijado respecto a la anexión del
territorio albanés. Austro-Hungría por su parte entorpeció en la medida de lo
posible los planes de Serbia de constituirse como estado importante de la
región.También hubo fricciones entre Grecia y Albania originadas por las
aspiraciones de los helenos sobre la región del Epiro (de lengua griega) que
había quedado bajo soberanía albanesa.Estas circunstancias convirtieron los
Balcanes en un auténtico polvorín que estallaría meses más tarde.
ALSACIA Y LORENA
En 1871, por la Paz de
Versalles, y tras la derrota sufrida frente a Prusia (Sedán y Metz), Francia
hubo de ceder a ésta los territorios de Alsacia y Lorena, que estaban bajo su
soberanía desde 1648. Desde entonces un sentimiento reivindicativo y
revanchista, atizado por problemas derivados de la expansión imperialista,
ensombreció las relaciones franco-alemanas.Luis Napoleón, emperador francés,
contrincante de Bismarck en la guera franco-prusiana. Napoleón IIIBismarck intentó aislar a Francia
a través de la acción diplomática, mientras que ésta recurrió a alianzas con
otros estados para contrarrestar la estrategia alemana.Otto Von Bismarck,
canciller prusiano, artífice de la unidad alemana y vencedor en la guerra
franco-prusiana. El nacionalismo francés se alimentó de organizaciones como la
“Défense de L’Alsace-Lorraine”, que hicieron ostentación de un profundo
sentimiento antigermano, de fácil justificación, por cuanto los alemanes
pusieron en práctica una agresiva política de germanización lingüística y
cultural en ambos territorios.En 1918, una vez finalizada la Gran Guerra,
Alsacia y Lorena volvieron a Francia para caer de nuevo en manos alemanas
durante la II Guerra Mundial. Al término de ésta fueron reintegradas
definitivamente a Francia.
OTROSCONFLICTOS:POLONIA
Polonia
había sufrido históricamente diversos repartos a manos de sus poderosos
vecinos. El Congreso de Viena (1815) sancionó uno más y el país quedó dividido
entre Rusia, Austria y Prusia, siendo su población sometida a distintos
regímenes y administraciones.El nacionalismo polaco liderado por
JózefPilsudski, refugiado en la zona de Galitzia bajo dominio austriaco,
constituyó un elemento más en la rivalidad que enfrentaba a Austria-Hungría y
Rusia. La política de germanización desarrollada en la zona bajo dominio
prusiano enrareció aún más el ambiente.JózefPilsudski (1867-1935), nacionalista
revolucionario polaco partidario de la formación de un estado independiente de
Polonia. Una vez conseguida tal aspiración dirigió los destinos del país hasta
su muerte.Al estallar la Gran Guerra los polacos, encuadrados en los ejércitos
de las potencias ocupantes, lucharon entre sí. En 1917, tras la revolución
bolchevique y la retirada de Rusia, ésta aceptó la autodeterminación de Polonia
que se encontraba en esos momentos en casi su totalidad invadida por Alemania.
Cuando ésta firmó el armisticio hubo de abandonar el territorio polaco
creándose en 1919 la República de Polonia, soberana e independiente tras más de
un siglo de dominación extranjera. El estallido de la II Guerra Mundial condujo
a una nueva invasión del país por los alemanes que la mantuvieron en sus manos
durante casi todo el conflicto.En el preámbulo de la Gran Guerra Polonia
constituía pues un elemento de fricción más entre las grandes potencias, muy
especialmente entre Rusia y Austria-Hungría.