Se trata de un texto publicado en Madrid en 1979 titulado
“el político-
militar”. Es un fragmento de la obra “El Siglo XIX, España, ensayo
De historia contemporánea”.Su autor es Salvador de Madariaga,un prolífico escritor de ensayos, novelas,
Poesía y teatro, de profundas ideas liberales y demócratas. Aunque estudió
Ingeniería, su verdadera vocación fue la escritura. Se trasladó a vivir a
Londres y allí fue redactor y editor en The Times. Desarrolló, además, una
Activa vida pública, trabajando para la Sociedad de Naciones y, finalmente,
Sería nombrado embajador de la Segunda República (1931-1936) en Washington y
París. Tras la Guerra Civil se vio forzado a exiliarse y se establecíó en
Inglaterra, dedicándose a la escritura y a impartir conferencias. No regresaría
A España hasta 1976, tras la muerte de Franco.Es un texto de carácter historiográfico ya que analiza una
Carácterística de la vida política de España. Es una fuente secundaria ya que
No ha sido escrito de forma contemporánea a los hechos que se relatan. Su
Finalidad es analizar y dar a conocer las carácterísticas de estos
“políticos-militares” que marcaron la historia de España en el pasado.Está dirigido al público en general, en particular a las
Personas interesadas en la Historia.Respecto al contexto histórico, aunque los
“políticos-militares” actuaron en España durante casi todo el s. XIX y parte
Del s. XX, en el texto se nombra al general Narváez, que llegó a ser presidente
Del gobierno en 1843, al inicio del gobierno de Isabel II. Mediante un
pronunciamiento, un grupo de moderados y progresistas, obligaron a dimitir y a
Exiliarse al regente Espartero, declarando la mayoría de edad de la reina con
Tan solo 13 años. Hasta 1851 será el liberal moderado
Narváez quien dirigirá el
Gobierno.—En este texto, Madariaga analiza el carácter y el papel de
Los militares en la política española del Siglo XIX como protagonistas de los
Numerosos pronunciamientos que sucedieron.Realiza una fuerte crítica, mediante la ironía, de estos
Políticos-militares que entran en la política sin ninguna preparación,
Acusándolos de ser una maldición para el país. Los caracteriza como patriotas e
Ignorantes, que deciden solucionar los problemas políticos de España con la
Fuerza ya que no conocen otros métodos. Como todo militar, valoran la
Disciplina y el orden y son estos dos valores los que aplican al gobierno del
País.Madariaga les califica a todos como reaccionarios porque, en
Realidad, sólo aspiran a imponer su voluntad, sea del signo que sea. No aceptan
La libertad de prensa y su religiosidad es superficial.Como ejemplos cita a Narváez, Riego y O’Donnell pero se
Podría aplicar a muchos otros que actuaron en el s. XIX e incluso alguno en el
S. XX
—
Tal como describe Madariaga, el papel de los militares en el
Desarrollo político español del s. XIX fue fundamental. Solían acceder al poder
Mediante un pronunciamiento que era una sublevación armada protagonizada por
Militares dirigidos por un jefe prestigioso. Pretendían con ello provocar un
Cambio de gobierno mediante el uso de la fuerza, contando con el apoyo civil.
Tal como dice Madariaga, podían ser de un signo político u otro. A diferencia de
Un Golpe de Estado, un pronunciamiento estaba menos organizado y contaba con
Menor apoyo militar y civil de antemano.La presencia de militares en el gobierno fue una constante
Durante el s. XIX en España, en especial durante el reinado de Isabel II (1843-1868),
Por lo que se le conocíó como la época del “parlamentarismo pretoriano” o
“régimen de los generales”. Las continuas guerras en las que se vio envuelta
España dieron prestigio a algunos líderes militares que dieron el “salto” a la
Política con el supuesto objetivo de asegurar el orden y la paz social.Los pronunciamientos comenzaron a producirse en España en la
Primera mitad del s. XIX y se prolongaron hasta bien entrado el s. XX (aunque
Con menor intensidad). Sus orígenes los podemos situar como consecuencia de la
Guerra de Independencia (1808-1813) y de la 1ª Guerra Carlista (1833-1839) que
Permitieron la implicación de los militares en la vida civil y política del
País.En España, los pronunciamientos van ligados a la conflictiva
Construcción del Estado liberal; son una de las peculiaridades de nuestro
Sistema político decimonónico, de forma que, prácticamente todos los cambios
Políticos del s. XIX fueron resultado de un pronunciamiento.El retorno de Fernando VII al absolutismo en 1814 tras la
Experiencia liberal de las Cortes de Cádiz produjo un gran descontento social
Que se tradujo en una serie de levantamientos militares con el fin de instaurar
El liberalismo. Se iniciaron así los pronunciamientos. Tras varios intentos
Fallidos, el primer pronunciamiento que tuvo éxito fue el protagonizado por el
General Rafael del Riego (nombrado en el texto) en 1820, que dio paso al
Trienio Liberal (1820-23). Finalizó con la intervención de la Santa Alianza y
La restauración del absolutismo.A partir de ese momento, los pronunciamientos fueron
Habituales para cambiar el signo político de los gobiernos, fuese cual fuese.
La debilidad del sistema político, con escasa representación social, la escasa
Burguésía y la imparcialidad de la Corona a favor de los moderados, fueron
Factores que alentaronel
Intervencionismo de los militares.La Primera Guerra Carlista dio gran importancia a los
Militares como elemento sustentante del régimen. La destitución del progresista Mendizábal por parte de la regente Mª Cristina de Borbón y su sustitución por
El moderado Calatrava, provocó el pronunciamiento de La Granja en 1836 y el
Regreso de los liberales progresistas al poder.En 1840, tras la renuncia de la regente, fue el prestigioso
Militar liberal progresista Baldomero Espartero el que ocupó la regencia hasta
1843.Fueron otros militares moderados, entre los que destaca el
General Narváez (nombrado en el texto), los que obligaron a Espartero a dimitir
Y a exiliarse. Se inició el gobierno de Isabel II, con Narváez como presidente
Hasta 1851 (Década Moderada, 1843-54).En 1854, ante el descrédito del sistema moderado, el general
O’Donnell (moderado de tendencia centrista y creador de la Uníón Liberal)
Líderó el pronunciamiento de Vicálvaro que dio paso al Bienio Progresista. Espartero
Aceptó la presidencia del gobierno por dos años.Nuevamente O’Donnell intervino en 1856 para retirar del
Poder a Espartero.En 1868, el almirante Topete, apoyado por los generales Prim
Y Serrano, líderó un pronunciamiento desde Cádiz que provocó el exilio de
Isabel II y el inicio del Sexenio democrático. En 1874, un nuevo
Pronunciamiento dirigido por el general Pavía finalizará la experiencia
Republicana y situará al general Serrano nuevamente en el poder. A finales del
Mismo año, el pronunciamiento en Sagunto de Martínez Campos dará paso a la
Restauración.Pero no todos los pronunciamientos tuvieron éxito. Aquellos
Que fracasaban condenaban a muerte a sus líderes o, en el mejor de los casos,
Al exilio, y estaban seguidos por una fuerte represión contra los implicados.
Entre los fracasos cabe destacar la revuelta de los sargentos del Cuartel de
San Gil (1866) que supuso la ejecución de 70 militares yel fin del gobierno de O´Donnell. Como conclusión podemos decir que el texto de Salvador de
Madariaga realiza una ácida crítica de estos líderes militares que marcaron el
Desarrollo de la vida política española durante el s. XIX y tendrán sus
Repercusiones en el s. XX. Los pronunciamientos impidieron un desarrollo
Democrático normal en nuestro país, que no se alcanzó hasta bien entrado el s.
XX.