TEMA VII: EL INTERNACIONALISMO PROLETARIADO
LA PRIMERA INTERNACIONAL (AIT, 1864-1872/76)
”No ha sido la Internacional la que ha empujado a los obreros a la huelga; son las huelgas las que empujan a los obreros a la Internacional.” k. Marx
La organización sindical de la clase obrera conoció su primer auge serio en el país que fue también el primero en conocer el auge de la gran industria moderna: Gran Bretaña.
Al final de la década de 1860, con cerca de un millón de afiliados, las organizaciones sindicales británicas eran ya una fuerza decisiva en la vida económica y política, y un modelo a imitar para las organizaciones mucho menos desarrolladas del continente.
En esa línea de sindicalismo nace el INTERNACIONALISMO PROLETARIO (Iniciativa de organización internacional)
.
Poco a poco se va extendiendo entre los obreros de todos los países europeos la idea de que los problemas que afectan a la clase trabajadora son iguales en todo el mundo, por eso surge la necesidad de actuar unidos y de manera solidaria para tener más fuerza y solucionar los problemas. Su sindicación debe ser internacional. Su fuerza, su solidaridad, se amplía internacionalmente.
También se dan cuenta que en algunos casos la patronal, para abortar huelgas o mantener bajos los salarios, recurre a las “reservas de mano de obra” que, debido a la miseria y a la falta de experiencia, no han podido todavía superar la competencia elemental entre proletarios en busca de trabajo. Pero estas reservas disminuyen, al menos en lo que se refiere a los obreros cualificados. Las reservas de mano de obra que el capital moviliza, en estas condiciones, son reservas extranjeras. Contratara obreros de otros países que así haríael juego a los patronos en contra de sus hermanos obreros.
Una segunda idea es que las huelgas realizadas de manera esporádica sólo solucionan algunos problemas y que es necesario mantener una organización permanente que coordine la actuación de los distintos movimientos en todos los países para que la lucha obrera sea efectiva.
Frente a nacionalismo burgués se desarrolla y se genera el internacionalismo proletario. La búsqueda de la solidaridad y la unidad internacional para acabar con la explotación laboral.
Nace la primera internacional, Asociación Internacional de Trabajadores (A.I.T.) en 1864, en Londres, llega en 1872 a Europa y 1876 a EEUU.
EstaAIT no es la única, habrá una 2ª, 3ª y hasta una 4ª internacional, en la segunda mitad del siglo XIX.
Esta 1ª AIT es la genuina, de corte marxista y libertario (anarquista).
2ª AIT. (1889, hasta I Guerra Mundial 1914-1918). Perfil socialdemócrata. Sigue las directrices del partido social-demócrata alemán (SPD) y los partidos socialistas europeos.
3ª AIT. Nace justo después de la revolución rusa (1919). Es puramente comunista. Organizada por Lenin, líder bolchevique del nuevo gobierno soviético, que falleció en 1924, siendo su sucesor Stalin.
4ª AIT. De menor importancia en comparación, organización minoritaria, fue fundada en 1938 por Trotski y sus seguidores en la oposición a Stalin. Tras el asesinato de Trotski, en 1940, estuvo controlada por los comunistas belgas, cuyos profundos desacuerdos la llevaron a disgregarse en 1953.
LA FORMACIÓN DE LA AIT EN SEPTIEMBRE DE 1864
Crecimiento económico
Estamos en una fase de crecimiento económico, años 60, uno de esos ciclos cortos del siglo XIX, que cae rápidamente. Es un ciclo alcista: la producción europea se vende en mercados internacionales, Europa construye los ferrocarriles del este, se inicia el Canal de Suez, etc. Hay actividad económica fuerte, precios altos, época de euforia.
En esta época de ganancia, las clases menos favorecidas también quieren una parte de esos beneficios. Los trabajadores piden que les toque la parte proporcional correspondiente a su trabajo de esos beneficios que obtienen los capitalistas.
Guerra de secesión americana (1861-1865)
En esta época tiene lugar la guerra de secesión americana, La guerra entre Norte y Sur de EEUU. La conquista del oeste no ha terminado, la guerra se produce entre los estados industriales del norte y los estados agrícolas, de grandes propiedades y trabajo esclavo, del sur.
En el trasfondo, era una lucha entre dos tipos de economías totalmente distintas: una industrial-abolicionista (Norte) y otra agraria-esclavista (Sur). Pero está en juego algo más que una guerra entre el modelo económico industrial y el agrícola, se plantea por primera vez una lucha por los derechos humanos: la abolición de la esclavitud. Se trata de hacer cierta la premisa liberal de la igualdad entre todos.
Esta idea liberalista, el discurso de Lincoln de igualdad, fue fuente de inspiración para los trabajadores ideólogos europeos.
También es importante el contexto en otros países por esta época, especialmente los casos alemanese italiano, en pleno proceso de unificación. Los nacionalismos burgueses que se desarrollaban en estos países imponían su voluntad de crear mercados nacionales unidos, sometiendo las economías de esos países a las directrices capitalistas de los estados industriales más pujantes (Prusia en el caso alemán, Piamonte en el caso italiano), utilizando nuevas tecnologías industriales como el ferrocarril.
En 1861, los sureños embargaron todos los cargamentos de algodón con la esperanza de generar una depresión económica en Europa que forzase a Gran Bretaña a entrar en guerra para poder conseguir algodón. Esta política aplicada al algodón se mostró totalmente ineficaz mientras que la crisis agrícola en Europa de los años 1860 a 1862 hizo incrementar las exportaciones de grano de los estados norteños al Viejo Mundo ya que resultaron imprescindibles para evitar hambrunas. Se dijo que «El Rey Maíz fue más poderoso que el Rey Algodón» debido a que los cereales de la Unión pasaron de suponerun cuarto de las importaciones británicas a ser la mitad de ellas.
Cuando el Reino Unido tuvo que hacer frente a la escasez de algodón se dirigió a los mercados de Egipto e India, donde se incrementó en gran medida el cultivo del mismo. Además, la guerra creó trabajo en la fabricación de armas, en las herrerías y en los barcos de transporte británicos que transportaban todo tipo de mercancías a ambos bandos.
Confluencia de sindicalismos
Hay una confluencia de sindicalismos, diferentes formas de organizarse.
Una gran federación como las Trade Unions, que lucha por la transformación de las condiciones laborales.
También hay organizaciones de tipo anarquista, sobre todo en el sur de Europa: Francia, Italia y España.
Siguen presentes los Cartistas (1837-1847, 10 años) que se convirtieron en Cartistas propiamente dichos.
Hay movimientos solidarios por toda Europa, de apoyo a movimientos y líderes revolucionarios.
Por otra parte, surgen los movimientos demócratas en toda Europa occidental, lo cual supone un salto cualitativo sobre los liberales. Los demócratas reclaman:
- El sufragio universal masculino (incluso en Inglaterra ya se reclama el voto femenino).
- Intervención del estado en las relaciones laborales (reclaman una legislación laboral).
Estos movimientos democráticos están formados por profesionales, funcionarios, pequeña burguesía, en general, asalariados de “cuello blanco”.
La exposición universal de Londres (1862)
Exposición Universal el nombre genérico de varias exposiciones de gran envergadura celebradas por todo el mundo desde la segunda mitad del siglo XIX. En ellas cada país expone sus avances, sus novedades, sobre todos innovaciones tecnológicas.
En el siglo XIX cada país aportaba aquello que consideraba que no conocía nadie más. Estas exposiciones eran muy importantes pues era la época del desarrollo industrial, de la innovación en materiales. Su éxito radicaba en conseguir una gran afluencia de visitantes.
En Francia, el régimen de Luis Napoleón (2º Imperio), que pretendía llevar a cabo una política de signo social, muy populista, como muestra de simpatía hacia las aspiraciones obreras, envió a la Exposición Universal de Londres de 1862 una delegación de 552 trabajadores. La delegación, una vez en la capital británica, se puso en contacto con dirigentes sindicales ingleses de los Trade Unions, Cartistas, demócratas. Con Marx (*) y Engels (por entonces exiliados en Londres), con garibaldinos (italianos procedentes de la revolución italiana). Allí fraguó la idea de una organización obrera internacional.
Londres era el lugar de Europa con más libertad. Había gente de todo tipo.
Con motivo de esta exposición, contactaron por primera vez dirigentes, intelectuales, etc.
Comité de apoyo a los polacos (1863)
El 22 de enerose inició una serie de alzamientos en la parte de Polonia bajo soberanía rusa. Uno de los detonantes (además del nacionalismo polaco latente) fue una nueva ley de reclutamiento promulgada el año anterior. Los insurgentes atacaron con éxito a pequeñas guarniciones locales del ejército ruso, que fueron tomadas por sorpresa. Numerosas armerías fueron saqueadas y varios soldados fueron ejecutados.
Los rebeldes polacos esperaban obtener ayuda exterior, especialmente de Francia y de Prusia, pero el 8 de febrero Bismark firmó con el general ruso Gustav von Alvensleben la conocida como Convención Lavensleben, por la que acordaron medidas comunes para acabar con la insurgencia (en el supuesto de que se extendiera a la parte prusiana de Polonia) y se autorizaron mutuamente a que los ejércitos de ambos países cruzaran la frontera si así lo requería la persecución de revolucionarios. Gran Bretaña y Francia intervinieron diplomáticamente en favor de los polacos, pero no hicieron nada en la práctica. Napoleón III hizo muchas promesas, que contribuyeron a aumentar el número de adeptos a la rebelión. Numerosos cargos públicos, incluyendo al arzobispo de Varsovia, dimitieron de sus puestos ante el gobierno ruso y se pusieron a disposición del gobierno revolucionario.
Los grupos reunidos en Londres deciden iniciar su actividad y crearon un comité de apoyo a los polacos, tiene lugar un intento de ayudar en la liberación de Polonia a Rusia, sin éxito alguno.
De este comité de apoyo se pasa a una convocatoria internacional que les volverá a reunir en 1864.
LA FUNDACIÓN DE LA AIT LONDRES, 1864
Dos años después, en 1864, reunidos en Saint Martin’s Hall (Londres), formaron un comité cuya misión fue redactar un programa y unos estatutos para una Asociación Internacional de Trabajadores que, posteriormente, fue conocida con el nombre de Primera Internacional.
Llegaron delegaciones de trabajadores de toda Europa:
- Obreros ingleses de las Trade Unions, cartistas, cooperativistas y demócratas.
- Franceses, fueron la segunda delegación más numerosa, presidida por Proudhon: Ideólogo francés de tipo anarquista libertario. No defiende una teoría anarquista, pero si libertaria. Es el último eslabón entre el socialismo utópico (no estaba basado en un análisis histórico-científico) y el socialismo científico de Marx y Engels (basado en el análisis histórico del funcionamiento de la sociedad).
- Alemanes, miembros de dos organizaciones obreras alemanas distintas: del Círculo de Cultura Obrera y de la liga comunista (Marx pertenece a esta organización).
- Italianos, que no formaron una delegación, sino que se trataba de emigrados y de partidarios de Garibaldi (Líder de la revolución liberal que lucha por la unificación de Italia).
- Emigrados polacos, húngaros, alemanes y suizos.
- Se suman individualmente filántropos e intelectuales.
Una vez reunidos, toman una serie de acuerdos de constitución.
Así nació la Asociación Internacional de Trabajadores (AIT), conocida más tarde con el nombre de Primera Internacional.
Acuerdos de constitución:
- Elección de un comité provisional, más tarde Consejo General o Consejo Central. Figurando entre ellos, en representación de los alemanes, Marx y Engels.
- Se planteó la necesidad de redactar los estatutos y, después de una serie de discusiones, el Comité se decidió por las propuestas de Marx, quien fue encargado de elaborar el mensaje inaugural o manifiesto (“El memorial de la clase obrera”) y los estatutos.
- En ese memorial destacan dos ideas principales, sobre las que se fundamentan los principios de la AIT:
- La clase obrera debe aspirar a la conquista del poder político “… unida por la asociación y guiada por el saber”, formando, por tanto, una organización internacional guiada por el conocimiento. La consecuencia inmediata es que estas organizaciones cumplían una función educativa, de alfabetización.
Para ello, debe contar con una organización propia: un partido, y con un programa independiente, de clase obrera. Estos partidos serían los defensores de las ideas sostenidas por la Internacional y se articularían como «vanguardia organizada de las fuerzas proletarias»
Se insiste en este punto, formación política con programa independiente, para alejarse así de todos los partidos burgueses (están todavía muy cerca las revoluciones de 1848, guiadas por los burgueses), e incluso de los demócratas.
Acuerdan también la celebración de un congreso anual y formar secciones de la AIT por países.