Constitución de 1812 y Reformas Liberales en España: Un Recorrido Histórico

La Constitución de 1812: El Fin del Antiguo Régimen y el Nacimiento del Estado Liberal

Con la Constitución de 1812, España puso fin al Antiguo Régimen, sustituyéndolo por un Estado liberal. Se mantuvo la monarquía como forma de Estado, pero limitada a las atribuciones que le reconocía la Constitución. España se convirtió en una Nación que reunía a los españoles de la Península y América. La soberanía, en contra del modelo absolutista, residía en la Nación, representada por diputados en las Cortes. Con este documento, triunfaba la revolución liberal en España, estableciéndose la división de poderes, reformándose la Administración del Estado con una nueva división provincial y liquidándose el orden estamental con la introducción de medidas de libertad económica.

Ideas Secundarias de la Constitución de 1812

  • Se reconocieron los derechos individuales, aunque no la libertad religiosa, estableciéndose la religión católica como la única de la Nación española (art. 12).
  • Se proclamó la monarquía constitucional como forma de gobierno del Estado español (art. 14). El monarca ya no era titular de la soberanía y su poder quedaba limitado.
  • Se estableció la división de poderes: el ejecutivo (rey), el legislativo (Cortes, compartido con el rey) y el judicial (tribunales).
  • Las Cortes, unicamerales, representaban a la Nación. El sistema electoral para la elección de diputados era el de sufragio universal indirecto.
  • Se instauró el principio de unidad de Códigos, comunes para todo el territorio español.

La Constitución de Cádiz estuvo vigente en tres periodos:

  1. Desde su promulgación hasta su derogación por Fernando VII en 1814.
  2. Durante el Trienio Liberal (1820-1823).
  3. Desde el motín de los sargentos de La Granja (1836) hasta la promulgación de la Constitución de 1837.

El Decreto de 1 de Octubre de 1823: La Restauración Absolutista de Fernando VII

En la parte final del texto, se dispone la anulación de toda la legislación aprobada por el gobierno liberal desde que el monarca juró la Constitución de 1812, el 7 de marzo de 1820, hasta el 1 de octubre de 1823. Se advierte que las leyes aprobadas y sancionadas por él, como exigía la Constitución, se habían llevado a cabo en contra de su «voluntad» y careciendo de «libertad». Fernando VII dejaba de ser un rey constitucional y volvía a ser un rey absoluto.

Justificaciones de Fernando VII para la Anulación de la Legislación Liberal

Antes de finalizar con la resolución que anulaba la legislación liberal, Fernando VII introduce una serie de argumentos para justificarla:

  • El pronunciamiento de Riego es calificado de «criminal traición», «desacato al monarca», «violento» y «cobarde».
  • Se argumenta que no todos estaban de acuerdo con la Constitución, como ocurría con los absolutistas o realistas, formándose guerrillas realistas en contra del gobierno y a favor del absolutismo.
  • Se menciona que Europa, en concreto la Santa Alianza, tampoco aprobaba lo que ocurría en España, y no estaba dispuesta a que la revolución liberal española de 1820 sirviera de ejemplo, pudiendo «trastornar todos los Tronos y todas las instituciones antiguas».

La Desamortización de Mendizábal: Un Impulso al Liberalismo Económico

El texto, dirigido a la Regente, establece en su primera línea la venta de los bienes que, expropiados al clero regular, habían pasado a ser nacionalizados («han venido a ser propiedad del Estado»). Esta venta se realizaría en pública subasta y al mejor postor.

Objetivos de la Desamortización de Mendizábal

  • Garantía positiva a la deuda nacional: Constituye el objetivo principal, buscando aumentar los recursos del Estado para resolver el problema crónico del endeudamiento, agravado por la guerra carlista.
  • Vivificar una riqueza muerta, desobstruir los canales de la industria: Se pretendía establecer la plena propiedad privada, principio básico del liberalismo económico, y allanar el terreno para el desarrollo de la naciente Revolución Industrial.
  • Ensanchar la patria e identificar con el trono de Isabel II: Se buscaba que los compradores de tierras amortizadas se comprometieran con el triunfo de los liberales en la guerra carlista.
  • Crear una copiosa familia de propietarios: Establecer una clase media que permitiera el desarrollo económico y consolidara el régimen liberal.
  • Triunfo completo de nuestras actuales instituciones: Conseguir el triunfo del liberalismo político.

En conclusión, junto con otras medidas, el objeto principal era convertir la propiedad vinculada del Antiguo Régimen en propiedad libre para que se pudiera comprar y vender en el mercado.

El Manifiesto de Manzanares: Un Llamamiento a la Rebelión Liberal

El documento es un manifiesto que, en tono exhortativo, presenta la situación y anima a la rebelión política con el apoyo militar para cambiarla, presentando un programa de gobierno bastante ambiguo. Se anima a la población a continuar el movimiento iniciado en Vicálvaro, una pequeña escaramuza que terminó con la retirada de las tropas gubernamentales y de las sublevadas. Tras esa batalla, la indecisión podía provocar el fin de la insurrección, por lo que se decidió redactar el manifiesto, pues «la nación disfrutará los beneficios del régimen representativo«.

Programa Político del Manifiesto de Manzanares

  • Mantenimiento del trono: No se pretendía derrocar el sistema monárquico ni a la reina, pero sí acabar con la corrupción de las camarillas de los últimos gobiernos moderados.
  • Reformas políticas: Se prometía volver a ampliar derechos y libertades (electoral, de imprenta) que los últimos gobiernos habían ido reduciendo, así como mejorar la situación económica reduciendo impuestos.
  • Restitución de la Milicia Nacional y descentralización: Se concede una de las peticiones tradicionales del partido progresista: la restitución de la Milicia Nacional y la descentralización de la política territorial (los conservadores tendían al centralismo, mientras que los progresistas eran más descentralizadores).
  • Convocatoria de Cortes Generales: Tras la constitución de distintas Juntas de Gobierno, se promete convocar Cortes Generales para elaborar una nueva constitución, más avanzada que la de 1845.

En conclusión, se realizan diversas promesas destinadas a movilizar al sector progresista del liberalismo.

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