Contexto de la Constitución de Cádiz y Manifiesto de los Persas
Contexto de la Constitución de Cádiz y Manifiesto de los Persas. (artículos o Era costumbre..) El problema histórico del primer tercio del siglo XIX en España reside en el enfrentamiento entre los partidarios de mantener los fundamentos políticos, sociales y económicos del Antiguo Régimen.
La España de comienzos del siglo XIX
La España de comienzos del siglo XIX estaba representada por la monarquía borbónica de Carlos IV (1788-1808), monarca absoluto que vivía atemorizado por el estallido de la Revolución Francesa en el país vecino, convencido también del poder militar francés y consciente, por tanto, de la necesidad de entablar un pacto de no agresión.
Alianzas con Francia
En este contexto, Godoy, el valido de Carlos IV, odiado por la alta nobleza, entabló una serie de alianzas sucesivas con Francia que convirtieron a España en el enemigo de Gran Bretaña. Fruto de esa alianza fue el permiso que en 1807 Carlos IV concedió a las tropas napoleónicas para atravesar la península con el fin de ocupar Portugal.
El Motín de Aranjuez
Cuando en marzo de 1808 las tropas francesas están ya en España, Godoy, ante el temor de que los franceses no cumplan sus compromisos, anima a la familia real a irse al sur. Es el momento en el que estalla el conocido motín de Aranjuez, en el que la nobleza palaciega y el clero consiguen la destitución de Godoy.
La Guerra de la Independencia
Ante la petición de ayuda de Carlos IV a Napoleón para recuperar el trono, el emperador de los franceses percibió rápidamente la debilidad política de la monarquía española. Así fue como Napoleón obligó a Carlos IV y a su hijo Fernando VII a ir a Bayona y abdicar allí de sus respectivos derechos en beneficio del emperador, quien nombró a su hermano José, rey de España.
La Constitución de Cádiz
En Cádiz, diputados absolutistas, ilustrados y liberales redactaron la primera constitución de la historia de España, que se convirtió en la primera constitución liberal del S. XIX español. La constitución promulgada en 1812 consagró por vez primera una declaración de derechos individuales, entre los que destacan la igualdad jurídica ante la ley, el derecho a la propiedad privada, la libertad de imprenta, la inviolabilidad de los domicilios, la abolición de la tortura o la igualdad fiscal. En la constitución también se consagró la división de poderes; el poder legislativo para un órgano unicameral, el poder ejecutivo reservado para el rey, que también tendría privilegios legislativos, y el poder judicial para los jueces.
Decretos de las Cortes Gaditanas
Las Cortes gaditanas aprobaron una serie de decretos, que de haberse cumplido, ponían fin al Antiguo Régimen. No obstante, la obra gaditana quedaría sobre el papel.
El Regreso al Absolutismo
Napoleón decide firmar la paz con España, retirarse y reconocer a Fernando como monarca legítimo. Se volvía así a implantar la monarquía absoluta, la sociedad estamental, el régimen señorial e incluso, la inquisición.
El Trienio Liberal
Durante tres años (trienio liberal) del 20 al 23, se puso en vigor la obra constitucional legislativa gaditana. En este paréntesis liberal, nacieron las dos tendencias del liberalismo español del siglo XIX: los moderados, partidarios de modificar el texto gaditano y atraerse a las élites del Antiguo Régimen, y los liberales exaltados, que consideraban a la constitución de 1812 y su contenido como conquistas sagradas e intocables.
La Década Ominosa
Una nueva década del absolutismo ocupó la historia de España (década ominosa del 23-33) en la que el conflicto político más importante tuvo que ver con la sucesión al trono de Fernando VII.
El Liberalismo en los años treinta del S XIX
En concreto entre 1836 y 1837 accede al poder el sector del liberalismo progresista con Mendizábal a la cabeza, que se encargaba de desmantelar de forma definitiva las instituciones del Antiguo Régimen en España y establecer las bases del marco político y económico del liberalismo español que se consolidará en el reinado de Isabel II.