Crisis de 1898 y Liquidación del Imperio Colonial

El final definitivo del imperio colonial español se produjo en 1898, tras la desastrosa guerra librada con EE.UU. en Cuba y Filipinas. La Paz de Zanjón no impidió que los cubanos siguieran queriendo la independencia. Cuba era fundamental para la economía española. La última guerra de Cuba estalló en 1895 con el Grito de Baire, bajo la dirección del Partido Revolucionario Cubano, que incitaba a la independencia total. Al fracasar la gestión del General Martínez Campos, España envió a Cuba a su oficial más duro y represivo, Valeriano Weyler, quien intentó aplastar con sangre la revolución, pero sin éxito.

En Filipinas se levantó un movimiento nacionalista que en 1896 desencadenó una guerra de independencia contra España. La clave de la guerra de la independencia de Cuba fue la intervención de EE.UU., gran potencia atlántica con grandes intereses políticos y económicos en el Caribe. La excusa de EE.UU. para declarar la guerra a España fue la voladura del acorazado Maine en el puerto de La Habana en 1898. EE.UU. culpó a España de ello.

La flota norteamericana derrotó a la española en las batallas de Santiago, en Cuba, y Cavite, en Filipinas. En diciembre de 1898 se firmó el Tratado de Paz de París entre España y EE.UU., en el que los americanos impusieron durísimas condiciones a los españoles. España vendió Filipinas, Puerto Rico y Guam a EE.UU. En 1899, España vendió a Alemania las últimas islas que poseía en el Pacífico, desapareciendo el imperio colonial español y abriendo una etapa de crisis en el país.

Las consecuencias fueron:

• Fracaso militar y político.
• Pérdida del Imperio Colonial español.
• Generación con mentalidad pesimista y de desastre.
• Necesidad de reformar el sistema político y social de la Restauración (Regeneracionismo).
• Sentimiento antimilitarista entre las clases bajas.
• Grandes pérdidas económicas: España perdió su único mercado colonial, donde exportaba sus manufacturas y obtenía materias primas.

Proyecto de Regeneracionismo Político

Alfonso XIII fue nombrado monarca, poniéndose fin a la regencia de su madre Mª Cristina. Tras el desastre de Cuba, comenzó un movimiento social, intelectual y político denominado Regeneracionismo. Los regeneracionistas pretendían buscar soluciones a la crisis de la Restauración. Fue promovido por intelectuales como Joaquín Costa, cuyas ideas se ven reflejadas en la Institución Libre de Enseñanza (ILE). Con este movimiento se proponen nuevos planes de estudio.

El Regeneracionismo influyó también en algunos políticos como Maura y el liberal Canalejas. El revisionismo político fue un intento de cambiar la Restauración desde dentro. Las primeras reformas las promovió Maura, del gobierno conservador. Su objetivo era cambiar la Restauración desde dentro, ”revolución desde arriba” para evitar la ”revolución desde abajo”, desde el pueblo.

Algunas de estas reformas son:

• Legislación social (intento de mejora de las condiciones de los trabajadores. Creación del Instituto Nacional de Previsión).
• Reforma electoral (intento de acabar con el pucherazo).
• Administración local (pretensión de dar más iniciativa a los ayuntamientos; varias provincias se juntaron en órganos de administración regional, “las mancomunidades”).

La Semana Trágica tuvo su origen en 1906 en la Conferencia de Algeciras, por la que Marruecos quedó dividido entre Francia y España. A España le perteneció el Rif, que comenzó a ser ocupado en 1909. Para ello, el gobierno llamó a los reservistas. Su movilización obligatoria encendió la llama revolucionaria. Estos protagonizaron una serie de protestas que desembocaron en una gran huelga en Barcelona. La Semana Trágica de Barcelona fue un movimiento radical extremista; durante 1909 se bombardeó toda la ciudad de Barcelona.

La respuesta del gobierno fue una dura represión. El culpable fue un anarquista, Ferrer Guardia, que fue ejecutado tras un juicio poco claro que supondrá un escándalo internacional y forzará la dimisión de Maura. La Semana Trágica mostró la fuerza del anarquismo español. Los anarquistas fundaron en 1910 el sindicato CNT.

Canalejas, líder del partido liberal, apostó por una serie de medidas:

• Reforma de impuestos (intento de eliminar los impuestos que gravaban los productos de primera necesidad).
• Reformas de reclutamiento militar (pasó a ser obligatorio en tiempos de guerra y se abolió la rendición).
• Reforma religiosa (prohibición de la creación de nuevas órdenes religiosas, la Ley del Candado, para controlar el poder de la Iglesia).

Canalejas fue asesinado por un terrorista anarquista. El revisionismo de Canalejas se frustró tras su asesinato.

Crisis del Parlamentarismo y Neutralidad en la Primera Guerra Mundial

El régimen de la Restauración comenzó con un declive hacia su descomposición. Los nuevos líderes políticos no estaban a la altura y el turno dinástico dejó de funcionar. Alfonso XIII perdía la confianza en sus miembros y se acercaba al ejército. Se multiplicó la fuerza del republicanismo, del movimiento obrero y del nacionalismo.

Se produjeron enfrentamientos entre el partido conservador y el liberal, y también enfrentamientos internos por el liderazgo de los partidos.

Republicanismo

Su ideología era el progreso económico, la democracia, la república, la justicia social y el anticlericalismo. Contaban con el apoyo de la pequeña y mediana burguesía, muchos trabajadores e intelectuales. El Partido Radical, dirigido por Lerroux, se convirtió en la principal organización republicana.

Nacionalismo

El nacionalismo catalán ganó fuerza con el desastre de Cuba. El partido más fuerte pasó a ser la Liga Regionalista de Cataluña, dirigido por Cambó, partido conservador y católico. Otro de los partidos más importantes fue Esquerra Republicana de Cataluña, cuyos dirigentes fueron Maciá y Companys, partido nacionalista de izquierda, más liberal y reformista.

En cuanto al nacionalismo vasco, tuvo al PNV al frente, un partido conservador y católico.

Movimiento Obrero

En 1917 se llevó a cabo la Revolución Bolchevique, que influyó en el movimiento obrero español. En 1910 se funda la CNT, partidaria de la acción directa, el uso de la violencia y el abandono de la política y los partidos. La única organización debía ser el sindicato.

En Andalucía se vivió el Trienio Bolchevique (1918-1920), años en los que los jornaleros protagonizaron huelgas y exigieron la reforma agraria. En Cataluña se dio el fenómeno del pistolerismo: frente al terrorismo rojo de la CNT, el empresariado respondió con el terrorismo blanco, y el gobierno también fue en contra del anarquismo (terrorismo de Estado), sucedieron detenciones ilegales, torturas y desapariciones; la policía aplicaba la ley de fugas.

En 1910, el PSOE formó parte de una alianza con los republicanos, la conjunción republicano-socialista. La UGT realizó muchas manifestaciones, huelgas… buscando reformas y derechos para los trabajadores. Tras el triunfo de la Revolución Bolchevique, el PSOE sufrió una crisis interna, se dividió y surgió el PCE, seguidor del comunismo ruso, que apostaba por la revolución proletaria para tomar el poder.

Crisis General o Estructural de 1917

Entre 1914-1917, con motivo de la I Guerra Mundial, España se declaró neutral. A partir de 1917, la Restauración vivió una crisis general.

Las Juntas de Defensa eran asambleas de oficiales de infantería que defendían los intereses laborales de los militares. Los militares estaban descontentos con las desigualdades entre la Península y los africanistas. Alfonso XIII aceptó muchas de las quejas. El ejército volvía a tener importancia en la vida política.

La Liga Regionalista de Cataluña convocó una Asamblea de Parlamentarios, en ella se reunieron todos los grupos de oposición, exceptuando a los anarquistas. Las intenciones de estos grupos de oposición eran: que hubiese una renovación política y que se crease un modelo descentralizado de Estado. La Asamblea supuso que toda la oposición trabajara unida contra la Monarquía de Alfonso XIII, pero se disolvió por las grandes diferencias entre sus miembros.

La CNT y la UGT se unieron para celebrar una huelga general.

Fracaso de los Gobiernos de Concentración Nacional

Se intentó un gobierno de concentración nacional, formado por ministros liberales y conservadores. Los nuevos líderes de los partidos son: el conservador Dato y el liberal Romanones. Ante el agotamiento de la Restauración, Alfonso XIII se fue acercando cada vez más al ejército.

Oposición Política al Régimen

La oposición política al régimen estaba formada por grupos sociopolíticos que habían sido excluidos del gobierno. Destacan:

• Carlistas: Habían desaparecido tras su derrota en 1876, se refundaron en la Unión Católica en 1890, rechazaban la vía armada y defendían la religión católica y la Iglesia. Algunos carlistas se integraron en el nacionalismo catalán y vasco.
• Republicanos: A pesar del fracaso de la I República, sus ideales seguían vivos, eran muy débiles porque existía una gran división entre ellos:
  • Partido Posibilista: Era el partido más moderado. Su líder era Castelar, contaba con el apoyo de la burguesía y las clases medias urbanas, este acabará integrándose en el Partido Liberal de Sagasta.
  • Partido Republicano Progresista: Era un partido radical, apoyó levantamientos a favor de la República, sus líderes son Zorrilla y Salmerón.
  • Partido Federal: Su líder era Pi y Margall. A finales del siglo XIX se integró en gran parte de los nacionalismos vasco, catalán y gallego.
• Movimiento Obrero: Se llevó a cabo al principio de la Restauración, estaba muy dividido. Los focos industriales y algunas zonas campesinas fueron la cuna del movimiento obrero.
  • Anarquismo: Cuyos orígenes están en el Sexenio Revolucionario, sus principales focos fueron Barcelona y Andalucía. Combatía todo el comunismo literario. Para ello rechazaba la política y los partidos, defendiendo la creación de sindicatos. En 1881 se fundó la FTRE, primera organización anarquista. En 1883, el campo andaluz sufrió las acciones de la organización La Mano Negra, que exigía el reparto de tierras. En 1890, Barcelona se convirtió en el escenario del terror anarquista. En los juicios de Montjuic se condenó a varios militares anarquistas; la respuesta de los anarquistas fue el asesinato de Cánovas en 1897.
  • Socialismo: Los orígenes se encuentran en el Sexenio Revolucionario, con la difusión del marxismo por Lafargue. En 1879 se fundó el PSOE, ilegalmente; su fundador fue Pablo Iglesias, defendía la política, la participación en las elecciones y la presencia en las Cortes para defender el proletariado. En 1888, el PSOE fundó la UGT.
• Regionalismo-Nacionalismo: Nació en Cataluña, Euskadi y Galicia.
  • Nacionalismo Vasco: Tuvo su origen en la derrota carlista en 1876. La abolición de los antiguos fueros vascos y la llegada de inmigrantes fueron vistas como una amenaza hacia los vascos. El principal ideólogo fue Sabino Arana, quien fundó el PNV.
  • Nacionalismo Catalán: Pretendía recuperar la lengua catalana para la poesía, literatura y prensa. La primera muestra se recoge en Pi y Margall. El verdadero fundador fue Valentí Almirall, quien redactó el manifiesto Lo Catalanisme en 1866. En 1901 se creó la Lliga Regionalista de Cataluña.
  • Galleguismo: Apareció el Rexurdimento, un movimiento que pretendía recuperar la lengua gallega para la poesía y literatura. En Galicia, el nacionalismo no tuvo tanto éxito debido a que la sociedad era distinta, no era una sociedad industrial y burguesa como en el País Vasco y Cataluña.

Manifiesto de Primo de Rivera (13 de septiembre de 1923)

Introducción: Fragmento del manifiesto de Primo de Rivera (13 de septiembre de 1923), redactado con motivo del golpe de Estado por el que se pone fin al sistema de la Restauración y que instaura una dictadura militar en España.

Clasificación: Fuente escrita primaria y documento histórico-circunstancial de carácter político.

Manifiesto: Es una declaración pública de principios e intenciones, a menudo de naturaleza política, formulada generalmente por individuos o partidos políticos. En los manifiestos suele emplearse un lenguaje exhortativo, ya que su finalidad es la de convencer o persuadir a la opinión pública de que acepte un determinado programa o posición política.

Documento de carácter público pero no oficial, es decir, no emana de la autoridad derivada del Estado; es de ámbito nacional.

Autoría: Documento redactado el 13 de septiembre de 1923 en Barcelona por el general Primo de Rivera, a la sazón Capitán General de Cataluña.

Miguel Primo de Rivera y Orbaneja, marqués de Estella (1870-1930), era un militar de prestigio nacido en el seno de una familia de larga tradición militar. Luchó en las campañas de Filipinas, Cuba y Marruecos, alcanzando el grado de general a los 42 años. En 1922 fue nombrado capitán general de Barcelona, puesto desde el cual protagonizó el golpe de Estado que dio paso a la Dictadura (1923-1930). La retirada de la confianza del rey motivó su dimisión y su exilio en París, donde murió pocas semanas después.

Destinatario: «Al país y al ejército».

Intencionalidad: Aunque el golpe de Estado tenía como finalidad la toma del poder, la intención de Primo en este manifiesto es justificar dicho pronunciamiento ante la nación.

Contexto histórico:

Núcleo temático 6: “Crisis del Estado liberal, la Segunda República y la Guerra Civil” / 6.1. “Regeneracionismo y revisionismo político” / “La Dictadura de Primo de Rivera”.

Contexto histórico de España: Se sitúa durante el reinado de Alfonso XIII, en la crisis de la Restauración.

Golpe de Estado pacífico dado por Primo de Rivera en Barcelona (13 de septiembre de 1923), que encontró escasa resistencia en una opinión pública nacional cansada de la inestabilidad política de las últimas décadas. El mismo rey accedió al golpe y nombró a Primo de Rivera presidente de un gobierno militar.

El general instauraría, a partir de entonces, una dictadura que se extendió hasta 1930 y que tuvo como principales éxitos la paz social y el desarrollo económico, aunque fue incapaz de institucionalizarse políticamente y acabó por derrumbarse cuando la coyuntura de bonanza económica (“los felices años veinte”) empeoró a partir de 1929.

Semana Trágica: Manifiesto del Congreso de Tarrasa (18-20 de julio de 1909)

El texto, de naturaleza política, es un fragmento del Manifiesto del Congreso de Tarrasa, realizado entre el 18 y el 20 de julio. El destinatario es público, ya que se trata de un manifiesto, es decir, un escrito público de la agrupación obrera de Tarrasa en este caso, en el que se exponen unos acuerdos. Tras la celebración de este congreso, los socialistas llegaron a un compromiso con Solidaridad Obrera, que agrupaba a unos 130 sindicatos catalanes, y ambos grupos decretaron la huelga general y crearon un comité director de la misma. El contexto histórico del Manifiesto de Tarrasa es la crisis de 1909, que tiene una doble dimensión: por un lado, es el punto álgido de la «cuestión marroquí», y por otro, y también como consecuencia de esta, supone el estallido de la «Semana Trágica».

Constitución de 1876

Se nos presenta para comentar un texto que tiene por título “Constitución de 1876”. Nos presenta una serie de artículos que resumen los fundamentos en los que se basa la constitución monárquica de 1876, aprobada por las Cortes y sancionada por el rey Alfonso XII.

Para realizar el comentario de este texto, procederemos de la siguiente forma: localización del texto, análisis del mismo y contextualización. Finalizaremos con unas breves conclusiones, señalando la importancia que tuvo el texto.

Tipo de texto: Según la fuente, es un texto histórico primario; según la forma, es una Constitución y, según el tema, es un texto político-jurídico.

Autor: Colectivo (las Cortes junto con el rey Alfonso XIII).

Destino: Está dirigido a un colectivo y su finalidad es pública.

Época: Madrid, 30 de junio.

Discurso de Cánovas del Castillo sobre el Sufragio Universal (1888)

«Este texto pertenece a un fragmento de un discurso pronunciado por Cánovas del Castillo en 1888. Es un texto de fuente primaria y de índole política.

Cánovas del Castillo se dirige al Parlamento Español. Básicamente, el autor defiende la Restauración Monárquica y la abolición del sufragio universal.

El funcionamiento del sistema político diseñado por Cánovas requería la existencia de dos grandes partidos dinásticos que se alternasen en el poder. Este turno de partidos se cumplió escrupulosamente hasta finales del siglo XIX, cuando la crisis de 1898 puso en jaque el sistema. Al otro lado del Partido Conservador, el proyecto bipartidista requería otro partido de carácter más progresista, la llamada izquierda dinástica, y Cánovas propuso a Sagasta su formación. De un acuerdo entre progresistas, unionistas y algunos republicanos moderados nació el Partido Liberal. A ambos partidos les correspondía la tarea de aunar a los diferentes grupos y facciones, con el único requisito de aceptar la monarquía alfonsina y la alternancia en el poder.

Conservadores y liberales coincidían ideológicamente en lo fundamental, pero diferían en algunos aspectos y asumían de manera consensuada dos papeles complementarios. Ambos defendían la monarquía, la Constitución, la propiedad privada y la consolidación del Estado liberal, unitario y centralista. Su extracción social era básicamente homogénea y se nutrían principalmente de las élites económicas y de las clases medias acomodadas. En cuanto a su actuación política, las diferencias eran escasas. Los conservadores se mostraban más proclives al inmovilismo político, proponían un sufragio censitario y la defensa de la Iglesia y del orden social. Los liberales defendían el sufragio universal masculino y estaban más inclinados a un reformismo social de carácter más progresista y laico. Pero, en la práctica, la actuación de ambos partidos en el poder no difería en lo esencial, al existir un acuerdo tácito de no promulgar nunca una ley que forzase al otro partido a derogarla cuando regresase al gobierno.»

Funcionamiento del Sistema Canovista. La Restauración en Castilla-La Mancha

Funcionamiento del Sistema Canovista

La Restauración significó la vuelta de la monarquía liberal con la dinastía Borbón, en la figura de Alfonso XII. Cánovas del Castillo fue quien preparó este retorno. Durante el Sexenio Democrático se fundó el partido Alfonsino. Los apoyos procedían de los grupos más poderosos. En 1874 se crea el Manifiesto de Sandhurst, en el que Cánovas y Alfonso proponen terminar con la República y volver a la monarquía liberal. La Revolución triunfó gracias al Pronunciamiento del General Martínez Campos en Sagunto (1874). Y Alfonso, hijo de Isabel II, sería proclamado rey en 1875, convirtiéndose en Alfonso XII.

Sistema Político de la Restauración

El modelo político se basó en el parlamentarismo británico, en el liberalismo inglés. La estabilidad política se consiguió mediante la Constitución de 1876 y el turno de partidos. Con la Restauración se normalizó la vida política española, se acabaron los movimientos revolucionarios y los pronunciamientos que alteraron el reinado de Isabel II. Se convocaron las Cortes constituyentes mediante sufragio universal masculino para elaborar la nueva Constitución, la más duradera, llegando hasta 1923.

Sus características son:

• Pragmatismo: Permitía adaptarse a cualquier cambio político para evitar el constante cambio de constitución; artículos imprecisos y ambiguos.
• La soberanía es compartida con las Cortes y el rey.
• Las Cortes eran bicamerales (Senado, el cual era elegido por el rey, y Congreso, elegido mediante sufragio censitario hasta 1890, que pasaría a ser elegido por sufragio universal masculino).
• El Estado era confesional (católico) con libertad de culto en el ámbito privado.

En 1885, tuvo lugar el Pacto del Pardo, en el que Cánovas, Sagasta y Mª Cristina llegan a un acuerdo y establecen el turnismo, que consistirá en la alternancia pacífica del gobierno de los siguientes partidos:

• Partido Conservador: Liderado por Cánovas del Castillo, heredero del partido Alfonsino, del Sexenio Revolucionario. Su ideología era cercana al partido moderado de la época de Isabel II. Sus miembros eran aristócratas, latifundistas, rica burguesía y clérigos. Defendía el sufragio censitario, la limitación de derechos y libertades, el catolicismo oficial y el modelo de Estado centralista.
• Partido Liberal Fusionista: Liderado por Sagasta, recogía la herencia de progresistas y demócratas. Sus bases eran la mediana y pequeña burguesía de ideas más avanzadas, no recibía el apoyo de las clases obreras. Eran partidarios del sufragio universal masculino, la tolerancia religiosa y la ampliación de derechos y libertades como el de reunión.

El turnismo se pudo llevar a cabo gracias a:

• La población real: el rey se aseguraba de que no le iban a derrocar y actuaba como árbitro, ya que poseía grandes poderes.
• El fraude electoral: las elecciones eran manipuladas para asegurar el turnismo. Se manipulaban a partir de:
  • El encasillado: recibía este nombre el diputado que los partidos arreglaban como elegido en cada provincia.
  • El pucherazo: recibía este nombre la manipulación de los votos de diversas maneras para asegurar el triunfo del encasillado.
  • El caciquismo: eran familias con un gran poder económico y con influencias políticas que controlaban una determinada zona.

En cuanto a la evolución política durante el reinado de Alfonso XII y la Regencia de María Cristina (1875-1902), el reinado de Alfonso XII fue un periodo breve. El gobierno fue desempeñado principalmente por el partido conservador de Cánovas, el cual solucionó los siguientes problemas:

• La Tercera Guerra Carlista: en 1876 puso fin a esta guerra. Con el fin de esta guerra vino la abolición de los fueros del País Vasco y Navarra.
• La Guerra de los 10 años de Cuba: puso fin a este conflicto enviando al General Martínez Campos para pacificar el conflicto mediante acciones de guerra y la negociación política (Paz de Zanjón en 1878).

Tras morir Alfonso XII, se hizo cargo de la regencia su viuda, Mª Cristina, hasta la mayoría de edad de Alfonso XIII. Con la muerte de Alfonso XII, comenzó realmente a funcionar como presidente tras el Pacto del Pardo en 1885. El partido liberal fusionista aprovechó e hizo alguna reforma:

• La Ley de Asociaciones en 1887: los obreros se asociaron.
• La Ley del Jurado: intentaron que la justicia se democratizara.
• La Ley de Sufragio Universal en 1890: cambiaron la elección de los miembros del Congreso a través del sufragio censitario por la elección de estos a través del sufragio universal masculino.