a)Causas. 

A comienzos de 1917 el descontento era generalizado. El alza de precios y la escasez de alimentos contrastaban con el escándalo de las fortunas logradas con la especulación mercantil que se  aprovecharon de la neutralidad española durante la I Guerra Mundial para enriquecerse. La oposición criticaba la inoperancia del gobierno y la corrupción de la oligarquía liberal-conservadora. A estas críticas, el gobierno respondíó con la suspensión de Cortes, la detención de los líderes de la oposición, PSOE (Largo Caballero y Besteiro) y las restricciones de los derechos civiles. 

b)Manifestaciones. 

La crisis del 17 tiene un triple origen, militar por el descontento creciente del Ejército, político por supresión de las garantías constitucionales y el  fallo del turnismo y social por la subida de precios, que desemboca en movilizaciones proletarias. Se formó en ese momentoun frente reformista de oposición al sistema político que confluyen con la intención de derribar al gobierno. 

● La crisis militar: Juntas Militares de Defensa. El descontento generalizado provocado por: excesiva oficialidad, diferencias entre los militares africanistas más premiados y los peninsulares; salarios bajos, agravados por el alza de precios; la incapacidad técnica y la falta de medios materiales, más evidentes al conocer las noticias de los ejércitos europeos que luchan en la guerra. El descontento desembocó en la formación en 1916, por el coronel Márquez, de Juntas Militares de Defensa, asociación de militares para obtener sus reivindicaciones. Emiten el “Manifiesto de Junio de 1917” donde se critica la situación de los cuarteles y la política de ascensos desiguales entre militares de guarnición y africanistas, se culpa al gobierno de los males del ejército y del país y dan un ultimátum al gobierno para que acepte sus reivindicaciones profesionales y económicas. Una vez que se reconocen a las Juntas como órganos representativos, estas emiten un nuevo Manifiesto con reivindicaciones políticas de corte regeneracionista: piden la regeneración de la vida política, fin del caciquismo, cortes constituyentes, critican a la oligarquía gobernante y piden al rey un gobierno de concentración nacional. 

El tono regeneracionista de las Juntas de la oposición al gobierno es bien acogido por la prensa, la opinión pública y los partidos políticos de izquierdas: regionalistas, republicanos y socialistas. 

Además el movimiento de las Juntas se extiende a los funcionarios de Correos y Telégrafos y de Hacienda lo que provocó una crisis social que llevó la situación al borde del pronunciamiento, detenido por el surgimiento de la Asamblea de Parlamentarios y la Huelga General de Agosto.
El presidente Dato suspende las garantías constitucionales y censura las juntas para limitar la extensión de la crisis. 

● La crisis política: Asamblea de Parlamentarios, tiene como protagonista a los parlamentarios catalanes reclamando la apertura de las Cortes, en Junio. La iniciativa la llevan los parlamentarios catalanes, Cambó y Prat de la Riba, la Lliga Regionalista convoca a una reuníón a todos los partidos de la oposición a la que asistieron catalanistas, republicanos, reformistas y socialistas, quienes acuerdan una Asamblea Nacional de Parlamentarios para reformar a fondo la vida política: cambio de gobierno, convocatoria de Cortes Constituyentes y creación de Comisiones para la reforma de ejército, de la Constitución, de la enseñanza y la justicia y las reformas sociales.

Se intentó un acuerdo con el movimiento de Juntas Militares pero estos desconfiaron de los separatistas, republicanos y socialistas. Al mismo tiempo los regionalistas temían el estallido de una revolución proletaria, similar a la Revolución de Febrero en Rusia.

El gobierno acusa el golpe, pero se sintió impotente para responder: detuvo a los parlamentarios para volver a ponerlos en libertad.

● La crisis social: Huelga General, la huelga general de Agosto será el principal factor de la crisis.

A comienzos de  1917 el descontento era general. La tensión social iba en aumento ante la carestía de los precios (37% del 14 al 17), ante la ausencia de medidas del gobierno, el incremento de las huelgas y la intransigencia del gobierno ante las mismas. 

Sindicatos y partidos de izquierdas convocan una huelga general indefinida para el mes de Agosto con la intención de forzar al gobierno al cambio de rumbo (objetivo político) y en demanda de mejoras salariales y de jornada laboral (objetivo económico).

En Julio se inicia una huelga de ferroviarios en Valencia, a la que se sumó toda la ciudad ante la represión que terminó con la declaración de estado de sitio de la ciudad el día 23. Ante la negativa de la compañía a readmitir a los trabajadores, los sindicatos convocaron huelga general en todo el país para el 10 de Agosto. Se generalizo el día 13 de Agosto a zonas rurales y urbanas de todo el país y a todos los sectores: metalúrgica, ferroviarios, minería, campesinos.

La respuesta del gobierno fue durísima: tropas en la calle, ejército, muertos, detenidos. El 20 los sindicatos desconvocaron la huelga, aunque se mantiene en Asturias. Los miembros del comité de huelga (Largo Caballero, Besteiro, Saborit) fueron condenados a muerte, aunque pocos meses más tardes serán indultados al ser elegidos diputados. 

Cuando se produce la Huelga General de Agosto, el enfrentamiento entre militares y huelguistas romperá el frente de oposición reformista, al respaldar la Juntas Militares la actuación del gobierno en la represión de la Huelga General.