De la Dictadura a la Democracia: La Constitución Española

Transición Española a la Democracia y la Constitución de 1978

A. La Transición Española

Tras la muerte de Franco el 20 de noviembre de 1975, se inició en España un periodo de transición a la democracia que culminó con la aprobación de la Constitución española el 6 de diciembre de 1978 y, más tarde, con la entrada de nuestro país a la Comunidad Europea en 1986.

Esta transición se realizó de forma pacífica en un ambiente de tolerancia entre las distintas fuerzas políticas, hecho que fue aplaudido internacionalmente y se convirtió en un modelo a seguir para muchos países.

Durante esta etapa de transición, la economía experimentó un fuerte desarrollo, superando la grave crisis en la que estaba sumido el país tras la dictadura. El país se modernizó y la cultura y el arte se vieron favorecidos gracias a la dotación de libertad.

Inicios de la transición

Una semana después de la muerte de Franco, Don Juan Carlos de Borbón es nombrado rey, iniciándose el proceso de transición. Existían dos posibles vías:

  • Vía reformista: reformando las instituciones y leyes franquistas.
  • Vía de la ruptura: eliminando de forma inmediata las instituciones franquistas. Esta vía era defendida por la oposición, que exigía la amnistía para presos políticos, la legalización de los partidos políticos y la convocatoria de cortes constituyentes.

Se optó por la vía reformista. El gobierno de Arias Navarro comenzó una sutil reforma rechazada por la oposición. Debido a las protestas, Arias Navarro dimitió en 1976 y el rey designó como presidente a Adolfo Suárez.

Medidas frente a la crisis económica

El gobierno de la UCD (Unión de Centro Democrático) inició una política de consensos, firmando con sindicatos y partidos en 1977 los Pactos de la Moncloa.

En estos pactos, los sindicatos aceptaron una moderación salarial y la flexibilidad del empleo a cambio de la contención del gasto público, la reforma contra el fraude fiscal, la ampliación del seguro de desempleo y un mayor gasto social.

Sin embargo, estas mejoras no fueron suficientes para recuperar totalmente al país de la crisis económica, ya que la atención se centraba sobre todo en cuestiones políticas.

B. La Constitución Española de 1978

La Constitución, aprobada en referéndum (procedimiento jurídico por el que se someten al voto popular leyes o actos administrativos cuya ratificación por el pueblo se propone) el 6 de diciembre de 1978, recoge los derechos y deberes de la ciudadanía y regula el funcionamiento del Estado y sus instituciones.

Los derechos y libertades

Son muy amplios. Su cumplimiento lo garantiza el Tribunal Constitucional:

  • Derechos civiles: normas y principios que regulan las relaciones más generales y cotidianas de los ciudadanos. Destacan: derecho a la vida, igualdad ante la ley, libertad religiosa, derecho a la intimidad y libertades de expresión, asociación y reunión.
  • Derechos sociales: afectan al conjunto de la ciudadanía, como la seguridad social, un medio ambiente adecuado, el derecho al trabajo y a una vivienda digna.

Funcionamiento del Estado

La Constitución establece unos principios:

  • España es un Estado social (porque predominan los intereses sociales frente a los individuales), democrático (porque asegura la participación ciudadana en la vida política) y de derecho (porque se basa en la ley).
  • La soberanía nacional reside en el pueblo español, que delega su poder en representantes elegidos por sufragio universal (por votación democrática).
  • La forma del Estado es la monarquía parlamentaria. El poder reside en el Parlamento, como representante de la soberanía nacional. El rey simboliza la unidad de España, modera las relaciones entre los tres poderes (ejecutivo, legislativo y judicial) y realiza una importante labor en las relaciones internacionales.
  • Los poderes del Estado se dividen en distintas instituciones: el poder legislativo reside en las Cortes Generales (constituidas por dos cámaras: el Congreso de los Diputados y el Senado); el poder ejecutivo lo ejerce el Gobierno; y el poder judicial lo ejercen los tribunales de justicia independientes.

Gobierno de Adolfo Suárez (1976-1979)

Cuando Adolfo Suárez llegó al poder, tuvo que enfrentarse, por un lado, a una reforma política encaminada a la democracia y, por otro lado, a sacar al país de la profunda crisis económica originada desde 1975.

Reforma política (1976-1977)

  • La Ley para la Reforma Política modificaba la legislación franquista y establecía la soberanía popular, cuyos miembros eran elegidos por sufragio universal.
  • Apoyo a la oposición. Este apoyo se consiguió legalizando todos los sindicatos y partidos políticos, incluido el comunista, y decretando una amnistía política.
  • Elecciones de 1977. Dieron mayoría al partido de Suárez, Unión de Centro Democrático (UCD). Éste llevó a cabo una política de consenso con todas las fuerzas políticas para elaborar la Constitución.

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