De la Rusia Zarista a la Revolución Bolchevique: Un Recorrido Histórico

La Revolución de 1905

La agitación social y política aumentó como resultado de las malas condiciones de vida, la corrupción en la corte de Rasputín y la derrota ante Japón en la guerra ruso-japonesa.

Esto provocó el estallido de un movimiento revolucionario contra la opresión zarista, con el objetivo de conseguir el fin de la opresión, la justicia social y la mejora de las condiciones de vida. La capital, en la que residía el zar, fue duramente reprimida por el ejército (Domingo Sangriento).

Tras este intento de revolución, Nicolás II (el zar) introdujo leves reformas económicas y políticas. Se convocó una Duma y se propuso una reforma agraria, pero estos intentos quedaron muy lejos de transformar las arcaicas estructuras sociales y políticas del imperio.

La Revolución de Febrero de 1917

La decisión de Rusia de participar en la Primera Guerra Mundial provocó que la mayoría de las fábricas se transformaran en industrias bélicas y el reclutamiento de campesinos, lo que hizo disminuir la producción agraria. Esta situación provocó la carestía y el hambre en la población. A esto se sumaron las derrotas militares ante Alemania, la enorme mortalidad que estas causaron, la disolución de la Duma por parte del gobierno y el aumento de los complots cortesanos.

Estas alteraciones provocaron movilizaciones contra el régimen.

La Caída del Zarismo

En febrero de 1917, grupos populares salieron a las calles pidiendo el fin de la guerra en pequeñas manifestaciones que provocaron la gran manifestación en Petrogrado el día 27 de febrero (Huelga General).

Tras la presión de los grupos de Soviets (organización de base de campesinos, obreros y soldados), buena parte del ejército y la presión de los partidos, el zar decidió abdicar. Tras la abdicación del zar, la Duma, de acuerdo con los Soviets, impuso un gobierno provisional.

El gobierno provisional prometió reformas políticas y sociales:

  • Declaró una amnistía.
  • Reconoció libertades civiles.
  • Prometió tierras a los campesinos.
  • Convocó una asamblea constituyente.
  • Mantuvo su participación en la Primera Guerra Mundial.

La caída del zar no puso fin a los problemas, ya que uno de los principales problemas era que la guerra continuaba y las condiciones de vida no mejoraban. Los Soviets no estaban de acuerdo con seguir en la guerra y exigían su retirada. Empezó así la existencia de un doble poder: el del gobierno provisional y el de los Soviets, que tenían gran influencia entre la población obrera.

La Dualidad de Poderes

El gobierno provisional y los Soviets seguían sin llegar a un acuerdo. Los Soviets pedían la profundización de las reformas y el fin de la guerra. Lenin, regresado del exilio, defendió una revolución proletaria, haciendo así un llamamiento a la salida inmediata de la guerra y la toma del poder por la vía insurreccional.

Las prometidas reformas no avanzaban, y Kerenski se hizo con el mando del gobierno provisional, que intentó acelerar las reformas, pero se mantenía en la guerra. Prometió unas elecciones y persiguió sistemáticamente a los bolcheviques.

Los militares zaristas intentaron un golpe de estado al gobierno provisional de Kerenski, que fracasó gracias al apoyo de los Soviets, sobre todo de los bolcheviques.

El protagonismo de los bolcheviques contra el golpe de estado hizo que su popularidad creciese. Los bolcheviques dominaban los Soviets dirigidos por Trotsky (la mano derecha de Lenin).

Lenin y los bolcheviques pasan a la iniciativa.

De Lenin a Stalin: La Tercera Internacional

Los bolcheviques pensaban que los partidos socialistas europeos habían perdido la esencia del marxismo. Por lo que era necesario crear nuevos partidos que lideraran la revolución obrera. En el año 1919 se fundó la Tercera Internacional, conocida como el Komintern. En el congreso del Komintern se aprobaron las 21 condiciones que debían cumplir los partidos que quisieran adherirse. La necesidad de expulsar a los dirigentes reformistas y aceptar plenamente las condiciones socialistas y revolucionarias del bolchevismo provocaron la división de partidos socialistas, dando lugar a los partidos comunistas. La Komintern estableció su sede en Moscú: el leninismo.

La Expansión de la Revolución Comunista

La revolución solo se consolidará si se expande a otros países. El intento más importante de insurrección revolucionaria fue el del grupo de los espartaquistas en Alemania. También se produjo una revolución en Hungría. Ambas revoluciones fracasaron. La revolución soviética creció revolucionariamente en toda Europa, pero en ninguna parte, excepto en Rusia, triunfó una revolución.

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