12. 3 Isabel II (1843-1868): El reinado efectivo
El reinado de Isabel II, fue agitado y cambiante, presentó unas características q se mantuvieron invariables a lo largo del reinado:1) Fue un periodo de tendencia conservadora, regulado por la Constitución de 1845 que establecía la participación política exclusiva de la oligarquía. El sufragio muy restringido excluía al resto del país.2) Fue además un régimen de gobiernos autoritarios, defensores del “orden” y de la monarquía fuerte, que limitó las reformas sociales y restringió las libertades.3) La reina Isabel intervino en la vida política, apoyando invariablemente a los sectores más conservadores.4) La participación de los generales en el gobierno fue continua. La exclusión de la oposición, llevaba a ésta a recurrir a los militares y al pronunciamiento militar para acceder al gobierno.5) Exclusión de la gran mayoría del país de la vida política. El régimen liberal supuso una degradación continua de las condiciones de vida de los campesinos, los trabajadores urbanos y del número creciente de obreros.
Década moderada (1844-1854)
Los primeros diez años del reinado estuvo general Narváez, líder de los moderados. Fue el principal inspirador de la Constitución de 1845, en vigor hasta 1869, que establecía:- Soberanía compartida Cortes- Rey.- Cortes bicamerales con un Senado- Un ejecutivo fuerte, eliminando los límites que la Constitución de 1937 había mantenido.- Una declaración de derechos, que permitió más tarde limitarlos con leyes ordinarias.- Se declaraba la exclusividad de la religión católica.- Se suprimía la Milicia Nacional.Una amplia legislación ordinaria siguió a la Constitución con el objetivo de crear un sistema legal liberal burgués, centralizado y muy conservador: La Ley electoral de 1846 limitó el derecho al voto. La Ley de imprenta restringió la libertad de publicar y reforzó la censura. En 1844 se creó la Guardia Civil, Se reorganizó la administración, y en 1852 se aprobó una reforma de la Hacienda, basada en los impuestos indirectos, que permitió contener la deuda.Se restablecieron las relaciones con la Iglesia: Se detuvo la desamortización (1845) y se devolvieron al clero los bienes que aún no se habían vendido. En 1851 se firmó con Roma el Concordato, por el que el Papa reconocía a Isabel II como reina y aceptaba la pérdida de los bienes ya vendidos.En 1849 algunos progresistas radicales fundaron el Partido Demócrata, para defender los derechos individuales y el sufragio universal. A comienzos de 1854 se suspendieron las Cortes y la actuación autoritaria del gobierno aumentó el descontento.
Bienio progresista (1854-1856)
La revolución de 1854 fue, un golpe de estado que triunfó gracias al apoyo popular,pero los rebeldes publicaron una proclama, el Manifiesto de Manzanares, que consiguió el apoyo popular y provocó la revolución de julio.Los progresistas aprobaron una serie de leyes encaminadas a sentar las bases de la modernización económica:_ La Ley de desamortización de 1855 de Madoz, que desamortizaba las propiedades urbanas y rústicas del Estado y de la Iglesia, propios y baldíos de los ayuntamientos y bienes en general que permanecían amortizados._ La Ley de Ferrocarriles, del mismo año, que potenció la extensión del tendido ferroviario a pesar de la fuerte especulación en Bolsa._ La Ley de Sociedades Bancarias y Crediticias de 1856, que reguló la normativa de formación y funcionamiento de las sociedades de crédito, bancos industriales, comerciales y de emisión.
Gobierno de Unión Liberal (1856-1863)
En 1857 se aprobó la Ley de Instrucción Pública y se realizó el primer censo demográfico del país. El ejército español intervino en Indochina (1858-1863), en Marruecos (1859-1860), en Santo Domingo (que intentaron recuperar) en 1861, en México en el mismo año y en la guerra entre Chile y Perú.
Crisis final del reinado (1863-1868)
En 1863, el desgaste del gobierno y las divisiones de Unión Liberal llevaron a O´Donnell a presentar su dimisión.En 1864 se inicia una grave crisis económica con la quiebra de las compañías ferroviarias, el hundimiento de las fábricas textiles y, en 1866, el crack de las Bolsas europeas, seguidas del alza de precios agrícolas debido a dos malas cosechas consecutivas. Los sucesos de la noche de San Daniel de 1865, cuando la policía disparó contra estudiantes que se manifestaban en apoyo al rector destituido por el gobierno, matando a nueve de ellos, y la sublevación del cuartel de San Gil en junio de 1866, dirigida por suboficiales y propiciada por los progresistas, contribuyeron a desestabilizar la situación. Los gobiernos isabelinos respondieron con la suspensión de las Cortes y una represión indiscriminada.En agosto de 1866 representantes progresistas, demócratas y republicanos llegaron a un acuerdo, el Pacto de Ostende, para coordinar la oposición al régimen con dos objetivos: el destronamiento de Isabel II y la convocatoria de Cortes Constituyentes por sufragio universal.La muerte de O´Donnell (1867) y de Narváez (1868) deja a la reina aislada y sin apoyos, en plena preparación del golpe que el 19 de septiembre de 1868 la derrocaría.