Decendientes de Fernando de Aragón y Castilla

El título de Rey Católico lo heredaron y conservaron sus sucesores (no en vano se habla de Felipe II como el Rey «Católico») y a día de hoy, la actual Constitución Española reconoce al rey
Juan Carlos I de España el uso de los títulos tradicionales de la Monarquía española, por lo que también puede utilizar el de Rey Católico o ser llamado Su Católica Majestad. El reinado de los Reyes Católicos significó el tránsito del mundo medieval al mundo moderno en España.

Guerra de sucesión:


Introducción:


se llama Guerra de sucesión Castellana al conflicto bélico que se produjo de 1475 a 1479 por la sucesión de la Corona de Castilla entre los partidarios de Juana de Trastámara, hija del difunto monarca Enrique IV de Castilla, y los de Isabel, hermanastra de este ultimo.

La guerra tuvo un marcado carácter internacional porque Isabel estaba casada con Fernando el Hermoso, heredero de la Corona de Aragón, mientras que Juana se había casado con el rey Alfonso V de Portugal. Francia también intervino, apoyando a Portugal para evitar que Aragón, su rival en Italia, se uniera a la poderosa Castilla.

La guerra concluyó en 1479 con la firma del Tratado de Alcaçovas, que reconocíó a Isabel y Fernando como reyes de Castilla y otorgaba a Portugal la hegemonía en el Atlántico, con la excepción de las islas Canarias, Juana perdíó su derecho al trono y tuvo que permanecer en Portugal hasta su muerte.

Pero algunos autores prefieren la expresión neutral del Guerra de 1475-1479.

Antecedentes:


El problema de la sucesión al trono de Castilla:


en 1462 nace Juana de Trastámara, la primera y única hija del rey Enrique IV de Castilla, que inmediatamente es nombrada Princesa de Asturias. En 1465 los nobles, reunidos en Ávila, acuerdan destronar a Enrique y nombran rey a Alfonso en la denominada farsa de Ávila. Los juanistas, conscientes de su posición de debilidad frente al bando isabelino, proponen al rey de Portugal, Alfonso V, tío de Juana, que se case con ella a pesar de la consaguinidad y se convierta en rey de Castilla. Fernando intercedíó ante su padre Juan II para que no declarase la guerra a Francia, concentrando su atención en los asuntos castellanos, de todas formas, ante la perspectiva de que el heredero al trono Aragónés se fuese a convertir en rey de Castilla, en Septiembre de 1475 Luis XI de Francia se puso oficialmente al lado de Juana y Portugal.

En ese momento Francia estaba también en guerra con Borgoña. Por su parte, el reino de Navarra vivía una Guerra Civil inminente entre beamonteses y agramonteses, a la que se superpónían los intentos de Francia y de Aragón por controlar el territorio.

Por ultimo el reino musulmán de Granada se mantuvo neutral, a pesar de los esfuerzos portugueses por involucrarlo en la guerra.

Rivalidad entre Castilla y Portugal en el Atlántico:


a lo largo del Siglo XV, los exploradores, comerciantes y pescadores de Portugal y de Castilla habían ido internándose cada vez más profundamente en el océano Atlántico. El único perjudicado así era el rey de Castilla.

En Agosto de 1475, tras el estallido de la guerra, Isabel reclamó que las partes de África y Guinea pertenecían a Castilla por derecho e incitó a sus comerciantes a navegar a ellas, iniciando la guerra naval en el Atlántico.

El conflicto:


Bandos de la guerra en 1475:


a favor de Juana encontramos a Portugal, Francia y una parte de la alta nobleza castellana: el arzobispo de Toledo, la familia Estúñiga, el marqués de Villena, el marqués de Cádiz y el maestre de la Orden de Calatrava.

La lucha por el trono:


Alfonso V entra en Castilla: un ejército portugués entró en el territorio de la Corona de Aragón con Alfonso V al frente el 10 de Mayo de 1475 y avanzó hasta Plasencia, donde le esperaba Juana. También aceptaron al rey portugués Zamora y otras villas leonesas del bajo Duero. Fernando concentró un gran ejército en Tordesillas y el 15 de Julio ordenó ponerse en marcha, buscando el encuentro con Alfonso. La falta de combatividad del rey de Portugal debilitó al campo juanista en Castilla, que empezó a desintegrarse.

El 4 de Diciembre una parte de la guarnición de Zamora se rebeló contra el rey Alfonso, que tuvo que huir a Toro. La guarnición portuguesa mantuvo el control del castillo, pero la ciudad acogíó a Fernando el día siguiente. La batalla de Toro: en Febrero el ejército portugués, reforzado por tropas traídas por el príncipe Juan, salíó de su base de Toro y cercó a Fernando en Zamora. Sin embargo, políticamente la batalla fue decisiva porque a continuación el grueso de las tropas portuguesas se retiró a Portugal junto con la reina Juana, cuyo bando quedó así caso totalmente desvalido en Castilla.

La guerra en el mar: uno de los objetivos de Isabel y Fernando en la guerra era arrebatarle a Portugal el monopolio de los ricos territorios atlánticos que controlaba. Desde el estallido de la guerra barcos portugueses recorrieron las costas andaluzas apresando pesqueron y barcos mercantes. En Mayo de 1476 la reina Isabel ordenó que le entregasen a este rey de Guinea capturado a su séquito para liberarlos. En 1476 una flota portuguesa de 20 barcos comandada por Fernao Gomes partíó hacia Guinea para recuperar su control. Los reyes de Castilla ordenaron preparar una flota para apresar a los portugueses y pusieron a su frente a Carlos de Valera. Saquearon la isla y capturaron a Noli, que en aquel entonces prestaba vasallaje por su territorio al rey de Portugal. Intervención francesa: el 23 de Septiembre de 1475 Luis XI de Francia firmó un tratado con Alfonso V de Portugal.

  • Fernando aprovechó la situación para asegurar su posición en el convulso Reino de Navarra. En Agosto de de 1476 Alfonso V de Portugal partíó hacia Francia, tras firmar una tregua con Isabel y Fernando. Combate del Cabo San Vicente: el rey de Francia había enviado como ayuda a Portugal a la flota el pirata normando Coullon. Cuando en Agosto de 1476 el rey Alfonso partíó hacia Francia, simultáneamente envió dos galeras portuguesas cargadas de soldados junto con los 11 barcos de Coullon a prestar auxilio al castillo de Ceuta.

    Consolidación de Isabel y Fernando:

    tras su victoria en la batalla de Toro, el rechazo del ataque francés y la tregua solicitada por Alfonso V, Isabel y Fernando quedaron sólidamente afianzados en el trono de Castilla. Los nobles del bando juanista tuvieron que aceptar la situación e irse sometiendo a los Reyes.

En Noviembre de 1476 las tropas de Isabel tomaron el castillo de Toro. En Julio de 1477 Isabel llegó a Sevilla, la ciudad más poblada de Castilla, con el objetivo de asentar su poder sobre las grandes familias nobiliarias de Andalucía.

Regreso de Alfonso V: tras su fracaso diplomático en Francia, Alfonso V finalmente decidíó regresar a Portugal. A su llegada en Octubre de 1477 se encontró con que su hijo Juan se había proclamado rey. Expediciones a las Canarias y Guinea de 1478:

Paz entre Castilla y Francia:

Fase final:


  • Ofensiva portuguesa: en Febrero de 1479 un ejército portugués dirigido por García de Meneses, obispo de Évora, penetró en Extremadura.

Los partidarios del rey Fernando, por su parte, pusieron sitio a ambas ciudades.

Esto debilitó gravemente la legitimidad del bando juanista y la pretensión del rey portugués al trono de Castilla.

  • Conversaciones de paz: a principios de Abril de 1479 el rey Fernando llegó a Alcántara para participar en unas conversaciones de paz promovidas por la infanta Beatriz de Portugal, prima y cuñada de Alfonso V y tía de Isabel de Castilla.

Los encargados de negociar el acuerdo definitivo de paz fueron, por el lado de los Reyes Católicos, Rodrigo Maldonado, oidor de la Audiencia, y por el lado del rey de Portugal, Joao da Silveira, barón de Alvito. Ambos eran miembros de los consejos de sus reyes respectivos.

El Papa Sixto IV refrendó el Tratado mediante la bulaAeterni regís de 1481.

El Tratado de Alcáçovas (también conocido como Paz de Alcáçovas)
Fue firmado en la villa portuguesa del mismo nombre (cuyo topónimo tradicional en español es Alcazovas) el 4 de Septiembre de 1479 entre los representantes de los Reyes Católicos, Isabel de Castilla y Fernando de Castilla y Aragón, por un lado, y del rey Alfonso V de Portugal y su hijo Juan por el otro. El tratado fue ratificado por el rey de Portugal el 8 de Septiembre de 1479 y por los Reyes Católicos en Toledo el 6 de Marzo de 1480, por lo que también se le conoce como Tratado de Alcáçovas-Toledo.

Alfonso V renuncia al trono de Castilla y los Reyes Católicos renuncian a cambio al trono portugués.

A Castilla se le reconoce la soberanía sobre las islas de Canaria.

Reconoce a Portugal la exclusividad de la conquista del Reino de Fez.

En paralelo al tratado de Alcáçovas se negociaron las llamadas Tercerías de Moura, que resolvían la cuestión dinástica castellana imponiendo a Juana de Castilla, rival de Isabel por el trono de Castilla, la renuncia a todos sus títulos castellanos. También acordaban la boda de la infanta Isabel, hija de los Reyes Católicos, con el hijo del rey portugués llamado don Alfonso. Tras la batalla de Toro (1476), las Cortes de Castilla reunidas en Madrigal de las Altas Torres proclaman reina a Isabel.

Conquista de Granada:


La Guerra de Granada es el nombre con el que suele conocerse el conjunto de campañas militares que tuvieron lugar entre 1482 y 1492, durante el reinado de los Reyes Católicos, en el interior del reino nazarí de Granada.

La participación de la Corona de Aragón (cuyos reinos estaban mucho menos sujetos al autoritarismo real) fue de menor importancia: aparte de la presencia del propio rey Fernando consistíó en la colaboración naval, la aportación de expertos artilleros y algún empréstito financiero. Era evidente la naturaleza de la empresa, claramente castellana, y la integración en la Corona de Castilla del reino conquistado.

  • La conquista de Navarra:


    Navarra estaba dividida a principios del Siglo XVI en dos bandos: agramonteses y beamonteses, cada uno partidario de un rey distinto. En este enfrentamiento, los reyes de Navarra firmaron un tratado con el rey de Francia que ponía en peligro a España.

Instituciones políticas:


Corona de Castilla:


se remodeló el Consejo Real en las Cortes de Toledo de 1480, haciéndolo más estructurado y dividíéndolo en partes.

En Aragón, en los municipios de señorío se instauraron los corregidores, la autoridad en el ámbito municipal, que existía en Castilla desde 1393.

  • Corona de Aragón: apenas se modificó.

Política religiosa:


el Papa Inocencio VIII concedíó a los Reyes Católicos el derecho de Patronato sobre Granada y Canarias, lo que supónía el control del Estado en los asuntos religiosos.

Política exterior:


La política exterior expansionista llevada a cabo por Fernando e Isabel fue posible gracias a una serie de factores:

La iniciativa diplomática de Fernando II de Aragón. Su propósito era conseguir los mejores acuerdos para su reino. La política matrimonial de los reyes.

Política matrimonial:


la política de los Reyes Católicos incluyó también las alianzas por los matrimonios de sus hijos. Fueron éstos:

Isabel, casada con infante Alfonso de Portugal, y después con Manuel I de Portugal, primo de su primer esposo.

María, casada con Manuel de Portugal, su cuñado, al morir su hermana Isabel.

La expansión por el Mediterráneo: Italia:


una vez finalizada la conquista de Granada, el rey Carlos VIII de Francia firmó con Fernando, en 1493, el tratado de Barcelona, mediante el cual Aragón recuperó el Rosellón y la Cerdaña a cambio de su postura neutral ante un inminente ataque francés al reino de Nápoles.

El ejército de Carlos VIII se desplazó al sur de Italia, destronando a Alfonso II, rey de Nápoles y pariente de Fernando el Católico. Fernando no dudó en intervenir y, en poco tiempo, el ejército de Gonzalo Fernández de Córdoba, el Gran Capitán, expulsó a los franceses, recuperando su trono el rey napolitano.

En 1500 el nuevo rey de Francia Luis XII firmó con Fernando el Católico el tratado de Granada para ocupar conjuntamente el reino de Nápoles. Fernando accedíó y el rey de Nápoles, a la sazón Federico I, fue destronado. Nápoles es conquistada de nuevo y vuelve a ser incluida en la Corona de Aragón.

En las Indias, anexionadas al reino de Castilla, se instauraron los sistemas administrativos tradicionales del reino castellano.

Sucesión:


Regencia de Fernando el Católico (1508-1516):


Fernando enviudó el 26 de Noviembre de 1504 a la muerte de Isabel, a unos 12 años antes de su propia muerte. Firmada la Concordia de Salamanca (1505), el gobierno fue conjunto entre Juana, Felipe y Fernando. Así quedó reinando el matrimonio en Castilla. Así quedó como único regente en Castilla Cisneros, que murió en el trayecto hacia Asturias para dar la bienvenida al nuevo rey, Carlos I de España.

Fernando se sentía heredero de estos afanes.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *