El Absolutismo, la Ilustración y la Revolución Industrial: Un Viaje por la Historia de Europa

El Absolutismo y su Práctica de Gobierno – La monarquía era la forma de gobierno que dominó en Europa desde el siglo XVI hasta fines del XVIII. Desde mediados del siglo XVII, se fue imponiendo la monarquía absoluta, en la que el rey tenía, en teoría, todos los poderes del Estado sin ninguna limitación.

La Monarquía Absoluta y sus Límites

Los reyes absolutos contaban con gobiernos y tenían un ejército permanente y una burocracia. Este poder del rey se hallaba limitado por tres aspectos:

  • Una primera limitación era la resistencia de los diversos poderes locales a las demandas del gobierno central.
  • La segunda limitación era la falta de un control eficaz de los reyes sobre las tareas de gobierno.
  • Las actividades de la aristocracia y de otros cuerpos sociales limitaban la autoridad de los reyes.

Los reyes absolutos crearon nuevos funcionarios con el objetivo de asentar su poder a nivel local. Los reyes tenían que buscar la alianza de los poderosos, sobre todo de la nobleza.

El Despotismo Ilustrado

Durante el siglo XVIII, en la mayoría de los países europeos, se habían impuesto monarquías absolutas. Se habla de despotismo ilustrado cuando nos referimos a las monarquías absolutas del siglo XVIII. La política de reformas siguió reforzando el Estado, centralizando la administración, profesionalizando el ejército y reduciendo el poder de los Parlamentos, pero ninguna de estas reformas alteró la base del Antiguo Régimen. El despotismo ilustrado intentaba reformar el poder del Estado sin cambiar sus fundamentos.

Las Bases del Pensamiento Ilustrado

Las características del pensamiento ilustrado fueron siete:

  • El predominio de la razón frente a la tradición, lo sobrenatural y la superstición.
  • La crítica como instrumento de censura.
  • La defensa de la autonomía del poder civil.
  • La tolerancia religiosa.
  • Interés por la economía y el progreso material.
  • La educación como instrumento para difundir la razón.
  • El interés de las ciencias experimentales.

El filósofo Immanuel Kant creía en la Ilustración como medio de emancipación del ser humano. Su lema: «Sapere aude» (¡Atrévete a saber!). Las bases sociales de la Ilustración se hallaban en las clases educadas: sacerdotes y otros sectores del clero.

Origen de la Ilustración

La Ilustración se inició en el periodo 1680-1730 en Inglaterra y las Provincias Unidas. Desde mediados de siglo, Francia se convirtió en el centro de esa difusión del ideario ilustrado. A las ideas acompañaron reformas de las grandes monarquías europeas: Prusia, Austria, España. Fue la época del reformismo ilustrado situado entre 1760-1789. La Ilustración fue un fenómeno europeo, sus ideas se extendieron por muchos de los territorios coloniales de las potencias europeas.

John Locke

Pensador y filósofo inglés, sus obras fueron El Ensayo sobre el conocimiento humano (1690). Su obra fue el fundamento del liberalismo político, criticó el absolutismo y defendió el derecho de rebelión frente a la tiranía. Pensaba que el poder debía dividirse: poder legislativo y ejecutivo, y opinaba que los hombres son libres e iguales por naturaleza, pero era preciso un pacto social.

La Enciclopedia

En la Enciclopedia, defendían la tolerancia, la modernización de la economía y el interés por la ciencia y la técnica. Sus directores fueron el matemático Jean Le Rond d’Alembert y el filósofo Denis Diderot.

Los Grandes Pensadores Políticos y Sociales del Siglo XVIII

Tres filósofos franceses destacaron en el siglo XVIII:

Montesquieu

(1689-1755) De origen noble, su obra fue El espíritu de las leyes (1748). Para evitar el abuso de poder, defendió la división de poderes siguiendo el modelo inglés: el poder legislativo correspondía a los Parlamentos, el poder ejecutivo debía estar en manos del rey y el poder judicial debía ser independiente.

Voltaire

(1694-1778) Enemigo del fanatismo, la intolerancia y la superstición religiosa. Sus trabajos más representativos fueron El Tratado sobre la tolerancia y El Diccionario filosófico.

Jean-Jacques Rousseau

(1712-1778) Sus teorías sociales, políticas y educativas se hallan en cinco trabajos, entre ellos El Contrato social (1762). En El Contrato social, defendió que el ser humano es bueno por naturaleza, por ello las personas establecen una ley de obligado cumplimiento que regule la convivencia social.

Los Orígenes de la Revolución Industrial

En las sociedades del Antiguo Régimen, predominaban una agricultura de subsistencia y una industria artesanal. Los medios de transporte eran lentos y el comercio estaba obstaculizado por la existencia de aduanas dentro de cada país. El desarrollo de la industria moderna fue un proceso de cambio que afectó a todos los sectores de la economía y de la sociedad. Esta primera Revolución Industrial tuvo lugar entre 1780-1870 y se caracterizó por el uso del carbón como fuente de energía, la máquina de vapor y la fábrica como símbolos del nuevo maquinismo y la industria textil del algodón.

La Revolución Demográfica

La Revolución Industrial fue impulsada y acompañada por cambios en la población. La población inglesa se triplicó en siglo y medio, de 5 millones se pasó a 17,9 millones. El crecimiento demográfico se debió a dos procesos: el aumento de la natalidad y el descenso de la mortalidad. La natalidad se vio favorecida por el adelanto de los matrimonios y por la mejora de la dieta, que incrementó la fertilidad. A partir de 1760, se inició una reducción de la mortalidad por dos causas principales: la dieta mejoró gracias al aumento de la producción y a los nuevos medios de transporte. Se produjeron importantes avances en la medicina (vacuna contra la viruela) y mejoraron las condiciones higiénicas.

La Revolución Agrícola

Se inició a principios del siglo XVIII con las leyes de cercamiento y la introducción de novedades técnicas. Gran parte del suelo agrícola de Inglaterra, especialmente en el sur y el este, estaba dividido en pequeñas parcelas que dificultaban la aplicación de nuevas técnicas. Las leyes de cercamiento permitieron la concentración de la tierra en grandes propiedades, lo que facilitó la introducción de nuevas técnicas agrícolas, como la rotación de cultivos, la selección de semillas y la utilización de abonos.

La Revolución Agrícola tuvo un impacto significativo en la Revolución Industrial. Al aumentar la productividad agrícola, se liberó mano de obra que pudo dedicarse a la industria. Además, la Revolución Agrícola contribuyó a la expansión del mercado interno, al aumentar la demanda de productos industriales.

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