El Bienio Reformista: Reformas Estructurales y Realizaciones Sociales, Culturales y Territoriales

Aprobación de la Constitución y Formación del Gobierno

Tras la aprobación de la Constitución en diciembre de 1931, se formó el primer gobierno constitucional presidido por Manuel Azaña. Este gobierno estaba integrado principalmente por republicanos de izquierdas y socialistas, quienes ocupaban carteras clave como Trabajo (Largo Caballero) e Instrucción Pública (Fernando de los Ríos).

Políticas de Reforma

El nuevo gobierno emprendió una política de reformas que pretendía transformar sustancialmente las estructuras del Estado y de la sociedad. Estas reformas despertaron grandes apoyos, pero también una fuerte oposición.

Reforma Agraria: Preveía la expropiación de los latifundios y su reparto entre los campesinos. Sin embargo, el proceso fue lento y los resultados escasos e insatisfactorios.

Reforma del Ejército: Emprendida por Azaña para ganarse la fidelidad del Ejército y reducir el número de oficiales. El Ejército dejó de encargarse del orden público, creándose la Guardia de Asalto.

Reforma Laboral: Incluía avances como la jornada de ocho horas, el seguro de enfermedad, las vacaciones pagadas y los jurados mixtos.

Reforma Religiosa y Educativa: La República inició un proceso de secularización, disolviendo los jesuitas y suprimiendo la subvención estatal a la Iglesia. La educación quedó en manos del Estado, que comenzó a formar maestros y construir escuelas.

Reforma Territorial: Se abordó la descentralización del Estado. En 1932 se aprobó el Estatuto de Cataluña, y en 1936 se aprobó el Estatuto vasco.

Reacciones a las Reformas

El régimen republicano encontró la oposición de los sectores más afectados por las reformas: Iglesia, Ejército, propietarios agrarios y organizaciones patronales. Se crearon nuevas organizaciones políticas en la derecha no republicana, como la CEDA, Renovación Española, Comunión Tradicionalista y los grupos fascistas.

Crisis y Caída del Gobierno Azaña

La lentitud de las reformas provocó una gran conflictividad social. La CNT y la FAI protagonizaron sublevaciones anarquistas. En 1933, Alcalá Zamora retiró su confianza a Azaña y forzó su dimisión como presidente del Gobierno.

El Sexenio Democrático (1868 – 1874): La Constitución de 1869. Evolución Política: Gobierno Provisional, Reinado de Amadeo de Saboya y la Primera República

La Revolución

El desprestigio del régimen de Isabel II provocó la firma del Pacto de Ostende en 1866, donde demócratas y progresistas acordaron derrocar a la reina y establecer un nuevo sistema político. La revolución, conocida como»La Glorios», se produjo en septiembre de 1868.

Gobierno Provisional y Constitución de 1869

Tras el triunfo de la revolución, se formó un gobierno provisional presidido por el general Serrano. Se constituyó una Junta Superior Revolucionaria que proclamó el sufragio universal y una amplia declaración de libertades. Las Cortes Constituyentes promulgaron la Constitución de 1869, considerada la primera constitución democrática de España.

Reinado de Amadeo I de Saboya

Amadeo I de Saboya fue elegido rey en enero de 1871. Su reinado estuvo marcado por la oposición de los republicanos, los carlistas, los monárquicos alfonsinos y el creciente movimiento obrero. Ante la inestabilidad política y la falta de apoyos, Amadeo I abdicó en febrero de 1873.

La Primera República

Tras la abdicación del rey, se proclamó la República en febrero de 1873. Sin embargo, el nuevo régimen tampoco pudo aportar estabilidad política. En tan sólo once meses, se sucedieron cuatro presidentes y se enfrentaron problemas como la guerra carlista y la guerra de Cuba.

El Cantonalismo y el Golpe de Estado de Pavía

El movimiento cantonalista, que llevó al extremo el concepto de autonomía federal, provocó la caída del presidente Pi y Margall. Su sucesor, Nicolás Salmerón, sofocó el movimiento con dureza. Emilio Castelar, el último presidente de la Primera República, gobernó por decreto y suspendió las garantías constitucionales. Cuando las Cortes se volvieron a reunir, el gobierno perdió un voto de confianza, lo que sirvió de pretexto para el golpe de estado de Pavía en enero de 1874.