El Sexenio Democrático: La Búsqueda de un Sistema Democrático en España (1868-1874)

Antecedentes

Entre 1863 y 1868, España experimentó una serie de gobiernos inestables y autoritarios, marcados por pronunciamientos y crisis económicas y políticas. El Pacto de Ostende (1866) unió a progresistas, demócratas y republicanos, lo que condujo a la Revolución de Septiembre de 1868.

La Revolución de 1868

La revolución comenzó con la sublevación de Topete en Cádiz, a la que se unieron Serrano y Prim. Enfrentándose a los realistas liderados por el Marqués de Novaliches, los revolucionarios salieron victoriosos en Puente de Alcolea (Córdoba), obligando a Isabel II a exiliarse.

El Gobierno Provisional

Tras la revolución, se creó un gobierno provisional presidido por Serrano. Prim asumió la presidencia del gobierno y el Ministerio de Guerra. El gobierno disolvió las juntas revolucionarias y atendió algunas demandas populares, como la supresión del impuesto de consumos y la libertad de enseñanza.

La Constitución de 1869

El gobierno provisional convocó elecciones a Cortes Constituyentes, donde los republicanos ganaron fuerza. La nueva Constitución (1869) estableció la soberanía nacional, el sufragio universal y una monarquía parlamentaria. También garantizaba una amplia gama de derechos y libertades individuales.

La Búsqueda de un Rey

Tras la aprobación de la Constitución, surgió la necesidad de encontrar un rey. Prim descartó el regreso de los Borbones y apoyó a Amadeo de Saboya, hijo del rey de Italia. Amadeo fue elegido rey en 1871.

El Reinado de Amadeo de Saboya

El reinado de Amadeo fue breve y estuvo marcado por la hostilidad de la nobleza y la burguesía, los intentos de independencia de Cuba, las movilizaciones obreras y populares, la oposición del republicanismo y el carlismo. En 1873, Amadeo abdicó y se proclamó la Primera República Española.

El Fracaso del Sexenio Democrático

Los intentos democráticos del Sexenio Democrático fracasaron debido a la falta de apoyo popular, la oposición de las fuerzas conservadoras y la inestabilidad política. El regreso de los Borbones en 1874 marcó el fin del Sexenio Democrático y el inicio de la Restauración.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *