Antecedentes y Establecimiento de la Dictadura de Primo de Rivera (1923-1930)
Entre 1923 y 1930 tiene lugar la segunda etapa del reinado de Alfonso XIII, marcada por la sustitución del sistema de la Restauración por una dictadura militar encabezada por el general Miguel Primo de Rivera. La conflictividad social y la guerra de Marruecos hicieron crítica la vida política del país. Los diferentes gobiernos (Maura, Dato, García Prieto) se mostraron incapaces de enderezar la situación. La derecha conservadora se decantó por la solución militar (Golpe de Estado). El 13 de septiembre de 1923, el Capitán General de Cataluña, Miguel Primo de Rivera, proclamó el estado de guerra y el rey le encargó la formación de gobierno.
Se pueden distinguir dos grandes fases: el Directorio Militar (1923-25) y el Directorio Civil (1925-30), en el que se intentó llevar a cabo una institucionalización del régimen.
Inicio de la Dictadura
El Golpe de Estado
Desde el comienzo de 1923 se rumoreaba la proximidad de un golpe de Estado y se promovió la necesidad de que algún militar (Weyler, Aguilera…) se hiciera con el poder o que el rey interrumpiera la normalidad constitucional nombrando un gobierno militar. Finalmente, el 13 de septiembre de 1923, el capitán general de Cataluña, Miguel Primo de Rivera, proclamó el estado de guerra. Primo de Rivera publicó un manifiesto dirigido «al país y al Ejército» en el que acusaba a los políticos de tener secuestrada la voluntad del país y hacía un llamamiento a la regeneración. El rey Alfonso XIII se negó a destituir a los sublevados y encargó el gobierno a Primo de Rivera, quien disolvió las Cortes, suspendió la Constitución de 1876 y formó un directorio militar. El gobierno liberal de García Prieto aceptó el golpe de Estado y se apoyó con entusiasmo.
Los republicanos y obreros tenían una actitud de pasividad motivada por el desprestigio del régimen derrocado y porque, en principio, el golpe de Estado no propugnaba la permanencia indefinida del ejército en el poder, sino que fue presentado como una solución temporal para regenerar la vida política. Por otra parte, la represión practicada por el nuevo régimen fue modesta y se canalizó preferentemente contra los sectores más radicales del movimiento obrero (la CNT y el PCE), mientras que los socialistas del PSOE y la UGT fueron tratados con una cierta benevolencia.
El Directorio Militar (septiembre de 1923 – diciembre de 1925)
La ideología de Estado de Primo de Rivera era una mezcla de autoritarismo militarista, regeneracionismo y paternalismo. Despreciaba a los políticos profesionales, al liberalismo parlamentario y rechazaba el catalanismo. Aunque el dictador tenía una simpatía por el régimen fascista implantado en Italia por Mussolini, su dictadura era más tolerante con la oposición, no intentaba controlar todos los ámbitos de la sociedad, aunque con el tiempo se aproximará al modelo italiano.
1º. Persecución del caciquismo. El gobierno de Primo de Rivera intentó en un primer momento (1923-24) luchar contra las redes de influencia existentes a nivel local. Así, fueron disueltos todos los ayuntamientos y diputaciones provinciales y denunciados los casos de corrupción. La eficacia de esta medida fue muy relativa.
2º. Reformas legislativas. Destaca la aprobación de un Estatuto Municipal (1924) seguido de un Estatuto Provincial (1925), elaborado por el director general de administración local, José Calvo Sotelo, de carácter descentralizador y que otorgaba el voto a las mujeres cabeza de familia (que no se aplicó). También se intentó llevar a cabo una reforma de la ley electoral que reconociera el voto femenino en las elecciones parlamentarias, pero no se llevó a la práctica.
3º. Fundación de la Unión Patriótica. En 1924, Primo de Rivera promovió la Unión Patriótica, que era un movimiento político que reunía principalmente a sectores conservadores que apoyaban al régimen. Aunque la Unión Patriótica controló una gran parte de los cargos públicos en niveles de la administración, no funcionó como un partido único al estilo fascista, sino como una entidad ligada a la administración. Los demás partidos políticos no fueron del todo disueltos, aunque muchos de ellos desaparecieron. La Unión Patriótica generó un nuevo caciquismo.
4º. La represión contra el catalanismo. En un principio parecía que el golpe de Primo de Rivera podía compartir algunos objetivos con los sectores moderados del catalanismo, básicamente la voluntad regeneracionista. En realidad, el gobierno de Primo de Rivera adoptó una política centralista y anticatalanista: se prohibió la utilización pública del catalán, se persiguieron las instituciones culturales catalanas y manifestaciones culturales como los juegos florales, y se suprimió la Mancomunidad de Cataluña (1925). Esta política provocó una radicalización del catalanismo, dentro del cual un sector independentista -encabezado por Estado Catalán y Macià- adoptó la vía insurreccional.
5º. El orden público. El nuevo régimen se propuso restablecer el orden público, cuyo deterioro había sido uno de los principales motivos del golpe de Estado. El nombramiento de militares como gobernadores civiles y la implantación del estado de guerra permitieron romper rápidamente con la ola de atentados, huelgas y protestas obreras que había caracterizado los últimos tiempos de la Restauración en Barcelona. La represión se centró básicamente en la CNT y el PCE.
6º. El problema de Marruecos y la política exterior. Uno de los principales éxitos de la Dictadura de Primo de Rivera fue el dominio de la situación en Marruecos, dado que la desastrosa guerra tenía repercusiones negativas en casi todos los aspectos de la vida política. Antes de 1923, Primo de Rivera era partidario del abandono del Protectorado, pero cuando llegó al poder se vio obligado a cambiar de posición. En 1924-25, Abd-el-Krim lanzó una nueva ofensiva que provocó una nueva derrota española, pero cometió el error de atacar también el territorio con protección francesa, esto facilitó la colaboración entre Francia y España que se concretó en el desembarco de Alhucemas (septiembre de 1925) que tuvo resultados inmediatos. En 1926, Abd-el-Krim se rindió. Desde 1927, Marruecos dejó de ser un problema para los gobernantes españoles. Por otra parte, Primo de Rivera interrumpió las investigaciones por el desastre de Annual (expediente Picasso).
El Directorio Civil (diciembre 1925 – enero 1930)
Los éxitos de la Dictadura, sobre todo en la cuestión de Marruecos, motivaron a Primo de Rivera a preparar una alargación del régimen, que hasta entonces había sido presentado como una solución provisional al problema del orden público.
En diciembre de 1925, el directorio militar fue sustituido por un directorio civil. En 1926 celebró un plebiscito para demostrar el apoyo popular con que contaba. En 1927 convocó una Asamblea Nacional Consultiva, integrada por miembros designados por el gobierno o que representaban a corporaciones del Estado (ayuntamientos, diputaciones provinciales, cámaras de comercio, colegios profesionales, etc.). La principal función de esta asamblea fue la elaboración de una nueva constitución. De carácter autoritario, el proyecto de constitución limitaba los derechos individuales, establecía una única cámara parlamentaria integrada por diputados elegidos por sufragio universal, de elección corporativa, y de designación real, y otorgaba amplias atribuciones a la Corona. Esta última circunstancia no gustó al dictador y fue una de las causas del fracaso del proyecto.
La Política Económica y Social
La Dictadura de Primo de Rivera basó su propaganda en sus éxitos económicos. Hay que tener en cuenta, de todos modos, que estos se vieron favorecidos por una coyuntura internacional muy expansiva (los «felices años veinte»). Los rasgos característicos de la política económica del régimen son:
- Intervencionismo estatal. Mediante la intervención del Estado en la economía y el aumento del gasto público se quiso impulsar la producción y la modernización de las infraestructuras. Se crearon monopolios estatales como CAMPSA. Además, se reafirmó el proteccionismo.
- Promoción de la industria, que era regulada por un Consejo de Economía Nacional.
- Realización de numerosas obras públicas, como carreteras y obras hidráulicas.
- La política financiera fue muy deficiente, se basó en la emisión de deuda pública y rechazó la adopción de reformas fiscales que hubieran permitido hacer frente al importante aumento de los gastos estatales. Por este motivo, se incrementó el déficit fiscal.
- En cuanto a la política fiscal, el régimen adoptó algunas reformas sociales de carácter paternalista, se promulgó un código de trabajo (1926), se aprobaron seguros para la maternidad y subsidios para las familias numerosas.
La Oposición al Régimen
Fue escasa en un principio, pero paralelamente a la institucionalización del régimen hubo un aumento de las fuerzas que luchaban contra la dictadura, teniendo en cuenta que el régimen se presentó inicialmente como una solución temporal y que la represión que practicó contra los opositores fue muy moderada; los partidos políticos no fueron prohibidos e, incluso, la censura de prensa era relativamente suave. Entre los principales sectores de oposición podemos distinguir:
El movimiento obrero
En un principio no representó un problema grave para Primo de Rivera. La sensación de autoridad, el cansancio por un largo periodo de luchas sociales, la mejora de la situación económica y la habilidad del dictador para dividir el sindicalismo son factores que explican la escasa conflictividad social vivida en estos años: el número de huelgas se redujo drásticamente y los atentados casi desaparecieron. Entre la actitud de izquierdas, anarcosindicalistas y comunistas. La UGT y el PSOE por parte del dictador, que intentó conseguir su apoyo, lo que provocó una división interna dentro del movimiento socialista entre los partidarios de colaborar con el régimen (Besteiro, Largo Caballero) y los que se oponían (Prieto, Fernando de los Ríos). Esta colaboración existió hasta el final de la dictadura. La CNT fue objeto de una mayor presión por parte del régimen. El PCE, finalmente, desapareció prácticamente.
Los republicanos
Inicialmente tuvieron una actividad muy reducida. En 1926 se creó la Alianza Republicana, que integraba varios grupos como el Partido Radical (Lerroux) y los Grupos de Acción Republicana (Manuel Azaña).
Los nacionalistas catalanes radicales
Representados por el grupo independentista Estado Catalán (dirigido por Francesc Macià), reaccionaron a la política anticatalana de Primo de Rivera con acciones armadas, como un intento de atentado contra el rey (complot de Garraf, 1925) y un proyecto de invasión de Cataluña desde Francia (Prats de Molló, 1926).
Una parte del ejército
La gran mayoría de militares apoyaron al régimen, pero un pequeño sector manifestó disensiones por razones personales, políticas o profesionales. En junio de 1926 tuvo lugar una conspiración encabezada por el general mallorquín Valeriano Weyler, que fracasó («Sanjuanada»).
Los intelectuales y los estudiantes
Los intelectuales, aunque eran un grupo pequeño, tenían una cierta influencia social. Si en un principio mantuvieron una actitud de expectación ante la dictadura, pronto se distanciaron. Unamuno, desde 1924, se convirtió en un símbolo de la protesta. Los estudiantes se movilizaron contra el régimen a partir de 1929, en protesta por una ley de reforma universitaria.
El Final de la Dictadura (1930-31)
Desde la segunda mitad de 1928 se hizo evidente el agotamiento de la Dictadura y, sobre todo, su incapacidad para diseñar un nuevo sistema político, lo que determinó una pérdida creciente de popularidad. Finalmente, en enero de 1930, Primo de Rivera presentó la dimisión al rey y se exilió en París, donde murió al poco. Entre enero de 1930 y abril de 1931 se extendió dirigido por los gobiernos del general Berenguer y el almirante Aznar.
El gobierno del general Dámaso Berenguer (enero 1930 – febrero 1931)
Intentó volver a la normalidad constitucional de 1876 e inició una liberalización de la vida política. Pronto se vio que era muy difícil volver al sistema de la Restauración, que estaba bastante desprestigiado. El republicanismo se convirtió en la alternativa principal al fracaso de la monarquía alfonsina. En agosto de 1930 fue firmado el Pacto de San Sebastián, mediante el que varios grupos republicanos formaron un comité revolucionario presidido por Alcalá Zamora que prepararía el cambio de régimen mediante un alzamiento militar con apoyo civil. Este pacto fue firmado también por varios grupos catalanistas, porque contemplaba la necesidad de dar una solución a la cuestión nacional catalana (reconocimiento del derecho de Cataluña a la autonomía). Dos meses más tarde, el PSOE y la UGT se incorporaron al Pacto. En diciembre de 1930 hubo un levantamiento republicano, que fracasó por completo. En Jaca (Aragón) los capitanes Fermín Galán y García Hernández fueron fusilados y en Madrid los dirigentes republicanos fueron detenidos.
El gobierno del almirante Aznar (febrero a abril 1931)
Convocó elecciones municipales para el 12 de abril de 1931. A pesar de que teóricamente en estas elecciones únicamente se decidían los alcaldes y concejales de los municipios, los grupos republicanos las plantearon como si fueran un plebiscito para decidir la forma de Estado (Monarquía o República). Los resultados electorales fueron favorables a los monárquicos (que obtuvieron unos 22.000 concejales frente a unos 8.000 republicanos), pero en las principales ciudades del país ganaron claramente los republicanos. Dado que el caciquismo imperante en las zonas rurales determinaba que los resultados no se consideraran representativos de la auténtica voluntad popular, los resultados fueron valorados como un éxito de los republicanos. El 13 de abril, amplios sectores de la población se lanzaron a la calle para celebrar la victoria republicana y exigieron la proclamación de la República. Como consecuencia, el rey abdicó y el 14 de abril fue proclamada la Segunda República.
La Segunda República (1931-36)
El Bienio Reformista (1931-33)
La proclamación de la República
- Las elecciones municipales de abril de 1931 se presentaron como un plebiscito entre monarquía o república.
- La coalición republicano-socialista triunfó en las grandes capitales y en las regiones industriales.
- El resultado evidenciaba un rechazo a la monarquía y un deseo de cambio político. Miles de ciudadanos salieron a la calle para pedir la proclamación de la República.
- Ante la nueva situación, el rey Alfonso XIII suspendió la potestad real y abandonó el país hacia el exilio. El 14 de abril de 1931 se proclamó la República.
El gobierno provisional
- Inmediatamente se formó un gobierno provisional, integrado por republicanos, socialistas y catalanistas de izquierda, que tuvo el poder entre abril y junio de 1931.
- En este tiempo, este gobierno inició las primeras reformas. Entre sus acciones, destacan:
- Una amnistía política para los presos políticos y libertad de partidos y sindicatos.
- Unas leyes sociales para mejorar la situación de los jornaleros.
- El establecimiento de una Generalidad provisional de Cataluña.
- La convocatoria de elecciones a Cortes Constituyentes.
La Constitución de 1931
- Los principios de la nueva Constitución fueron:
- Consolidación de la democracia: se reconocía el sufragio universal masculino y femenino y se establecía la división de poderes. El poder legislativo residía en las Cortes, el poder ejecutivo, en el Consejo de Ministros y en el Presidente de la República.
- Reconocimiento de algunos gobiernos autónomos. El Estado se configuraba de forma integral, pero se aceptaba la posibilidad de constituir gobiernos autónomos en algunas regiones.
- Aconfesionalidad del Estado. Se proclama la separación de la Iglesia y el Estado.
- Derechos individuales y amplias libertades públicas y privadas.
- Una vez aprobada la Constitución, Niceto Alcalá Zamora fue elegido presidente de la República.
El Bienio Reformista
Las reformas republicanas:
- El nuevo gobierno se impuso modernizar el país en un sentido democrático, laico y descentralizado:
- Reforma militar: Azaña inició la reforma del ejército, elaborando una ley de retiros que posibilitó la jubilación de la mitad de los oficiales; se sometió el ejército al poder civil; y se sustituyeron los mandos considerados contrarios a la República.
- Reforma religiosa y educativa: se intentó disminuir la influencia de la Iglesia y se promovió una educación pública laica.
- Reforma territorial: se inició la descentralización del Estado abriendo diversos procesos autonómicos, ofreciendo la posibilidad de elaborar estatutos de autonomía y crear gobiernos autónomos.
D) – Reforma agraria: se intentó poner fin al problema del latifundismo y del paro de los jornaleros, e incrementar la capacidad adquisitiva de los campesinos.
La oposición a las reformas
- Pero estas reformas no satisficieron a casi nadie: los sectores conservadores se opusieron y los sectores obreristas y campesinos se radicalizaron ante la lentitud de algunos cambios.
- Por un lado, el reformismo republicano se encontró con la oposición de los grandes propietarios agrarios, la jerarquía de la Iglesia católica, una parte del ejército y sectores de las clases altas y medias.
- En 1932, un golpe de Estado dirigido por el general Sanjurjo, fue frenado por el gobierno.
- Las fuerzas de la derecha se reagruparon en la Confederación Española de Derechas Autónomas.
- Surgió un grupo de carácter fascista, la Falange Española.
- Los monárquicos y los carlistas se unieron a la oposición.
- Desde el obrerismo, la UGT se radicalizó y un grupo de anarquistas apostaron por la *insurgencia armada. Hubo levantamientos (como el de Casas Viejas, 1933). El gobierno reformista entró en crisis por culpa de la represión de Casas Viejas. Azaña presentó su dimisión y el presidente de la República, Alcalá Zamora, disolvió las Cortes y convocó nuevas elecciones para noviembre de 1933. Las elecciones fueron ganadas por los partidos de derecha y de centro, y Alejandro Lerroux, del Partido Radical, fue elegido presidente con el apoyo parlamentario de la CEDA. El nuevo gobierno inició un proceso de desmantelamiento de la obra reformista del bienio anterior, lo que provocó una radicalización mayor de las izquierdas.
El Bienio Conservador
- El gobierno reformista entró en crisis por culpa de la represión de Casas Viejas. Azaña presentó su dimisión y el presidente de la República, Alcalá Zamora, disolvió las Cortes y convocó nuevas elecciones para noviembre de 1933.
- Las elecciones fueron ganadas por los partidos de derecha y de centro, y Alejandro Lerroux, del Partido Radical, fue elegido presidente con el apoyo parlamentario de la CEDA.
- El nuevo gobierno inició un proceso de desmantelamiento de la obra reformista del bienio anterior, lo que provocó una radicalización mayor de las izquierdas.
Las revueltas de 1934
- En 1934 hubo una remodelación del gobierno, que dio entrada a 3 ministros de la CEDA. Esto encendió el estallido de revueltas en todo el país, especialmente en Asturias y Cataluña, que fueron duramente reprimidas.
- En Asturias, la revolución tuvo un carácter más social.
- En Cataluña, fue el presidente Lluís Companys quien encabezó la insurrección, proclamando el Estado Catalán dentro de la República Española. La rebelión fue sofocada.
- Las desavenencias entre los partidos de la coalición gubernamental (Partido Radical y CEDA) y los escándalos de corrupción en el gobierno llevaron a la convocatoria de nuevas elecciones en febrero de 1936.
- Las fuerzas de centro-izquierda se agruparon en el Frente Popular.
- La derecha acudió dividida entre el Bloque Nacional, la CEDA y Falange Española. Su programa pretendía modificar la Constitución en un sentido conservador.
- Ganó las elecciones el Frente Popular. Manuel Azaña fue nombrado nuevo presidente de la República.
Frente Popular (febrero-julio 1936)
06 de febrero 1936 elecciones generales = triunfo Frente Popular (izquierdas 257 escaños, centro 57 escaños y derecha 139 escaños)
Azaña formó un nuevo Gobierno compuesto por republicanos y con el apoyo parlamentario de socialistas y comunistas
Manuel Azaña nuevo Presidente de la República y Jefe de Gobierno al gallego Casares Quiroga
Reanudación de la política reformista del Bienio 1931-33
- reforma agraria
- estatuto de autonomía del País Vasco y para Galicia
- política de alejamiento de los militares sospechosos de «pocas simpatías» republicanas, como Mola (en Navarra), Goded (a Baleares) o Franco (Canarias).
En febrero de 1936 se iniciaba la trama conspirativa dentro del Ejército, que preparaba un golpe de Estado favorecido por el clima de tensión social y violencia política cotidiana.
Causas de la Guerra Civil española:
- Problemas estructurales
- Deficiente industrialización y retraso económico.
- Desigual distribución de la tierra y limitación de la reforma agraria.
- acentuada desigualdades sociales.
- Analfabetismo y déficit de madurez política democrática.
- Falta de encaje de Cataluña y el País Vasco al Estado.
- Tradicional intervencionismo militar.
- Contexto internacional desfavorable
- Gran Depresión (1929 y década de 1930) Paro, conflictividad.
- Crisis de las democracias y avance de los fascismos.
- Radicalización de la vida política
- la derecha
- No aceptaron el programa reformista republicano.
- Actividad de los grupos fascistas: JONS, Falange y carlistas
- Oposición de la iglesia a la secularización republicana.
- Conspiraciones militares: UME, Sanjurjo, Mola.
- La izquierda
- búsqueda acelerar las actuaciones sociales y económicas.
- Enfrentamientos al PSOE: Largo Caballero y E. Prieto.
- La CNT adoptó una estrategia revolucionaria
- la derecha
- Alteración del orden público y de la legalidad
- Golpe de estado fracasado de Sanjurjo (Agosto de 1932)
- Revolución de octubre de 1934.
- Ocupaciones de tierras, enfrentamientos en la calle, atentados crecientes 1936
- Conspiraciones militares y de la derecha.
- Percepción por parte de la derecha de una inminente revolución obrera.
- Asesinatos del teniente de Castilla de José Calvo Sotelo («Bloque Nacional»)
Constitución de 1931
Este texto fue escrito en 1931 al principio de la Segunda República Española. Al final de la dictadura de Primo de Rivera estaba el gobierno del almirante Aznar que convocó elecciones el 12 de abril de 1931 que fueron consideradas como plebiscito entre monarquía o república. La coalición republicana socialista ganó en las grandes capitales y en las regiones industriales lo que evidenció el rechazo a la monarquía y un deseo de cambio político. Los ciudadanos salieron a la calle para pedir la proclamación de la república. Durante esta situación el Rey Alfonso XIII abdicó y abandonó el país hacia el exilio. El 14 de abril de 1931 se proclamó la república.
Rápidamente se formó un gobierno provisional integrado por republicanos, socialistas y catalanistas de izquierda, que tuvo poder entre abril y junio de 1931. Ese tiempo, este gobierno inició las primeras reformas de las que destacan: una amnistía política para los presos políticos y libertad de partidos y sindicatos, unas leyes sociales para mejorar la situación de los jornaleros, el establecimiento de una generalidad provisional en Cataluña y la convocatoria de elecciones a cortes constituyentes. Las Cortes comenzaron a trabajar en una nueva constitución, la constitución de 1931 que tenía como objetivo consolidar la democracia, sus características son: el reconocimiento del sufragio universal masculino y femenino como aparece el texto «Art. 52. El Congreso de los Diputados se compone de los Representantes Elegidos por sufragio universal, igual, directo y secreto.» Establecía la división de poderes, el poder legislativo residía en las Cortes y el Ejecutivo en el Consejo de ministros y en el presidente de la república como sale el texto «Art. 51. La potestad legislativa Reside en el pueblo, que la ejerce miedo medio de las Cortes o el Congreso de los Diputados»//// Se reconocen algunos gobiernos, el Estado se configuraba de forma integral, pero se aceptaba la posibilidad de constituir gobiernos autónomos en algunas regiones como dice el texto «La República constituye un Estado integral, compatible con la autonomía de los Municipios y las Regiones. se proclamó la separación de la Iglesia y el Estado como sale el texto «Art. 3. EI Estado No tiene religión oficial», Se declararon derechos individuales y amplias libertades públicas y privadas como. También garantía la educación y la no discriminación por razones de sexo, origen O Tiquesa, Una vez aprobada la constitución, Niceto Alcalá Zamora (socialista) fue elegido presidente de la república y Azaña
Discurso de Clara Campoamor sobre el Sufragio Femenino
Este texto fue escrito en 1931 al principio de la Segunda República Española. El gobierno de Almirall Aznar al final de la dictadura de Primo de Rivera convocó elecciones municipales del 12 de abril de 1931 que fueron ganadas por la coalición republicana socialista, esto llevó a la abdicación del Rey Alfonso XIII y la proclamación de la república el 14 de abril.
Parcialmente se instauró un gobierno provisional formado por republicanos socialistas y catalanistas de izquierdas que llevó teme primeras reformas como una amnistía para los presos políticos y libertad de partidos y sindicatos, unas leyes sociales, el establecimiento de una generalidad de Cataluña y la convocatoria de elecciones a Cortes constituyentes. También se aprobó una nueva constitución, la de 1931 que tenía como principal objetivo consolidar la democracia, reconoce el sufragio universal femenino y masculino y establecía la de división de poderes. También destacan algunos gobiernos autónomos así como la confesionalidad del Estado, se declararon derechos individuales y amplias libertades públicas y privadas. Durante la Segunda República el movimiento feminista logró movilizar una minoría de mujeres defensoras de la no discriminación por razón de sexo. La constitución establece la igualdad entre sexos, aunque la aprobación del derecho de sufragio femenino enfrentó a las únicas diputadas presentes en ese momento en las Cortes: Clara Campoamor, Victoria Kent Margarita Nelken. Campoamor era partidaria del voto de las mujeres, mientras que las otras dos, argumentaban que sería un error implantarlo, por la influencia de la Iglesia entre la mayoría de las mujeres y su escaso nivel de instrucción beneficiarán los sectores más reaccionarios. Al final se impuso la idea de que no era una cuestión de oportunidad. sino de justicia elemental y las mujeres pudieron votar por primera vez España en las elecciones de 1933. En el texto defiende la opinión de Clara Campoamor con el segmento «Yo no creo, no puedo creer, que la mujer sea un peligro para la República, Porque yo he visto a la mujer reaccionar frente a la Dictadura y con la República [.J «Se empezó a involucrar a la mujer a la educación reduciendo radicalmente el analfabetismo femenino, Se establecieron medidas como acceso de hombres y mujeres a sitios oficiales, la implantación del matrimonio civil .. aunque aún hubo situaciones discriminantes.
Abdicación de Alfonso XIII (14 de abril de 1931)
La crisis económica mundial iniciada en 1929 alcanzó también a España, donde ocasionó un rápido incremento del desempleo y un creciente descontento social. Ante la nueva coyuntura, la dictadura fue perdiendo paulatinamente sus inicios. La situación política, económica Y de apoyos social volvía a ser grave y se percibía que su previsible empeoramiento podría suponer no solo el fin de la dictadura, sino también de la monarquía.
El 27 de enero de 1930, Primo de Rivera, gravemente enfermo, presentó su dimisión a Alfonso XIII, que la aceptó. Así el 14 de abril de 1931 declara su abdicación explicando que después de unas elecciones hechas los españoles demostraron que ya no lo querían como rey, pero que él desde la sombra seguirá muy pendiente de España (primer párrafo). Dos meses después, el dictador falleció en su exilio en París. Alfonso XIII trató de volver al régimen constitucional existente hasta 1923, y un tal fin nombró jefe de Gobierno al general Berenguer, inaugurando la llamada «dictablanda».
La oposición republicana se movilizó rápidamente, y en agosto de 1930 estableció el Pacto de San Sebastián, un acuerdo para poner fin a la monarquía, al que se unieron los socialistas y algunos intelectuales como Fernando de los Ríos, Ortega y Gasset y Gregorio Marañón. También se creó un Comité Revolucionario presidido por Niceto Alcalá Zamora, se preparó una huelga general (que no llegó a realizar) y un pronunciamiento militar (que casó) para forzar la proclamación de la república. En febrero de 1931, el almirante Aznar formó un nuevo gobierno. Como parte de la estrategia para volver al sistema parlamentario y constitucional, se convocaron elecciones municipales para el 12 de abril de 1931. Estos comicios se convirtieron en un plebiscito sobre la monarquía y fueron ganados por las candidaturas republicanas. El 14 de abril de 1931 era proclamada la Segunda República Española y el Comité Revolucionario, presidido por Niceto Alcalá Zamora, se convirtió en Gobierno provisional. Ese mismo día, el rey abandonó España camino del exilio.
El fin de la monarquía no fue el resultado de la revolución, sino del deterioro del propio sistema político, iniciado con la crisis del 98, progresivamente debilitado durante las crisis posteriores (1909, 1917 y 1923) y definitivamente desprestigiado durante la dictadura militar. El colapso de 1931 fue el resultado de una larga crisis institucional que los gobiernos de la monarquía fueron incapaces de resolver y Que acabó primero con el sistema constitucional de la Restauración y, finalmente, con la propia monarquía restaurada.
Asamblea Nacional
Con la finalidad de institucionalizar el nuevo régimen y diseñar su forma de gobierno, en 1927 se convocó una Asamblea Nacional Consultiva. Se trataba de un organismo corporativo, compuesto por representantes de las corporaciones elegidos por sufragio indirecto, por funcionarios de la Administración y por representantes sociales escogidos desde el poder. El sufragio universal quedó relegado al olvido y dos tercios de sus 400 miembros fueron nombrados directamente por el Gobierno (líneas 1-6).
Su función fue meramente consultiva y siempre actuó bajo control gubernamental.
La Asamblea debía encargarse de elaborar un Estatuto Fundamental de la Monarquía a modo de Constitución. El proyecto, que se presentó a la Asamblea en 1929, establecía un régimen autoritario en el que el poder legislativo radicaría en las Cortes y en el monarca (la mitad de la cámara era electiva y la otra mitad designada por el monarca). La mala acogida que tuvo el proyecto entre la opinión pública hizo que no llegase nunca a ser aprobado.
Para frenar la conflictividad laboral y controlar el movimiento obrero, en 1926 se fundó el Consejo de Trabajo u Organización Corporativa Nacional. Se trataba de un sindicato de tipo vertical que incluye la representación de obreros y empresarios en los llamados Comités paritarios. Su misión era la reglamentación de los salarios y las condiciones de trabajo, así como la negociación entre patronos y trabajadores, aunque siempre bajo el control del Estado.
El sindicato socialista UGT colaboró en un principio con el nuevo sindicalismo, lo que creó tensiones internas en el socialismo, pero se retiró más tarde. La CNT se negó a participar y muchos anarcosindicalistas fueron perseguidos, detenidos o tuvieron que marchar al exilio.
LEY DE BASES DE LA REFORMA AGRARIA (bienio reformista)
Este texto fue escrito en 1932 durante la II República Española. Las elecciones de 1931 se presentaron como plebiscito entre monarquía y república, él coalición republicana socialista triunfó, por eso era evidente el rechazo a la monarquía. Ante esta situación el Rey Alfonso 18 ya abdica y el 14 de abril de 1931 se programó la república. Primero se instauró un gobierno provisional formado por republicanos, socialistas y catalanistas que llevaron a cabo primeras reformas como una amnistía político, unas leyes sociales y una convocatoria de cortes constituyentes. // Se redactó una nueva constitución la del 31 con el objetivo de consolidar la democracia: reconoce el sufragio masculino y femenino y establecía la división de poderes, reconoce algunos gobiernos autónomos, Prodamer aconfesionalidad del Estado y declara derechos individuales y amplias libertades públicas y privadas, Cuando Niceto Alcalá-Zamora fue elegido presidente de la república. Durante el 1931 y el 1933 tuvo lugar el bienio progresista protagonizado por el gobierno de izquierdas de Manuel Azaña que llevó cabo una política de reformas. Estas reformas se centran en cuatro ejes principales. Por un lado se llevó cabo una reforma militar elaborando una ley de retiros que posibilitó la jubilación de la mitad de los oficiales, se sometió el ejército al poder civil y se sustituyeron los mandos considerados contrarios a También de n fue aprobada la constitución, a república. religiosa y educativo, se intentó disminuir la influencia hay y hubo una reforma a la Iglesia y se promovió una educación pública laica, también se llevó teme una reforma territorial con una descentralización del Estado. Y por último una reforma agraria muy necesaria como los intentos de desamortización de Mendizábal (1836) y Madoz (1855) donde intentaban poner fin el problema de latifundios y del paro de los Jomaleros, es decir Y su objetivo era crear una clase media rural. La Ley permite hacer la expropiación sin tener que indemnizar las tierras de una parte de la nobleza mientras que las que les estaban cultivadas de una manera deficiente se pueden expropiar indemnizando los propiedad como sale el texto «serán susceptibles de Explotación las tierras incluidas (…) apartados 1 «(..), 5 ° (..), 7 * (..) la aplicación de esta ley se encargó al instituto de la reforma agraria pero debido a las complejidades legales y burocráticas se convirtió en una gran decepción la reforma por parte del campesinado ya que las expectativas se alejan. La ley destaca también por la oposición radical de los grandes propietarios agrícolas que se convirtieron en grandes enemigos de la República
Golpe de estado Primo de Rivera El sistema constitucional y parlamentario iniciado con la restauración monárquica de 1874 finalizó en 1923 con un golpe de estado militar que estableció una dictadura. para justificar el golpe era que el régimen constitucional estaba desprestigiado y que existía un grave peligro de revolución. Entre 1923 y 1930 tiene lugar la 2ª etapa del reinado de Alfonso XIII, marcado por la sustitución del sistema de Restauración, por una dictadura militar encabezada por el general Miguel Primo de Rivera.// En abril de 1923, un gobierno liberal presidido por Garcia Prieto pretendió llevar a cabo una reforma de la Constitución y de la ley electoral, incluida una mayor democratización del sistema, la reducción de la influencia de la Iglesia, la limitación de poderes del rey y un nuevo marco de relaciones laborales. A pesar de contar con una clara mayoría en las Cortes, el proyecto se vio obstaculizado por la oposición del rey, del ejército y de la Iglesia.// Entre los militares existía un gran descontento por las responsabilidades que el Expediente Picasso exigía ante el desastre militar de Annual. Para frenar las reformas impulsadas por el gobierno liberal e impedir el debate del Expediente en las Cortes, el capitán general de Cataluña, Miguel Primo de Rivera, impulsó un golpe de Estado militar el 13 de septiembre de 1923. El rey se negó a destituir a los militares sublevados y el Gobierno dimitió.// Primo de Rivera justificó su actuación en un manifiesto dirigido a la nación, en el que culpaba de desgobierno a los políticos y partidos tradicionales y declaraba su intención de regenerar la política nacional, acabar con el caciquismo y la corrupción, recuperar el orden público, poner fin a la conflictividad obrera y garantizar la unidad nacional ante el auge de los nacionalismos (…Para esto, y cuando el ejército haya cumplido las órdenes recibidas…). La alta burguesía, una parte de las clases medias y del ejército, y el rey y su entorno político aceptaron la dictadura como una solución a la crisis.// La mayoría de la población reaccionó con indiferencia o fue favorable al golpe de Estado. Se esperaba que el nuevo régimen tuviera un carácter temporal y pusiera fin a un sistema que se había demostrado incapaz de resolver los problemas del país. Por ello, la dictadura apenas contó con una oposición política y social, salvo un fallido intento de huelga general convocada por la CNT.