Desarrollo de la Segunda República Española
Con la proclamación de la Segunda República española, se inicia un intenso período político en la Historia de España, dividido en tres etapas: Bienio Social-Azañista, Bienio Radical-Cedista, y Gobierno del Frente Popular (y posterior Guerra Civil).
El comienzo de la Segunda República fue organizado por un Gobierno provisional, presidido por Manuel Azaña, con ministros de partidos políticos republicanos. Se encontraron sin un programa político definido, ya que no esperaban el triunfo. Su principal objetivo era dar legalidad al régimen y mantener la convocatoria de Cortes Generales, que serían constituyentes. Se negoció con algunos monárquicos la Jefatura del Estado, que fue aceptada por el conservador Niceto Alcalá Zamora. Los monárquicos, al igual que gran parte del pueblo, no comprendían lo sucedido. Convocaron una reunión para el 10 de mayo en la sede del periódico ABC de Madrid. Simultáneamente, el Partido Comunista de España (PCE) fue legalizado y se promulgó una amnistía general, que incluyó a Abd-El Krim.
Los comunistas boicotearon a los monárquicos, incendiando el periódico. A continuación, se quemaron la mayoría de los conventos, iglesias y colegios privados de Madrid. Al día siguiente, ocurrió lo mismo en ciudades de Andalucía y del Levante, como Murcia, donde se exigía la repatriación del rey para ser ajusticiado. Hubo numerosos heridos; los monárquicos fueron arrestados y retiraron muchas de sus candidaturas a las elecciones. El representante del Vaticano, el nuncio, fue expulsado de España. Para apaciguar a la extrema izquierda, el Gobierno aprobó la Ley de Defensa de la República, que establecía penas de cárcel para quienes se opusieran abiertamente a ella.
Partidos Políticos en 1931
PARTIDOS EXISTENTES EN 1931 | ||
Partido | Dirigente | |
Republicanos | Partido Radical | Lerroux (centro) |
Izquierda Republicana | Azaña | |
ERC | Maciá | |
PSOE | Largo Caballero | |
PCE | Pedro Matorell | |
Monárquicos | Conservadores | |
Liberales | ||
Unión Patriótica |
En el verano de 1931, se celebraron elecciones generales. Los socialistas y la izquierda republicana obtuvieron la mayoría (los monárquicos se abstuvieron en gran medida). Por lo tanto, las Cortes quedaron controladas por una ideología de izquierdas. Para legalizar su llegada al poder, se elaboró una nueva constitución: la Constitución de 1931.
Características de la Constitución de 1931
- España se define como una República de trabajadores de todas clases. Esta denominación, propia del marxismo, implica una división social en clases y presupone que todos son obreros y trabajadores. El nuevo orden social se basa en el tipo de trabajo, no en la riqueza, buscando la igualdad social.
- El Estado se declara aconfesional. Se prohíbe a las personas dedicadas a la vida religiosa trabajar en el comercio o la enseñanza.
- El Parlamento es unicameral y posee el poder legislativo, además del control del Ejecutivo.
- El poder ejecutivo reside en un Consejo de Ministros, dirigido por un presidente de gobierno elegido por el presidente de la República.
- El poder judicial recae en un Tribunal Superior de Justicia (el actual Tribunal Supremo).
- Se establece el sufragio universal para mayores de 23 años.
- Se reconocen todas las lenguas habladas en España como oficiales.
- España se configura como un Estado integral, que puede estar formado por distintas naciones o nacionalidades, organizadas en Regiones Autónomas con Estatutos propios.
El nuevo gobierno estaba presidido por Niceto Alcalá Zamora, quien asumió la Presidencia de la República por un período de seis años. La presidencia del Gobierno fue ocupada por Manuel Azaña, quien impulsó una serie de reformas para implementar los principios de la Constitución.
Reforma del Ejército
Se buscaba someter el poder militar al poder civil. Para ello, se implementaron leyes y cambios significativos: se suprimió la Academia Militar de Zaragoza; se eliminaron los ascensos por méritos de guerra, con carácter retroactivo; se ofreció la jubilación a los oficiales de más de 45 años, pasando al servicio activo; se separaron los diferentes cuerpos, que pasaron a depender del Ministro de Defensa y no del Presidente de la República (quien solo los coordinaba).
Separación de la Iglesia y el Estado
Para que el Estado dejara de proteger a la religión, era necesario que asumiera los servicios públicos que esta ofrecía, relacionados con la enseñanza y la vida civil.
- Ley de Educación: El Estado debía construir escuelas, institutos de bachillerato y universidades. Se creó un Cuerpo Especial de Maestros y un Servicio de Bibliotecas ambulantes con representaciones teatrales (misiones pedagógicas), siendo la más famosa «La Barraca» de Lorca.
- Creación de los Juzgados de Paz: Para la celebración de matrimonios civiles, divorcios, nacimientos, registro de población y defunciones.
- Se prohibieron los cementerios privados y religiosos. Las ceremonias de entierro pasaron a ser responsabilidad de personas civiles (el enterrador o sepulturero).
- Ley de Actos Públicos religiosos: Las procesiones y otros actos religiosos (como el Ramadán) quedaron delegados a los ayuntamientos.
Se mantuvo a los religiosos en los servicios sanitarios y se establecieron acuerdos con la Cruz Roja y congregaciones religiosas para ampliar la cobertura sanitaria a la población.
Reforma Agraria
Según el historiador Tuñón de Lara, de orientación marxista, esta fue la reforma más ambiciosa del Gobierno. Se buscaba solucionar el problema del desempleo en el ámbito rural. Se realizó un estudio económico exhaustivo de la situación agrícola de España, similar al realizado doscientos años antes por Carlos III. Las desamortizaciones habían tenido consecuencias económicas desastrosas para los jornaleros, que sufrían hambre y frío. Se constató que mientras un obrero ganaba 4 pesetas al día, el campesino ganaba solo una. El Gobierno elaboró la ley denominada Bases de la Reforma Agraria de 1932.
Puntos Clave de la Reforma Agraria
- Se expropiaban todas las tierras aptas para el cultivo que no fueran productivas. Esto implicaba la desaparición de los cotos de caza, los campos de ganaderos y las fincas de veraneo.
- Se prohibía contratar jornaleros de otros pueblos o países, que competían con los trabajadores españoles. Por ejemplo, Portugal enviaba numerosos emigrantes a la vendimia, con salarios inferiores a los españoles.
- Se creó un Instituto de Reforma Agraria encargado de: planificar zonas productivas; gestionar y otorgar créditos agrícolas; registrar a los campesinos que solicitaban trabajo (listas de empleo); facilitar la compra de tierras a bajo precio; y promover la creación de cooperativas agrícolas.
- Se preveían indemnizaciones para los propietarios expropiados, lo que ralentizó la aplicación de la ley.