El 2 de diciembre de 1982, Felipe González fue investido Presidente del Gobierno de España con una mayoría absoluta histórica. Este evento marcó un hito en la transición española hacia la democracia. El discurso de investidura de González, objeto de este análisis, delineó los principales puntos de su programa político y las transformaciones que impulsaría durante su mandato.
Contexto Histórico
La investidura de Felipe González se produjo en un momento crucial para España. Tras la muerte de Franco en 1975, el país se encontraba en pleno proceso de transición hacia la democracia. Las elecciones generales de 1982 dieron al PSOE una victoria aplastante, reflejando el deseo de cambio de la sociedad española.
El Discurso de Investidura
El discurso de Felipe González se centró en la consolidación de la democracia, la modernización del país y la integración de España en Europa. A continuación, se destacan los ejes principales:
Cumplimiento de la Constitución
González enfatizó el compromiso de su gobierno con el cumplimiento de la Constitución española de 1978, especialmente en la lucha contra el terrorismo y los intentos de desestabilización democrática.
Integración en la CEE
El discurso subrayó la importancia de la plena integración de España en la Comunidad Económica Europea (CEE), precursora de la Unión Europea. Se detallaron los esfuerzos para superar los obstáculos y lograr la adhesión en 1986.
Relaciones con Estados Unidos y la OTAN
González abordó la política exterior, incluyendo las relaciones con Estados Unidos y la permanencia de España en la OTAN, tras un referéndum celebrado en 1986.
Estado de las Autonomías
Se defendió el reconocimiento de las peculiaridades regionales dentro de la unidad de España, impulsando el desarrollo del Estado de las Autonomías.
Modernización del Ejército
González se comprometió a modernizar las Fuerzas Armadas y asegurar su papel en la defensa de la democracia, evitando los pronunciamientos militares del pasado.
Derechos Sociales y Económicos
Se destacó la importancia de garantizar los derechos sociales y económicos de los ciudadanos, como base para el pleno ejercicio de las libertades.
Canarias y la Autonomía
El discurso también tuvo implicaciones para Canarias. Tras la aprobación del Estatuto de Autonomía en 1982, se consolidaron las instituciones propias de la comunidad, como el Parlamento y los Cabildos Insulares.
Conclusión
El discurso de investidura de Felipe González en 1982 marcó el inicio de una etapa de profundas transformaciones en España. Su programa político, centrado en la consolidación democrática, la modernización y la integración europea, sentó las bases para el desarrollo del país en las décadas siguientes.