Guerra Civil Española: Evolución Política, Apoyo Internacional y Consecuencias

Evolución Política de Cada Bando

El Bando Republicano

Inestabilidad política al inicio de la guerra: Al estallar la guerra, el presidente del gobierno era Santiago Casares Quiroga, quien dimitió tras negarse a armar a las organizaciones obreras, siendo reemplazado por José Giral, quien sí permitió la distribución de armas. Sin embargo, la situación se caracterizó por un vacío de poder y el colapso del Estado republicano.

Gobierno de Largo Caballero (septiembre 1936): El socialista Largo Caballero asumió la jefatura del gobierno y formó un gobierno plural con republicanos, socialistas, comunistas, anarquistas y nacionalistas. Enfrentó la amenaza de la represión del enemigo y una creciente tensión interna, especialmente en Cataluña, donde se produjo el enfrentamiento violento en Barcelona en mayo de 1937 (Hechos de Mayo) entre las facciones de izquierda. Tras estos conflictos, Caballero fue reemplazado por Juan Negrín.

Gobierno de Juan Negrín (1937-1939): Negrín adoptó una postura firme de resistencia, buscando el apoyo de los comunistas, el grupo más disciplinado y vinculado a la URSS, la única potencia extranjera que apoyaba a la República. Su objetivo era internacionalizar el conflicto y resistir hasta conseguir el apoyo de potencias antifascistas. Sin embargo, la derrota en la Batalla del Ebro y los acuerdos en la Conferencia de Múnich (1938) debilitaron aún más su posición. La guerra terminó cuando el coronel Segismundo Casado lideró una sublevación interna contra el gobierno republicano. Madrid cayó el 28 de marzo de 1939, y el 1 de abril, Franco declaró el fin de la guerra.

El Bando Sublevado

Formación de la Junta de Defensa Nacional: Tras el fracaso inicial del golpe, se formó la Junta de Defensa Nacional, presidida por Miguel Cabanellas, con Franco, Queipo de Llano y Mola al mando de los distintos frentes. Aunque la Junta carecía de un proyecto político claro, consiguió establecer un gobierno que contó con el apoyo de monárquicos, carlistas y falangistas.

Consolidación del poder de Franco: El 1 de octubre de 1936, Franco fue nombrado Jefe de Estado y Generalísimo de los Ejércitos. Su prestigio creció tras la liberación del Alcázar de Toledo y el apoyo de Hitler y Mussolini. La Junta de Defensa pasó a ser la Junta Técnica del Estado, concentrando el poder en Franco, quien comenzó a unificar a las fuerzas políticas del bando sublevado, fusionando a los carlistas, monárquicos y falangistas en un solo partido: la Falange Española Tradicionalista y de las JONS (FET y de las JONS).

Gobierno de Franco (1938): En enero de 1938 se formó el primer gobierno sublevado con estructura ministerial, y Franco asumió la presidencia del gobierno. El nuevo gobierno fue altamente personalista y de inspiración fascista y católica. Uno de sus primeros actos fue la promulgación del Fuero del Trabajo, una ley similar a la fascista italiana, que buscaba regular las condiciones laborales bajo una perspectiva autoritaria y corporativista.

La Dimensión Internacional

En el conflicto, las potencias internacionales jugaron un papel clave, aunque de manera desigual. El bando republicano recibió apoyo de México y principalmente de la URSS, mientras que las potencias como Francia, Reino Unido y EE. UU. se mantuvieron neutrales, lo que favoreció a los sublevados. Por su parte, los sublevados obtuvieron crucial apoyo de Italia fascista y la Alemania nazi, sin el cual los historiadores consideran que la victoria de Franco habría sido difícil.

El Comité de No Intervención

Francia propuso la creación del «Comité de No Intervención» al inicio del conflicto con dos objetivos: evitar la internacionalización de la guerra y frenar la ayuda exterior a los sublevados. Este comité, formado por 27 países europeos y con sede en Londres, prohibió la venta de material militar a España. Sin embargo, países como Italia, Alemania y Portugal violaron el acuerdo y ayudaron a los sublevados, mientras que la URSS, a pesar de ser parte del comité, comenzó a suministrar material y apoyo militar desde octubre de 1936.

La Ayuda a la República y a los Sublevados

  • República: Recibió apoyo de México (armas antiguas, alimentos y apoyo diplomático) y la URSS (asesores y material militar). Además, la Internacional Comunista organizó la llegada de brigadistas internacionales, especialmente franceses, para apoyar a los republicanos en la defensa de Madrid.
  • Sublevados: Italia envió alrededor de 80,000 soldados, aviones y material de guerra, y Alemania envió 20,000 hombres y ayuda económica. Portugal también participó con 10,000 hombres, permitiendo a los sublevados cruzar su territorio. Además, el Vaticano apoyó a los sublevados, presentando la guerra como una «Cruzada religiosa».

La Sociedad de Naciones y el Papel de EE. UU.

La Sociedad de Naciones, encargada de resolver conflictos pacíficamente, demostró su inoperancia, sin aplicar sanciones contra Italia y Alemania por su intervención en la guerra. Estados Unidos, por su parte, veía la derrota de la República como un freno al comunismo, sin considerar una amenaza significativa en la expansión del fascismo, y permitió que empresas estadounidenses vendieran material a los sublevados.

Consecuencias de la Guerra Civil

  • Muertes Directas e Indirectas: La guerra dejó al menos medio millón de muertes, incluyendo combatientes y civiles. Unas 175,000 fueron bajas del ejército republicano, 110,000 del ejército sublevado y cerca de 100,000 muertes por hambre y enfermedades. La represión fue intensa en ambas zonas, especialmente por parte de los sublevados, donde se estima que la represión alcanzó hasta 100,000 víctimas.
  • Destrucción de Infraestructuras y Crisis Económica: La guerra destruyó infraestructuras esenciales como viviendas, industrias y edificios públicos. La crisis económica posterior a la guerra perduró, con los españoles perdiendo, en promedio, el 30% de su renta.
  • Establecimiento de la Dictadura y Aislamiento Internacional: Tras la victoria de los sublevados, Franco instauró una dictadura que duró hasta su muerte en 1975. España se aisló internacionalmente debido a su alineación con el fascismo, aunque durante la Guerra Fría, Franco fue considerado un aliado en la lucha contra el comunismo, lo que suavizó parcialmente su aislamiento.
  • Exilios: Muchos republicanos se exiliaron, principalmente a Francia y América Latina, especialmente a México y Argentina, debido a la represión. Se estima que entre 250,000 y 500,000 personas abandonaron el país.
  • Radicalización de la Sociedad: La guerra profundizó las divisiones entre izquierda y derecha en España, llevando a una continua radicalización y acusaciones mutuas que perduraron en la sociedad española, incluso dividiendo familias y comunidades.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *