Al-Ándalus: la conquista musulmana de la Península Ibérica. Emirato y califato de Córdoba
En el año 711, Tarik (al frente del ejército musulmán) entra en la Península como aliado de los visigodos y se enfrentan a don Rodrigo en la batalla de Guadalete, donde muere don Rodrigo. Los musulmanes conquistan la Península en un momento de declive económico a los visigodos, en el año 728 se concluye la conquista de la Península a base de pactos y la conquista está dividida en tres etapas:
Emirato dependiente de Damasco: (711-756) Está caracterizado por los conflictos entre bereberes y árabes por el reparto de tierras y de las funciones. Esto da lugar a que núcleos de cristianos organicen la Reconquista.
Emirato independiente de Bagdad: (756-929) Abderramán I es nombrado emir y se inicia una nueva organización política y administrativa. Los conflictos entre bereberes y árabes continúan, y a la vez se crean nuevos conflictos con los mozárabes por el impuesto especial que pagaban.
Califato independiente de Córdoba: (929-1031)
Abderramán I se proclama califa de Córdoba, esta es la etapa de mayor esplendor de Al-Ándalus. Almanzor asume todo el poder, pero al morir en el año 1002 empieza la caída del califato que en el año 1031 se rompe definitivamente. Almanzor realiza grandes conquistas, saqueos, etc… y todo en reinos castellanos.
Al-Ándalus: reinos de taifas. Reino nazarí
En el año 1031 el califato de Córdoba desaparece y surgen los reinos de taifas, con poderes locales. Muchas veces los reinos cristianos utilizaban a las taifas para esconderse y estas les hacían pagar unos parios a los cristianos. La primera taifa va del 1031 al 1085, a partir de aquí se pierde el equilibrio y Alfonso VI toma Toledo en el 1085,las taifas piden ayuda a un pueblo musulmán (los almorávides) para recuperar Toledo, y estos se enfrentan a los cristianos en la batalla de Zalaca (Badajoz) y los derrotan y consiguen así recuperar de nuevo el equilibrio. Más tarde, en las segundas taifas los almohades se enfrentan a los reyes cristianos en la batalla de Alarcos y con esta batalla frenan el avance de la Reconquista. El Papa (Inocencio III) forma una cruzada e intenta volver a unificar la Península.
El Reino Nazarí comienza en el año 1212, cuando se unen todos los grandes reinos peninsulares, y juntos se enfrentan a los musulmanes en la batalla de las Navas de Tolosa y los consiguen vencer. A partir de aquí Al-Ándalus queda conquistado por los cristianos menos el Reino Nazarí de Granada que permanece independiente hasta 1492 que lo conquistan los Reyes Católicos.
Al-Ándalus: economía, sociedad y cultura
La economía se sostiene en tres pilares fundamentales. En la agricultura, los árabes mejoraron el sistema de regadio mediante acequias y norias, introdujeron nuevos cultivos como el azúcar, el arroz, etc pero la base de su agricultura continuaba siendo la trilogía mediterránea y la base de su explotación agrícola eran los latifundios. En el comercio exterior las ciudades eran los ejes comerciales principales y surgen las actividades relacionadas con la ciudad. Los impuestos eran fundamentales ya que permitían mantener este enorme aparato administrativo.
La sociedad era de carácter urbana, se organizaba en función de criterios religiosos, y se diferenciaba entre los musulmanes ya que no todos tenían la misma consideración. Los árabes y los sitios eran el grupo más privilegiado, y se les reservaban los mejores puestos. Los bereberes, que eran musulmanes de segundo orden. Los muladies, que eran cristianos convertidos al islam. Los no musulmanes, que eran los judíos y los mozárabes. Y por último los esclavos que trabajaban en el servicio.
En la cultura, las palabras, la gastronomía y el primer poema de la literatura universal es de los árabes. También tenemos legados artísticos como la Giralda de Sevilla, la Mezquita de Córdoba, etc…
Los primeros núcleos de resistencia cristiana. Principales etapas de la Reconquista. Modelos de repoblación
Los primeros núcleos de resistencia están marcados por la llegada de los musulmanes a la Península, lo que implica la salida de los visigodos y la aparición de dos regiones de núcleos en el norte:
Zona cantábrica: Don Pelayo (jefe al frente de la Resistencia) se enfrenta a los musulmanes en la batalla de Covadonga (722). A partir de aquí se forma el reino de Asturias. Alfonso II traslada la capital a Oviedo y un siglo después Fernán González crea el condado de Castilla.
Zona de los Pirineos: hay un núcleo en el Pirineo Occidental, que es el origen del Reino de Navarra, con el reinado de Sancho III se alcanzó la mayor expansión del Reino. Otro en el Pirineo central controlado por los francos. Y el último en el Pirineo Oriental se crea la Marca Hispánica, los condados estaban bajo la hegemonía de Wifredo el Velloso y estos se acabaron independizando.
La Reconquista es la lucha de los reinos cristianos contra los musulmanes por Al-Ándalus, se divide en:
Primera etapa: se caracterizó por la superioridad militar musulmana, y los cristianos conquistan las tierras de nadie.
Segunda etapa: superioridad política y militar de los cristianos. Los protagonistas fueron el Reino Castellano-Leonés y el Reino de Aragón (que se une a los Condados catalanes) y la independencia se Portugal (1145).
Tercera etapa: los Almohades frenan a los cristianos en la batalla de Alarcos. A partir de aquí los reinos cristianos se unen y los vencen en la batalla de las Navas de Tolosa (1212), Fernando III conquista Murcia.
Cuarta etapa: se detiene un intento de ataque de los musulmanes y quedan reducidas a Granada hasta el 1492.
La repoblación se llevó a cabo mediante las cartas puebla (documentos donde el rey otorga unos derechos a la población sobre las tierras). Hubo varios sistemas de repoblación, que fueron: la presura que se hizo en las tierras de nadie y fue de carácter espontáneo. La repoblación concejil donde las tierras estaban alrededor de la ciudad y se hizo mediante las Castas Puebla. Por último se forman los latifundios con la repoblación por órdenes militares castellanas que se encargaban de defender las propiedades.
Los reinos cristianos en la Edad Media: organización política, régimen señorial y sociedad estamental
En la Edad Media la Península sufre una gran fragmentación como consecuencia de los núcleos de resistencia cristianos, por la tendencia disgregadora de los nobles de Castilla y Portugal.
La política del gobierno de estos reinos cristianos se organizaba en torno al rey, que estaba asesorado por la Curia Real. A partir de este siglo los monarcas se la Península convocan a la Curia y a los burgueses y así nacen las Cortes, cuya función era asesor al rey y aprobar impuestos.
La organización socialestaba basada en el régimen señorial y en las relaciones de dependencia con un carácter personalista entre el rey y sus súbditos más poderosos (nobleza y clero) que estaban obligados a guardar lealtad al rey y ayuda militar a cambio de tierras y protección. El rey entregaba señoríos (latifundios con siervos) a sus vasallos.
La sociedad estaba dividida en estamentos: los caballeros (nobles), los clérigos (monjes y sacerdotes) y los campesinos. Estos estamentos eran grupos cerrados a los cuales se pertenecía por derecho de nacimiento, no podían cambiarse a no ser que entrase en el sacerdocio.
2.6. Organización política de la Corona de Castilla, de la Corona de Aragón y del Reino de Navarra, en final de la Edad Media:
La organización política estaba basada en el fortalecimiento del poder de Estado, poco a poco va aumentando su poder: las Cortes eran reuniones convocadas por el rey, el Consejo Real es de asesoramiento del rey y comienza a dejar de tener funciones, la Audiencia es un órgano para impartir justicia, crean la Hacienda y por último se intenta establecer una legislación común a todos los territorios del reino.
El fortalecimiento de la monarquía es distinto en todos los reinos:
En Castilla la monarquía fortalece su poder y se establece la monarquía autoritaria. Los hitos más importantes fueron: la guerra civil entre Pedro I y su hermanastro Enrique II de trastámara. Después de la guerra se proclama rey Enrique II y se inicia la dinastía de los Trastámara y los conflictos durante el reinado de Enrique IV, que finalizaron con la guerra civil entre su hija Juana y la futura Isabel La Católica, se impone definitivamente la monarquía autoritaria.
Aragón era una Confederación de Estados, cada uno tenía leyes e instituciones propias. Triunfa el pactismo, prevalece el concepto feudal entre señores y vasallos, el rey no tiene facultad legislativa y tiene que someterse a las leyes y tradiciones del reino. Se producen conflictos entre la nobleza y la monarquía, como la muerte de Martín I sin sucesión y la guerra civil catalana durante el reinado de Juan II, y se consolidó la monarquía.
En el reino de Navarra la monarquía era pactista. Gobernó con las Cortes, en la que el rey juraba los fueros del reino, la Diputación de los Tres Estados.
1.1.Sociedad y economía en el paleolítico y en el neolítico. Pintura rupestre:
El paleolítico en la Península Ibérica va desde el 800.000 a.C. hasta el 7.000 a.C. aproximadamente. Su economía era una economía depredadora basada en la la caza, la pesca y la recolección. Eran nómadas y se movían en clanes o tribuna en las que no tenían división de actividades y los instrumentos que usaban estaban hechos en piedra, huesos y astas.
El neolítico en la Península Ibérica va desde el 7.000 a.C. hasta el 5.000 a.C. aproximadamente. Su economía era una economía productora y que, al igual que la sociedad, estaba basada en la agricultura. Eran sedentarios, vivían en poblados, tenían división del trabajo y su organización era jerárquica. Las pinturas rupestres son manifestaciones artísticas hechas en piedra, abrigos rocosos. Se comenzaron a hacer a partir del paleolítico superior y en la Península existen dos focos: el Foco cántabro, en el que las pinturas son realistas, naturalistas, policromada y con pigmentos de origen natural como sangre, solo pintaban animales y un ejemplo es la «Cueva de Altamira». Foco levantino, en el que pintaban animales y humanos con escenas de su vida. Las pinturas eran esquemáticas y monocromas y un ejemplo es «El Cogull».
1.2. Los pueblos prerromanos. Las colonización es históricas: griegos y fenicios. Tartesos:
Los pueblos prerromanos invaden la Península, y aparecen varias culturas:
Cultura celta: se sitúan en el norte y en el oeste. Su economía era agropecuaria (también se dedicaban a la minería), no conocían la moneda por lo que se comercio era muy limitado y basado en el trueque. Viven en poblados muy pequeños llamados castros,que se unían mediante lazos familiares y su organización era jerárquica. Uno de los resto que nos quedan hoy en día es el de «Los Verracos». Cultura íbera: se sitúan en el este. Su economía era más avanzada que la de los celtas y basada en la agricultura, la ganadería, la minería y el comercio. Tenían una moneda propia, con jerarquía militar y poderes económicos. Estaban situados en zonas estratégicas para comercia y en zonas elevadas por lo que necesitaban murallas. El único resto que tenemos hoy en día es «La Dama de Elche». La unión de estas dos culturas formó en el centro peninsular la cultura celtíbera. En el II milenio a.C. llegan nuevos pueblos a la Península con un objetivo comercial: Fenicios: forman las actuales Cádiz, Málaga y Almuñecar. Griegos: forman las actuales Rosas, Denia y Ampurias. Los tartesos son el primer estado organizado de la Península, no se sabe nada de ellos y lo poco que se sabe es por escritos de los griegos. Se basaban en la explotación de minas y estaban situados en el triángulo (Huelva-Sevilla-Cádiz). El único resto que nos queda de ellos es el «Tesoro del Carambolo».
1.3.Conquista y romanización de la Península Ibérica. Principales aportaciones romanas en los ámbitos social, económico y cultural:La conquista de la Península Ibérica va del 218 a.C. al 19 a.C. Se inicia con la II Guerra Púnica entre cartagineses y romanos, y se divide en tres etapas:Conquista del este peninsular: se firma el tratado del Ebro, que divide el este de la Península en dos (el norte para los cartagineses y el sur para los romanos), pero los romanos rompen el trato y conquista el norte. Conquista del centro peninsular: es la etapa más larga y más difícil por la oposición de los pueblos indígenas y comienza la guerra de guerrillas en la que muere su emperador Viriato. Conquista del Norte peninsular: se da en el año 27 a.C. cuando Augusto conquista el norte de la Península en las guerras cántabras y la conquista termina definitivamente en el año 19 a.C. Cuando acaba la conquista, comienza la romanización que es un periodo para asimilar la cultura romana, y se llevó a cabo de cuatro formas distintas:Nueva organización territorial: cada territorio conquistado pasa a ser provincia del Imperio Romano. Organización social: dan el concepto de ciudadano romano. Rutas comerciales: como la de «la plata». Usan la moneda romana, el barbecho, el regadío y los latifundios.Métodos culturales: introducen el latín como lengua oficial, el cristianismo, y el derecho romano. Hicieron obras de ingeniería que ahora se consideran patrimonio como lo son las calzadas, los acueductos… 1.4.El reino visigodo: origen y organización política. Los concilios:Los visigodos eran un pueblo romanos aliado de Roma. Llegan a Hispania en el 409 y entran para expulsar a los pueblos que estaban aquí asentados. Antes vivían en Francia y tenían su capital en Toulouse, pero tras la batalla de Vouillé (en la que perdieron) contra los francos descendieron a Hispania. Su único objetivo era la unificación mediante:El territorio: empezó con el rey Leovigildo y continuó con su hijo Recaredo. La religión: Recaredo abandonó el arrianismo para convertirse al cristianismo. La legislación: el rey Recesvinto implanta una ley llamada el Líber Lodiciorum (Fuero Juzgo). Esta unificación era bajo una monarquía electiva, el rey era elegido y gobierna mediante el Officiul Paulatinum, formado por dos instituciones: Aula regia, que era una asamblea que asesorará al monarca. Los concilios, que era una asamblea que se encargaba del poder de decisión político y religiosa y eran convocados por el rey. Al primer concilio acudió el arzobispo de mayor edad y al resto acudió el arzobispo de Toledo.