Hispania Romana
Conquista
– Roma trató de frenar el avance de Cartago en Hispania mediante el Tratado del Ebro (226 a.C). En su conquista de Levante, Aníbal -cartaginés- destruyó Sagunto, ciudad aliada de Roma (219 a.C) y provoca la II Guerra Púnica, inicio de la expansión romana.
- 1ª Etapa (218/16 a.C): Los romanos derrotan a Aníbal y se presentan ante los íberos como libertadores, pero ocupan toda la costa sureste.
- 2ª Etapa (206-29 a.C): Roma avanza hacia el interior, sobre todo a mediados del S. II a.C. Hechos principales: Toma de Numancia y derrota de Viriato.
- 3ª Etapa (29-19 a.C): Conquista de la zona Cantábrica. Roma domina toda la península.
Romanización
- Fue permanente, total y desigual (no arraigó en todas las regiones del mismo modo).
- Sus agentes fueron el ejército, las colonias (ciudades fundadas por Roma), la concesión de la ciudadanía romana, la organización administrativa, las calzadas, el arte, la moneda, la lengua y la presencia de grandes personalidades.
- Provincias: Al principio 2, Citerior/Ulterior, luego 3, Bética, Tarraconense, Lusitania, finalmente 5, con Cartaginense y Gallaecia. Eran la base organizativa del territorio y se dividían en Conventus jurídicos.
Explotación
– Roma dominó Hispania por su riqueza minera y agrícola beneficiándose de sus tesoros.
Sociedad
– Dividida en Libres (ciudadanos/no) y esclavos (considerados cosas).
Los Visigodos
Al final del S. IV d.C. Roma entra en una total crisis económica y social que culmina con la invasión de los bárbaros de la parte occidental. La península fue ocupada por los visigodos que, tras ser derrotados por los francos establecieron su reino en Toledo (507 d.C). A lo largo del S. VI logran una unificación territorial (derrota de Suevos y Bizantinos), religiosa (adoptando el catolicismo) y social (a través de leyes comunes para hispanorromanos y visigodos). Pero se trataba de un estado dividido por luchas internas por el poder, lo que facilitó la conquista musulmana (711).
España Musulmana
Etapas
- Waliato (711/56): La península era una provincia dependiente de Damasco. Se suceden numerosas revueltas.
- Emirato Independiente (756/929): Un Omeya, Abd al Rahman I, ocupa el poder organizando el territorio y frenando las revueltas.
- Califato (929/1031): Un sucesor suyo, Abd al Rahman III, se proclama Califa. Se trata de la etapa de mayor esplendor político, comercial y cultural y Córdoba se convirtió en la ciudad más rica de Europa. Pero el Califa acabó perdiendo prestigio, generales como Almanzor ocupan su papel y al final el califato se desintegra.
- Aparecen así los Reinos de Taifas, que son unificados entre 1085 y 1143, primero, y de 1163 a 1225, después, los almorávides y almohades respectivamente. Pero la derrota de éstos en Navas de Tolosa significa el fin del poder musulmán que a partir del S. XIII se reduce a la franja mediterránea andaluza. La última ciudad musulmana de la península, Granada, fue tomada por los Reyes Católicos en 1492.
Significado
La España Musulmana dio lugar a una sociedad muy diferenciada religiosamente (musulmanes, mozárabes, muladíes) y económicamente (aristocracia, funcionarios, comerciantes y campesinos, generalmente mozárabes, muladíes o bereberes, que pagaban más impuestos y protagonizaron numerosas revueltas). La economía floreció gracias a un intenso comercio con oriente que permitió un gran esplendor cultural basado en la tolerancia.
Reinos Cristianos
Se desarrollan a partir de la invasión árabe, avanzando militarmente hacia el sur en un proceso denominado Reconquista en el que se fue ocupando el territorio (repoblación). Al principio se concedieron Fueros (privilegios) a los municipios. Pero el Valle del Guadalquivir se repobló a partir de Repartimientos, lo que originó el predominio de los nobles. La sociedad cristiana fue más desigual y jerarquizada que la musulmana, su economía más pobre y su cultura más básica. Hay una gran diferencia entre la zona occidental (Castilla y Portugal) y oriental (Aragón y Cataluña). Pero el enlace en 1476 entre Isabel de Castilla y Fernando de Aragón ligó el destino de ambos reinos.
El Imperio Hispano
Los Reyes Católicos
La boda de Fernando e Isabel, la toma de Granada, las Guerras con Francia, en una de las cuales se conquista Navarra y la política matrimonial con Portugal, ponen las bases de la unidad peninsular y de una política que se hace imperial debido a la tradicional expansión aragonesa por el mediterráneo y la castellana por el atlántico tras el descubrimiento de América. España se convierte en la principal potencia del momento. Los RR.CC. imponen el Estado Moderno con la reforma de la Administración (Consejos, Chancillerías, Corregidores) y el control de la Iglesia (Patronato Regio, Inquisición). Muy negativa económica y socialmente fue la expulsión de los Judíos.
Carlos I de España y V de Alemania (1516/55)
Heredó grandes territorios de sus abuelos paternos (Maximiliano de Austria y María de Borgoña) y maternos (los RR.CC.). Al llegar a la península, su condición de extranjero le vale la desconfianza de las Cortes y Municipios, organizándose 2 revueltas (Comunidades y Germanías) que aplasta con dureza. En Europa sus preocupaciones fueron los protestantes alemanes -a los que al final tuvo que conceder libertad religiosa- y Francia -a la que derrotó, logrando así el control de Italia, a pesar de lo que los franceses mantuvieron su hostilidad-. Tampoco pudo controlar a los turcos. Finalmente abdicó y dividió su Imperio. La economía se benefició del oro de América pero, puesto al servicio de una política imperialista, éste no propició un verdadero despegue.
Felipe II (1555/98)
Fue el monarca más poderoso de su época, con grandes éxitos como Lepanto y fracasos como el de la Armada Invencible y la Independencia de Holanda. Creía en la razón de Estado (“el fin justifica los medios”) y en el carácter sagrado de la Monarquía, siendo el Rey Español que ejerció de una manera más personal el poder. Su política de represión religiosa provocó la revuelta de las Alpujarras, que sofocó sangrientamente, y su centralismo la de Aragón que provocó la huida de su secretario, Antonio Pérez y la “leyenda negra” española. Al final de su reinado se desencadena una clara situación de crisis económica que da lugar a la Bancarrota del Estado en 3 ocasiones.