El Origen del Reino de Asturias
El primer reino que surgió en la cordillera cantábrica fue el de Asturias, entre los años 718 y 722. Un jefe local, Pelayo, promovió una revuelta en la que derrotó a los musulmanes en la gruta de Covadonga. El reino astur estableció su corte en Cangas de Onís y pronto amplió su radio de acción hacia el este. Durante el reinado de Alfonso II, la corte se trasladó a Oviedo. Este monarca consolidó el nuevo reino estableciendo la legislación visigoda y organizando la iglesia católica local con independencia del arzobispado de Toledo.
Los Estados Pirenaicos
Al otro lado de los Pirineos se encontraba el reino de los francos, que ya había detenido el avance de los musulmanes en la batalla de Poitiers. En la frontera entre Al-Ándalus y el reino de los francos surgieron diversos estados pirenaicos. En el Pirineo occidental apareció el reino de Pamplona, que alcanzó su independencia en el año 905 con Sancho Garcés I. En los altos valles del Pirineo central se formaron los condados de Aragón, Sobrarbe y Ribagorza. Por último, en el Pirineo oriental se constituyeron varios condados: Barcelona, Gerona, Cerdaña, etc.
El Avance de los Reinos Cristianos
Inferioridad de los Reinos Cristianos
Los reinos cristianos de la península nacieron y se consolidaron entre el siglo VIII y mediados del XI. A lo largo de este periodo se manifestó la hegemonía de Al-Ándalus. En Asturias, los sucesores del rey Alfonso II extendieron el reino al valle del Duero, cuya capital se estableció en León. Por su parte, Navarra se extendió hasta el Ebro, se anexionó con condados del Pirineo central e incluso, durante el reinado de Sancho Garcés III el Mayor, se apoderó del condado de Castilla. Tras la muerte de este monarca, emergieron dos nuevos reinos: Castilla y Aragón.
Avances sobre el Valle del Tajo
En una segunda etapa se produjeron varias circunstancias que permitieron la expansión cristiana: los reinos de taifas pagaron abundantes parias a los cristianos, y estos financiaron con ellas sus conquistas. Los reinos cristianos experimentaron un importante crecimiento demográfico y económico. Los avances más importantes se produjeron de la unión de Castilla y León. También se consolidó el dominio de La Rioja y los territorios vascos. Como contrapartida, el condado de Portugal se independizó y se constituyó en reino con Alfonso I como monarca.
Avance sobre el Valle del Ebro
Por su parte, Aragón, con Alfonso I el Batallador, conquistó Zaragoza y controló el valle del Ebro. Más tarde, el reino de Navarra se separó y quedó limitado a un pequeño territorio. Aragón encontró un nuevo aliado en el condado de Barcelona a través del compromiso matrimonial entre el conde Ramón Berenguer IV y Petronila. El reino surgido de esta unión pasó a llamarse Corona de Aragón.
La Hegemonía de los Reinos Cristianos
Del Valle del Guadalquivir al Mediterráneo
A partir de la derrota almohade frente a una coalición cristiana en Navas de Tolosa en 1212, la superioridad cristiana fue nítida: se produjo un espectacular avance de Castilla, Portugal y León. Los reinos de Castilla y León se unieron definitivamente con Fernando III, rey de Castilla y de León, y ocuparon los valles del Guadiana y del Guadalquivir. Alfonso, el hijo de Fernando III, tomó el reino de Murcia y, ya coronado como Alfonso X, ocupó Cádiz, Huelva y Jerez. Portugal conquistó el Alentejo y el Algarve. La expansión de la Corona de Aragón se debió a Jaime I el Conquistador, que se adueñó de las islas Baleares y Valencia.
Los Inicios de la Sociedad Feudal
Características
- Los reyes y su corte no residían en una capital estable, sino que eran ambulantes; se desplazaban por las tierras de su propiedad.
- Los nobles, por su parte, eran guerreros que poseían ejércitos privados, fortalezas, tierras y aldeas que constituían su patrimonio familiar.
- Los monasterios eran centros económicos y culturales, y aseguraban la presencia de la iglesia en el campo.
- El campesinado tenía algún tipo de dependencia material o personal de los grandes señores laicos y eclesiásticos.
- Existía una economía de subsistencia en la que los campesinos eran artesanos; el comercio se basaba en el trueque.
- Las ciudades eran de tamaño muy reducido y generalmente desempeñaban funciones políticas y militares.
Modelos de Repoblación y Colonización del Sur
Capitulaciones
Eran acuerdos o pactos con las poblaciones sometidas en los que se respetaban sus leyes, creencias, costumbres y casi todas sus propiedades; a cambio, se les imponían una serie de contribuciones especiales.
Repartimientos
Se trataba de la distribución de lotes de bienes y tierras que efectuaba el monarca entre los conquistadores.
Privilegios y Fueros
Su objetivo era atraer a los nuevos colonos para que se establecieran en la zona. Entre los privilegios se encontraban las cartas pueblas, que establecían las condiciones para el cultivo de las tierras; los fueros locales, que determinaban los derechos de una ciudad; y las cartas de franquicia, que concedían privilegios a los colonos.
La Crisis y las Transformaciones Económicas
La tendencia a la despoblación en las áreas rurales ocasionó un descenso de la producción agraria. Para solucionarlo, se adoptaron una serie de medidas: se abandonaron las tierras marginales, con lo que aumentó la productividad; crecieron los pastos para la ganadería trashumante; la agricultura se reorientó hacia cultivos de interés industrial y comercial; se promovió la actividad pesquera, con lo que se incrementó el comercio a larga distancia; progresó el artesanado urbano y la construcción naval.
La Situación en Castilla
Entre los siglos XIII y XIV, los monarcas tuvieron que afrontar diversas sublevaciones de la nobleza y guerras civiles, como la que se produjo entre el rey Pedro I y su hermano Enrique de Trastámara. A pesar de estos conflictos, hubo un fortalecimiento del poder monárquico en Castilla, gracias a instituciones como el Consejo Real, que auxiliaba al monarca; la Audiencia o Chancillería Real, que impartía justicia en el reino; los alcaldes y corregidores, que representaban a los reyes en los ayuntamientos; y una serie de impuestos permanentes que aseguraban los ingresos al soberano.
La Situación de Navarra y Aragón
Los monarcas dependieron en gran medida de las Cortes para gobernar y pactaron, por lo general, con estas. En Navarra, el poder de los señores fue elevado, lo que provocó el enfrentamiento entre clanes rivales. Además, muchos de los reyes, de origen francés, no residían allí, por lo que colaboraban por lo general con las Cortes. En Aragón, los monarcas se lanzaron a una política exterior muy arriesgada y se vieron obligados a ceder patrimonio, privilegios y derechos a los grandes señores, y a hacer todo tipo de concesiones a las Cortes a cambio de préstamos y ayudas.
La Expansión de la Corona de Aragón
- La expansión aragonesa, que se basó en un próspero comercio con Italia, norte de África y Oriente.
- La conquista de Sicilia por Pedro III enfrentó a Aragón con el papado y con Francia.
- La influencia sobre el norte de África.
- La conquista de Cerdeña por Jaime I.
- La expedición de los almogávares en Oriente; estos mercenarios lucharon contra los turcos y saquearon varias islas griegas, y controlaron los ducados de Atenas y Neopatria.
- La conquista de Nápoles por Alfonso V volvió a enfrentar a Aragón con Génova, Francia y el papado.
La Escuela de Traductores de Toledo
El origen de este núcleo de traductores se encuentra en la tarea del arzobispo francés Raymond de Sauvetat en Toledo. En ella colaboraron intelectuales extranjeros con estudiosos peninsulares: cristianos, mozárabes, musulmanes y judíos. La técnica consistía en traducir el árabe al castellano antiguo. Para llevar a cabo esta tarea, solía ayudar un estudioso mozárabe o un judío que dominaba el árabe. Entre los traductores más importantes se encuentran Gerardo de Cremona, Hermann de Carintia y Domingo Gonzálvez.