La Dictadura de Primo de Rivera y el Final del Reinado de Alfonso XIII
La Llegada de la Dictadura
La dictadura de Primo de Rivera encuentra sus causas en la descomposición del sistema de la Restauración. La crisis social, política y militar de 1917 anunciaba la imposibilidad de continuar con el sistema canovista, que se rompió debido a la formación de múltiples gobiernos de concentración, en un intento de la oligarquía por mantener el poder incorporando a nuevas fuerzas políticas.
Sin embargo, esta solución no fue efectiva y la tensión aumentó por la crisis económica tras la Primera Guerra Mundial y la violencia social en forma de huelgas y pistolerismo. Además, en el contexto internacional aparecen tendencias políticas de carácter autoritario y totalitario, como el fascismo italiano, que calarán en algunos sectores de la sociedad como una solución a los problemas del país. Para muchos ya la única solución pasaba por la propuesta del regeneracionista Joaquín Costa de que un “cirujano de hierro” solucionase los problemas del país.
En este contexto, el 13 de septiembre de 1923, Miguel Primo de Rivera, Capitán General de Cataluña, dio un golpe de Estado suspendiendo las garantías constitucionales. El golpe contó con la aprobación de los sectores más conservadores de la sociedad y del propio rey. Ese mismo día Primo de Rivera dio a conocer su manifiesto al país y al ejército, donde con un tono regeneracionista expresaba su propósito de liberar a España de los profesionales de la vieja política y de emprender urgentes reformas económicas, sociales y políticas.
El Final de la Dictadura
Desde 1925, con su intento de institucionalización, poco a poco se fueron sumando fuerzas a la oposición al sistema, sobre todo a medida que decrecía la bonanza económica. Junto con la oposición de los partidos dinásticos, a los que Primo de Rivera había marginado del poder, la novedad es que va a aparecer un nuevo sector de población opuesto a la dictadura, siendo ahora cuando emerge la figura del intelectual crítico con la dictadura, pues muchos de estos intelectuales estaban en el exilio. A estos se les unirá la Universidad, con tendencias cada vez más cercanas al republicanismo.
Por otro lado el catalanismo se radicaliza hacia posiciones cercanas a la izquierda debido a la represión a la que había sido sometido. Un tercer grupo será el del republicanismo, que aunque todavía divididos, desde 1926 con la creación de la Alianza Republicana, se les adherirán intelectuales, universitarios y hasta un sector del ejército.
La Dictadura de Primo de Rivera (1923-1930)
Aunque muy inspirado por la Italia de Mussolini, lo que instaura Primo de Rivera en 1923 no fue un régimen fascista, sino un régimen fuertemente autoritario, reflejo del carácter fuertemente conservador del capitán general de Cataluña.
Primo de Rivera asumió todos los poderes, y se rodeó de consejeros militares. En este sentido, su prioridad fue el restablecimiento del orden social, suspendiendo la Constitución y disolviendo las Cortes. Para garantizar el orden público se declaró el estado de guerra en todo el país, siendo sustituidos los gobernadores civiles por militares que reprimieron cualquier manifestación de hostilidad al régimen. Organizó una milicia especial inspirada en el sometent catalán (llamadas somatén en castellano) que velara por el orden público. Además se prohibieron las actividades de los partidos políticos y llevó a cabo una política fuertemente anticatalanista.
Su segundo objetivo, fue acabar con la “vieja política” de la Restauración. Para ello creará un nuevo partido político en 1924, la Unión Patriótica que sirviera al dictador de base política. Fue un partido sin base social, de ideología derechista, antiparlamentaria, autoritaria, monárquica y católica, creado para colaborar con el gobierno y convertirse en un instrumento de propaganda oficial.
Por último, su tercer objetivo, que era solucionar el problema de Marruecos, fue también su gran triunfo. Gracias al éxito del desembarco de Alhucemas (1925), la ofensiva hispano-francesa en territorio marroquí fue un éxito rotundo que se saldaría con la rendición de Abd-el-Krim y la ocupación del Rif en 1927. Sin embargo, esta situación potenciaría la influencia de los sectores africanistas del ejército tanto en la vida militar como en la vida política del país.
La popularidad y el éxito que consiguió Primo de Rivera gracias a su directorio militar le llevo a tratar de institucionalizar lo que en un principio estaba pensado como algo transitorio, y para ello estableció un Directorio Civil, él seguía a la cabeza pero formó un gobierno con integrantes civiles de la Unión Patriótica, destacando Calvo Sotelo. Para legitimar estos cambios, creó en 1927 la Asamblea Nacional Consultiva, que carecía de capacidad legislativa y sólo ejercía la función consultiva de asesorar e informar al dictador. Estaba formada por miembros que no eran elegidos, sino designados por el gobierno entre afiliados a la Unión Patriótica, oficiales del Ejército, obispos y clases altas.
La Crisis de la Restauración: Intentos Regeneradores y Oposición al Régimen
Alfonso XIII y la Crisis del Sistema Político de la Restauración
El 17 de mayo de 1902, Alfonso XIII asume la Corona al cumplir los 16 años. Su reinado estará marcado por la crisis definitiva del sistema ideado por Cánovas y por la incapacidad de asumir los retos planteados por las tensiones sociales, políticas, económicas e internacionales. Las dimensiones de la crisis son varias y complejas, pero podemos señalar algunos de sus aspectos elementales:
- Los partidos surgidos de la Restauración son excesivamente personalistas, de modo que tras la desaparición de sus primeros líderes se suceden todo tipo de pugnas y divisiones internas que desestabilizan el juego político.
- Esto dio lugar a la participación directa del rey en la política, nombrando gobiernos sin el acuerdo de los partidos, lo que llevó a un desgaste de la monarquía. Los íntimos lazos que tenía Alfonso XIII con el ejército serán especialmente problemáticos, lo que se corresponde con el intrusismo militar en la vida política en un contexto de graves crisis bélicas en Marruecos.
- Los graves desequilibrios regionales, los límites de la industrialización y las profundas desigualdades sociales estimulan la conflictividad política y la violencia social. Los grupos ajenos al sistema de la Restauración (nacionalistas, republicanos, movimiento obrero) afirman sus posturas al tiempo que el sistema empieza a perder la iniciativa al ser incapaz de imponer su influencia en los cada vez más importantes entornos urbanos.
Por tanto, Alfonso XIII se enfrentará a una situación de crisis política permanente, que se complica más por la situación económica y social que vive el país.
- Se generaliza la idea de la necesidad de la regeneración para reformar profundamente al país y ponerlo al nivel de las potencias europeas. Los partidos dinásticos asumirán el regeneracionismo buscando renovar el sistema sin llegar a ponerlo en cuestión.
- El partido conservador contará con el liderazgo regeneracionista de Francisco Silvela y, tras su fracaso, con el de Antonio Maura que optó por comenzar una revolución desde arriba para evitar que llegara a explotar la revolución desde abajo que defendían comunistas y anarquistas.
La Crisis de la Restauración: Intentos Regeneradores y Oposición al Régimen
- El partido liberal contará con el liderazgo regeneracionista de José Canalejas (1910-1912), quien basó su programa en el reformismo social y la limitación del poder de la Iglesia. Especialmente importantes fueron su Ley del Candado (1910) que prohibía la implantación de nuevas órdenes religiosas, y la Ley de Mancomunidades, que permitía que varias diputaciones provinciales se unieran para gestionar servicios públicos.
- Los republicanos se conforman como una alternativa al sistema con un giro reformista y asociado a la burguesía librepensadora y a las capas populares urbanas, donde la influencia del caciquismo era menor. Carece de un partido común y se fragmentará en dos corrientes principales. Por una parte, el Partido Republicano Radical y una alternativa más moderada fue el Partido Reformista.
- En Cataluña los partidos nacionalistas crecen, siendo el catalanismo en general un movimiento liberal que no buscaba la independencia. El partido que dominó la escena política en Cataluña fue la Lliga Regionalista, liderada por Cambó.
- El socialismo seguirá siendo articulado mediante el PSOE. La coalición republicano-socialista (CRS) consigue su primer escaño en 1910, y desde ese momento incrementa su potencia electoral y su influencia política. Los dirigentes socialistas más relevantes serán Pablo Iglesias, Julián Besteiro y Francisco Largo Caballero. En 1921 el PSOE rechaza integrarse en la Internacional Comunista, por lo que el Partido Comunista de España.
- El anarcosindicalismo se organiza formalmente con la fundación de la Confederación Nacional del Trabajo. La CNT vive momentos de ilegalidad y represión directa. En 1919 reafirma su apoliticismo, la apuesta por las negociaciones directas entre obreros y empresarios.
La Proclamación de la Segunda República
El fracaso de la Dictadura de Primo de Rivera (1923-1930), que contó con el apoyo de Alfonso XIII, supuso a corto plazo también el hundimiento de la monarquía. A comienzos de 1931 el nuevo gobierno presidido por el almirante Aznar había decidido convocar elecciones municipales para el 12 de abril. Se planteaba como el primer paso para la normalización política del país e irían seguidas después por unas elecciones generales. Sin embargo, los republicanos en coalición con los socialistas decidieron convertir esa consulta en un plebiscito contra la monarquía. La participación fue muy alta y las candidaturas republicano-socialistas triunfaron en las grandes ciudades y en la mayor parte de los núcleos industriales, mientras que en las zonas rurales el triunfo fue para los monárquicos.
El mismo día 14 de abril, los miembros del Comité Revolucionario, que en agosto de 1930 habían constituido el Pacto de San Sebastián, proclamaron la República y se convirtieron en Gobierno Provisional que durará hasta la proclamación de la nueva constitución. Alcalá Zamora es nombrado jefe del Estado y presidente del Gobierno Provisional. En el nuevo gabinete estaban representadas las fuerzas democráticas unidas en su oposición a la monarquía.
- Fuera del poder quedan los sectores más radicales de la derecha.
- Es en esta época que se comienzan a perfilar las reformas que se llevarán a cabo más adelante y que se focalizan lograr tres objetivos: atajar el problema agrario, crear un ejército afín a la República y en el fomento de la educación.
El 28 de junio de 1931 se celebraron las primeras elecciones generales para Cortes Constituyentes. La victoria fue para la coalición republicano-socialista. Las nuevas Cortes elaboraron una Constitución que fue aprobada el 9 de diciembre de 1931.
- El Estado se articula en tres poderes:
- Poder legislativo: quedó en manos de unas Cortes unicamerales.
- Poder ejecutivo: con un presidente de la República con escasos poderes y un jefe de Gobierno nombrado por el presidente pero que debía contar con la aprobación de las Cortes y los ministros.
- Poder judicial: en manos de los tribunales de justicia.
Desde principios de siglo el tema del voto femenino se había planteado sin éxito en España. En las elecciones de 1931 las mujeres no pudieron votar pero sí ser elegidas. Finalmente se impuso la idea de que no era cuestión de oportunidad sino de justicia y las mujeres pudieron votar en las siguientes elecciones en 1933.
El Bienio Reformista: Reformas Estructurales y Realizaciones Sociales, Culturales y Territoriales. Reacciones desde los Diversos Posicionamientos.
Las Reformas Estructurales y Realizaciones Sociales, Culturales y Territoriales
El gobierno republicano-socialista emprendió un amplio programa de reformas en un contexto económico desfavorable, marcado por el ascenso del paro. Estas fueron sus principales reformas:
- Reforma Militar: En 1931 se promulgó la Ley de Retiro de la Oficialidad que ofrecía el retiro voluntario y en óptimas condiciones a quienes no juraran la nueva Constitución. El objetivo era doble: por una parte acabar con la macrocefalia y por otro crear un ejército leal a la república.
- Reforma Educativa: Se intentó acabar con la hegemonía de la enseñanza religiosa y se adoptó un modelo de escuela mixta, laica, obligatoria y gratuita.
- Reforma Agraria: Fue el proyecto de mayor envergadura de la República. Se pretendía poner fin al predominio del latifundismo existente en el centro y sur de España y mejorar la vida de los campesinos pobres. La ley se vio limitada por la oposición radical de los grandes propietarios, las complejidades legales y burocráticas, etc.
- Reforma Religiosa: Un objetivo de la República desde el primer momento fue limitar la influencia de la Iglesia y secularizar la sociedad. La Iglesia perderá las subvenciones del Estado y se les apartó de la enseñanza y de otras actividades económicas no relacionadas con su profesión.
- Reforma Territorial: Aunque los gobernantes defendían un Estado central fuerte, emprendieron una reforma que permitiera a las regiones con sentimientos nacionalistas acceder a la autonomía. Se formalizó el estatuto de Cataluña, el del País Vasco fue rechazado por los parlamentarios de izquierdas por ser poco democrático y confesional.
Las reformas se situarán la derecha y los grupos de presión, que mostraron una fuerte resistencia al proceso reformista y recurrieron a la insurrección militar. Mal preparada y con desigual apoyo en el ejército, fracasó y Sanjurjo, aunque fue condenado a pena de muerte en un Consejo de Guerra, acabó siendo perdonado y exiliado a Portugal.
Por el otro lado, a la izquierda obrera las reformas les parecían lentas e insuficientes y querían llevar a cabo una revolución social inmediata. En ese contexto, se produjo un aumento de las huelgas y la conflictividad social que es respondido con medidas firmes desde el gobierno de Azaña.