LA DICTADURA DE PRIMO DE RIVERA
A) EL PROBLEMA DE MARRUECOS
A principios del siglo XX, en la Conferencia de Algeciras de 1906 se acordó la creación de un Protectorado franco-español en Marruecos, y España obtuvo el control del Rif. La ocupación del Rif encontró la oposición de los bereberes, y originó una guerra permanente. La guerra no contaba con el respaldo de la sociedad. Tras las derrotas, se abrió una investigación para depurar responsabilidades. Sus resultados formaron el Expediente Picasso.
B) LA CRISIS SOCIAL (1919-1923)
Existía una grave crisis social, los trabajadores promovieron una serie de huelgas revindicando mejoras salariales y laborales. Las protestas se extenderon también al campo. Las huelgas campesinas, que reclamaban el reparto de los latifundios, fueron duramente reprimidas por la Guardia Civil. El gobierno y las organizaciones patronales respaldaron la creación de sindicatos afines a sus intereses, que ejercían la violencia contra dirigentes obreros que también respondían violentamente. Se llegó así a una guerra social.
C) EL GOLPE DE ESTADO MILITAR
Ante la crisis generalizada y el temor a que el Expediente Picasso se debatiera, el general Primo de Rivera dirigió un golpe de Estado. Contaba con el apoyo del rey y el apoyo patronal. El golpe se presentó como una solución para poner fin a los movimientos de protesta y violencia en las calles.
D) LA DICTADURA DE PRIMO DE RIVERA
El régimen de Primo de Rivera suspendió la Constitución y disolvió las Cortes. Se prohibieron los partidos políticos y algunos sindicatos, como la CNT. Además, se suprimió la Mancomunidad de Cataluña y se persiguió al nacionalismo catalán y vasco, prohibiendo el uso público de sus lenguas. Se creó un partido único, la Unión Patriótica, y un órgano legislativo, la Asamblea Nacional Consultiva. Hubo un cierto crecimiento económico. Se llevaron a cabo numerosas obras públicas y se pusieron en marcha monopolios como Telefónica.
E)LA CRISIS DE LA DICTADURA (1930-1931)
Las repercusiones de la crisis económica mundial de 1929 empezaron a notarse en España, y el clima de oposición a la dictadura aumentó considerablemente. Falto de apoyos, tras la pérdida de confianza de Alfonso XIII, Primo de Rivera dimitió en 1930. El rey nombró como jefe de gobierno al general Berenguer, que debía propiciar el retorno paulatino a la legalidad constitucional. Gran parte de la oposición firmó en agosto de 1930 el Pacto de San Sebastián, reivindicando unas elecciones democráticas y la instauración de una república. Poco tiempo después, Berenguer fue sustituido por el almirante Aznar, quien convocó elecciones municipales para el 12 de abril de 1931.
LA SEGUNDA REPÚBLICA ESPAÑOLA
LA PROCLAMACIÓN DE LA REPÚBLICA
Las elecciones municipales fueron entendidas por la población como un plebiscito entre monarquía y república. La participación fue muy elevada y los resultados electorales señalaron una clara voluntad de cambio político. Ante estos resultados electorales y la proliferación de manifestaciones solicitando la proclamación de la República, Alfonso XIII suspendió la potestad real y partió hacia el exilio. El 14 de abril de 1931, fue proclamada la Segunda República española.
EL GOBIERNO PROVISIONAL Y LAS CORTES CONSTITUYENTES
El nuevo partido puso en marcha varias reformas solicitas por la población: legalidad de todos los partidos y sindicatos, amnistía general para presos políticos de la dictadura, creación de una Generalitat provisional para el gobierno de Cataluña y amplias leyes sociales que incluían la jornada de 8 horas, el salario mínimo y el seguro ante los accidentes de trabajo. La implantación de la República no estuvo exenta de problemas; la actitud hostil hacia el nuevo régimen de algunos sectores eclesiásticos provocó una oleada de anticlericalismo y en varias ciudades se quemaron iglesias. Algunos grupos anarquistas (CNT) presionaron al nuevo gobierno, con una oleada de huelgas obreras y ocupaciones de tierras. En junio de 1931, se convocaron elecciones a Cortes Constituyentes, que dieron a la coalición republicanosocialista. La primera gran tarea fue elaborar una Constitución, aprobada en diciembre de ese mismo año.
LA CONSTITUCIÓN REPUBLICANA DE 1931
La nueva Constitución estableció las bases de una república democrática y de progreso. El texto establecía los siguientes principios:
- España se definía como un Estado integral, con la posibilidad de establecer gobiernos autónomos.
- Se instauró el sufragio universal masculino y femenino.
- Se proclamó la acofensionalidad del Estado, pero se respetaban todos los cultos y creencias. Se permitió el matrimonio civil y se implantó el divorcio.
- Presentaba una declaración de derechos individuales y establecía amplias libertades públicas y privadas. Reconocía el derecho a la propiedad privada.
- El poder legislativo residía en las Cortes, formadas por una sola Cámara; el poder ejecutivo estaba en manos del Consejo de Ministros y el Presidente. Se asentaba la independencia del poder judicial.
Aprobada la Constitución, Niceto Alcalá Zamora fue elegido presidente de la República, y Manuel Azaña, fue nombrado jefe de un gobierno integrado por republicanos, socialistas y nacionalistas. Se inciaba la etapa del Bienio Reformista (1931-1933).
EL VOTO FEMENINO
La Constitución de 1931 reconoció, por primera vez en España, el derecho al sufragio femenino. Las derechas se oponían al voto femenino ya que decían que el lugar de la mujer en la sociedad era el hogar, reservando los asuntos públicos a los hombres. Las izquierdas apoyaban la igualdad legal de hombres y mujeres y defendían su derecho a votar y a ser elegidas.
¿QUÉ REFORMAS EMPRENDIÓ LA REPÚBLICA?
A) LA MODERNIZACIÓN DEL ESTADO
La Segunda República emprendió algunas reformas indispensables para modernizar el país y asentar el régimen republicano. Manuel Azaña acometió la reforma del ejército para restaurarlo en una institución eficiente y leal a la incipiente República. Otra de las iniciativas que recogía la Constitución era la separación Iglesia-Estado.
Las reformas querían disminuir la influencia de la Iglesia sobre la vida pública y la educación. Se puso en marcha el proceso de descentrelización del Estado, que permitía elaborar estatutos de autonomía y establecer gobiernos autonómicos.
LA REFORMA DEL EJÉRCITO
- Decretos de septiembre de 1931 (Ley de Retiro), que posibilitaron la jubilación de casi la mitad de los oficiales.
- Cierre de la Academia Militar de Zaragoza donde se formaban los altos mandos.
- Cambio de destino de los oficiales contrarios al nuevo régimen.
- Cambio de la Guardia de Asalto, nueva policía militarizada y leal a la República.
LA SEPARACIÓN IGLESIA-ESTADO
- Supresión del presupuesto público para el mantenimiento del clero.
- Disminución de la influencia de las órdenes religiosas.
LA REFORMA TERRITORIAL: LOS ESTATUTOS DE AUTONOMÍA
- El primer territorio que se acogió a la prerrogativa autonómica fue Cataluña. Tras una Generalitat provisional, y pese a la oposición de las derechas en las Cortes, el Estatuto de Autonomía fue aprobado en 1932.
- En el País Vasco empezó a redactarse un estatuto, que fue aprobado en 1936.
- En Galicia, el inicio de la Guerra Civil frenó el proceso autonómico.
B) LA REFORMA AGRARIA
En algunas zonas de España, existían cientos de miles de jornalientos de miles de jornaleros sin tierras y en una situación de extrema miseria, mientras que la propiedad se concentraba en manos de unos centenares de propietarios. Una ley de 1932 decretó expropiables las grandes fincas que no se cultivaron, y permitió distribuirlas entre los campesinos sin tierras. Se creó el Instituto de Reforma Agraria (IRA) para indemnizar a los propietarios y facilitar el asentamiento a las familias campesinas. Sin embargo, la escasez de recursos y los
numerosos pleitos hicieron que la reforma fuera lenta y limitada.
C) LA OPOSICIÓN AL GOBIERNO REPUBLICANO-SOCIALISTA
El reformismo hizo frente a dos bloques de oposición:
– El enfrentamiento con los afectados por las reformas. En 1932, aprovechando el descontento, el general Sanjurjo dio un golpe de Estado y fue frenado por el gobierno.
– La crítica de los sectores de iquierda, debida a la lentitud de algunas reformas, especialmente la reforma agraria, irritó una parte de los jornaleros y obreros.
La UGT se radicalizó y cientos de núcleos anarquistas, sobretodo los vinculados a la FAI, apostaron directamente por la insurrección armada. Algunos levantamientos como los del Alto Llobregat (1932) y Casas Viejas (1933) que fueron duramente reprimidos por las fuerzas del orden público.
EL BIENIO CONSERVADOR Y EL FRENTE POPULAR
EL BIENIO CONSERVADOR (1933-1935)
La represión de los sucesos de Casas Viejas generó críticas al gobierno y división en la coalición republicano-socialista. Azaña dimitió como jefe del gobierno, y el presidente Alcalá Zamora convocó nuevas elecciones para el 18 de noviembre de 1933. La victoria del centro-derecha (Partido Radical y CEDA) comportó la formación de un nuevo gobierno presidido por Lerroux, que paralizó buena parte del proceso reformista desarrollado en la etapa anterior. En octubre de 1934, la entrada de ministros de la CEDA en el gobierno provocó un movimiento insurrecional, impulsado por socialistas y comunistas. En Cataluña, la Generalitat proclamó el Estado catalán dentro de la República federal española. En 1935, algunos ministros radicales se vieron implicados en diversos escándalos de corrupción, y el presidente de la República convocó elecciones para febrero de 1936.
EL FRENTE POPULAR (1936-1939)
Los partidos republicanos de izquierda concurrieron a las elecciones formando un Frente Popular. Los partidos de centro y de derecha se unieron en coalición en la mayoría de las provincias. Su programa era continuar la política contrarreformista del Bienrio Conservador y modificar la
Constitución. La victoria electoral correspondió por escaso margen al Frente Popular. El gobierno fue asumido por los republicanos de Azaña. Asimismo, a los militares sospechosos de preparar un golpe de Estado se les dio un destino lejos de Madrid.
DEL FRENTE POPULAR A LA GUERRA CIVIL
El triunfo del Frente Popular fue mal recibido por los sectores mas conservadores de la sociedad. Los militares opuestos a la República (Emilio Mola, desde Navarra, Francisco Franco, desde Canarias, y José Sanjurjo, desde Portugal) establecieron contactos con grupos de extrema derecha para organizar un golpe de Estado. Las tensiones políticas desencadenaron un clima de enfrentamiento entre milicias de izquierdas y derechas. El 13 de julio fue asesinado el diputado monárquico José Calvo Sotelo, en represalia por la muerte del teniente José Castillo. Este clima sirvió de pretexto. El levantamiento militar se inició el 17 de julio en el Norte de África y los días 18 y 19 se extendió a Canarias, Baleares y toda la Península. La insurreción fracasó, sobre todo en las grandes ciudades y zonas industriales.
7- LA GUERRA CIVIL: LOS BANDOS ENFRENTADOS
LA REPÚBLICA EN GUERRA