La Guerra Civil Española
Tras la victoria del Frente Popular, tanto la extrema derecha como la extrema izquierda querían acabar con la República, aunque fueron los primeros los que lo intentaron. La conspiración contra el régimen fue plural y desorganizada. A las fuerzas monárquicas se unieron sectores militares y el apoyo de Mussolini. El más importante de los conspiradores fue el general Emilio Mola en Pamplona. La participación de Francisco Franco no estuvo clara hasta el final.
La idea no era una guerra civil, sino una acción violenta y decidida para conseguir el triunfo en Madrid, capital del estado, y establecer un régimen dictatorial que no tenía que ser permanente ni tampoco establecer necesariamente un régimen monárquico.
El régimen republicano sabía de las conspiraciones y los puestos superiores fueron confiados a personas de las que no se esperaba una conspiración y a los sospechosos de ello se les destinó a lugares desde donde les fuera difícil llevarla a cabo. Las grandes ciudades fueron puestas bajo autoridades adictas a la República, pero los políticos no midieron bien sus fuerzas y a la hora de la sublevación hubo partidos políticos que iniciaron una revolución social que dejaron en nada el poder del gobierno popular.
La Sublevación
La sublevación se inicia en Marruecos el día 17/07/1936, adelantándose a la fecha prevista. Dos días más tarde, Franco se desplaza de Canarias, donde se había sublevado sin dificultades, a Marruecos en avión. A partir del 18 de julio se extiende por la península.
En Navarra y Castilla la Vieja, tradicionalmente católicas, el general Mola logra la victoria fácilmente. En Aragón, el general Cabanella vence en las capitales de provincia. En Oviedo también vencen, pero el resto de Asturias siguió bajo la izquierda. En Galicia también triunfó la sublevación pese a la resistencia obrera. En Andalucía, que era izquierdista, no lo lograron gracias a la resistencia de los barrios obreros hasta la llegada de los refuerzos de África.
Pero en Madrid y en Barcelona las cosas fueron distintas y las fuerzas de sublevación fueron derrotadas. En otras muchas ciudades hubo titubeos, levantándose unas sí y otras no, quedando España dividida en dos partes.
El general Mola había intentado un golpe de fuerza muy violento pero de corta duración que había fracasado, provocando así la guerra civil, ya que ni una ni otra parte quería un gobierno de centro.
Fuerzas en Combate
Las fuerzas estaban igualadas: el frente sublevado tenía la porción de África, que era la porción más valiosa, y el Frente Popular disponía de las capitales más importantes, la industria, reservas de oro y clara ventaja en aviación y flota.
El factor decisivo fue la revolución que se dio en el Frente Popular. Se disolvió el poder político y estaban tan divididos que no sabían quién debía tomar las decisiones.
Fases de la Guerra
Guerra de columnas
Entre julio y septiembre de 1936, la superioridad de los sublevados fue evidente, lo que explica la rapidez con la que el general Franco, tras cruzar el estrecho, avanzó hasta Madrid.
Lucha en torno a Madrid
De noviembre de 1936 a marzo de 1937, el general intentó flanquear la capital, ya que no lo había conseguido mediante el ataque directo. Pero no consiguiendo, incluso con la ayuda de Mussolini, decide atacar en el norte, donde eran más débiles.
La caída del Norte»Guernic»
De marzo a octubre de 1937, la concentración en Vizcaya de las mejores tropas de Franco acabó con el frente norte. Durango y Guernica fueron bombardeadas por la aviación alemana. También Asturias les fue difícil de vencer. Durante el verano de 1937, el ejército republicano lanzó ataques en otras zonas con el fin de distraer a Franco, pero fracasaron.
Teruel, la marcha hacia el Mediterráneo
De diciembre de 1937 a junio de 1938, el Frente Popular, para evitar la conquista de Madrid, conquista Teruel, pero las tropas de Franco logran recuperarla.
La batalla del Ebro
De julio de 1938 a febrero de 1938, estabilizado ya el frente, el ejército popular atraviesa el Ebro, que dividía los dos frentes. La batalla dura tres meses y medio, el Frente Popular retrocede. En el mes de febrero de 1938, el general Franco avanza y ocupa Cataluña sin encontrar resistencia. Manuel Azaña, exiliado, presenta su dimisión.
Fin de la guerra
En febrero de 1939 se rinde Menorca y a finales de ese mes el Frente Popular entra en crisis y en marzo se negocia el fin de la guerra.
La Guerra como Acontecimiento Internacional
La guerra creó inestabilidad internacional. La República tuvo el apoyo de Francia, la URSS y las Brigadas Internacionales (grupos antifascistas). El bando de Franco contó con el apoyo de Mussolini y de Hitler.
El bando de Franco salió más beneficiado en este aspecto: devolvió la ayuda tarde y de forma voluntaria y en forma de unos pocos hombres, mientras que el Frente Popular tenía que entregar la ayuda enseguida y se tuvo que desembolsar de oro. También dependía de si los gobiernos que le ayudaban cambiaban de dirigentes.
Evolución de los Bandos
Los sublevados exterminaron a políticos, masones, maestros y profesores que se negaban a secundar el alzamiento, mientras que en el Frente Popular hacían lo propio con frailes, militares sospechosos de fascismo, políticos derechistas y patronos. Federico García Lorca fue asesinado a comienzos de la guerra en Granada a manos de la derecha y en la misma semana hacían lo mismo con varios oficiales en Madrid, en Paracuellos del Jarama.
La Iglesia se puso del lado de los sublevados, que tomó la contienda como una cruzada. En el mes de septiembre de 1936, Francisco Franco fue proclamado jefe del gobierno, que él convertirá en una jefatura de estado, y la guerra le convierte en Caudillo. Junto a Franco destacaba su cuñado, Ramón Serrano Suñer, procedente de la CEDA.
La Guerra Civil fue una guerra de pobres en la que ninguno de los bandos tenía fuerza para lanzar dos ofensivas, donde el mando sublevado tuvo mayor capacidad de maniobra.
apacidad de maniobra.