La Guerra Civil Española
La Sublevación
El 17 de julio de 1936, una parte de las guarniciones militares se sublevó contra el gobierno republicano. Su objetivo era eliminar la amenaza revolucionaria mediante el terror y la supresión de las libertades democráticas. El alzamiento triunfó en Marruecos y se extendió por casi todo el territorio español, excepto en la cornisa cantábrica, Cataluña y el este y sur de la península.
La Revolución Obrera
El fracaso del alzamiento militar permitió a las organizaciones obreras revolucionarias hacerse con el poder local en media España. Impusieron la colectivización de tierras y fábricas, organizaron milicias y ejercieron la represión. El gobierno republicano mantuvo el control de la administración del Estado, pero no tenía control sobre los comités y milicias que ejercían el poder local.
La Represión
En los primeros meses de la guerra civil, hubo más muertes en la retaguardia que en el frente. En el bando republicano, los crímenes fueron cometidos por milicianos de organizaciones revolucionarias. En el bando sublevado, las autoridades militares tuvieron una mayor responsabilidad en los crímenes. Los motivos de la represión fueron:
- Como arma de guerra
- Como venganza
- Como instrumento de limpieza
Franco, Jefe de Estado
El 30 de septiembre de 1936, el general Francisco Franco fue nombrado jefe del Estado español. Casi todas las organizaciones de derechas apoyaron el alzamiento, pero solo los tradicionalistas y los falangistas estaban constituyendo milicias voluntarias. Franco deseaba disponer de un partido único y decretó la fusión de falanguistas y tradicionalistas en la Falange Española Tradicionalista (FET).
La Intervención Extranjera
La guerra civil española se internacionalizó rápidamente. Alemania e Italia proporcionaron suministros a los sublevados, mientras que la Unión Soviética y las Brigadas Internacionales apoyaron a la República. La ayuda alemana e italiana contribuyó a la victoria de Franco.
La Caída de la República
Tras la caída de Cataluña y el reconocimiento de Franco por los gobiernos de Londres y París, el presidente de la República, Azaña, dimitió. El coronel Casado dio un golpe de Estado contra el gobierno de Negrín, quien abandonó España. Franco lanzó una última ofensiva que no encontró resistencia, y el 1 de abril de 1939 concluyó la guerra.
El Exilio
Miles de combatientes republicanos se exiliaron, principalmente en Francia. En abril de 1939, había unos 430.000 refugiados en Francia. Habían muerto casi 350.000 personas.