El “Alzamiento Nacional”, nombre dado por los militares sublevados al pronunciamiento del 17 y 18 de Julio de 1936 contra el Gobierno del Frente Popular, condujo a la Guerra Civil, un acontecimiento que suscitó gran atención tanto en nuestro país como en el exterior, al percibirse como un precedente de la 2a Guerra Mundial, en la que se enfrentaron el
liberalismo y el socialismo con las derechas autoritarias y fascistas. El triunfo “nacional” frustraría los intentos de crear una democracia estable en España y trajo como consecuencia el establecimiento de la dictadura franquista. 1. Las causas de la conspiración y la sublevación militar.
El Gobierno del Frente Popular no actuó con firmeza ante el clima de violencia existente, lo que contribuyó a la radicalización social e ideológica del país. Además, los grupos políticos en auge eran los más extremistas: en la izquierda, un sector del PSOE (con Largo Caballero, el “Lenin español”), y los anarcosindicalistas de la CNT, eran partidarios de la revolución social; en la derecha, la Falange Española, planteaba una alternativa autoritaria al régimen parlamentario. La conspiración militar se inició tras el triunfo del Frente Popular debido al deterioro del orden público y a motivos más profundos: la resistencia a las reformas y a las autonomías, y el miedo a la revolución. El general Sanjurjo fue el líder teórico, pero murió en accidente; el General Mola fue el estratega de la operación; y el general Franco lideraría a los sublevados más tarde. El impacto del asesinato de Calvo Sotelo fue la excusa para la sublevación militar, iniciada el 17 de Julio en Marruecos, donde se encontraba la mejor guarnición del Ejército (la Legión y los Regulares). Franco, tras controlar Canarias, se trasladó a Marruecos y se puso al frente de la rebelión. El 18 de Julio el General Mola en Pamplona y otros jefes militares en el resto de España declararon el estado de guerra.
Los sublevados prevéían un golpe breve y rotundo; pero su mala ejecución, unida a la debilidad del Gobierno para atajarlo, condujeron a una larga Guerra Civil, quedando el país dividido en dos: -Los rebeldes triunfaron en la España rural. Dos áreas separadas: Galicia, Castilla, Álava, Navarra, Aragón y N. Extremadura; y Andalucía Occ. Además, Mallorca e Ibiza, y Marruecos. Sus apoyos sociales serían: terratenientes y pequeños propietarios, oligarquía financiera e industrial, sectores del ejército y la Iglesia. -Permanecieron fieles a la República las ciudades más importantes (Madrid, Barcelona…) y las zonas industriales. También dividida en dos zonas (Cornisa cantábrica y Centro-Mediterránea). Sus apoyos sociales: la clase obrera, las clases medias urbanas y un sector de la burguésía y del ejército. 2.Contexto internacional. La desigual ayuda exterior: La Guerra Civil Española estalló en un momento de gran tensión internacional. -El bando rebelde de Franco obtuvo la ayuda de la Legión Cóndor y Mussolini. Contó con tropas marroquíes integradas en el ejército y con la colaboración de Portugal. -La República obtuvo la ayuda de la URSS y de las Brigadas Internacionales, voluntarios reclutados por la Internacional Comunista. Pero Gran Bretaña y Francia, siguiendo la política de apaciguamiento con Hitler, optaron por no apoyar la República. Frente al apoyo germano-italiano al bando nacional, la asistencia exterior a la República fue mínima. Y la “no intervención” fue decisiva para que la contienda se decantara del lado nacional. 2. El desarrollo de la guerra. 2.1. La guerra de movimientos y la marcha hacia
Madrid (Julio a Noviembre de 1936): El objetivo de los sublevados era tomar Madrid. El ejército de África, gracias al “puente aéreo”, logró cruzar el Estrecho, iniciando un rápido avance hacia Madrid. En el camino, Yagüe desvió las columnas para tomar Badajoz (brutal represión) y, más tarde, Franco desvió de nuevo las tropas para rescatar en Toledo al coronel Moscardó, que se hizo fuerte en el Alcázar. En Octubre llegaron a las cercanías de Madrid. Así, quedaba comunicado el sur con Castilla la Vieja. Mientras, Mola tomó Irún y San Sebastián, quedando aislada la zona cantábrica de la frontera con Francia. 2.2. Fracaso nacional de la ofensiva sobre Madrid (Noviembre 1936 a Marzo 1937): El conflicto se convirtió en una guerra de desgaste a causa de la resistencia de Madrid, bombardeada por aire y asediada por todos lados. El Gobierno se trasladó a Valencia y el general Miaja defendíó Madrid con eficacia: -El ejército republicano, debido a la movilización popular y a los refuerzos extranjeros, rechazó un ataque frontal en la Ciudad Universitaria, donde perecíó el anarquista Durruti, que había llegado con una columna para la defensa de la capital. -Las tropas franquistas intentaron cercar Madrid. Pero fracasarían en las batallas del Jarama (una de las más encarnizadas) y de Guadalajara (derrota de las tropas italianas). En el frente sur, Queipo de Llano tomó Málaga, caída que representó el fracaso de las milicias (desorganizadas). Era necesario crear un ejército popular disciplinado, idea apoyada por los partidos y los militares republicanos.
Los sublevados prevéían un golpe breve y rotundo; pero su mala ejecución, unida a la debilidad del Gobierno para atajarlo, condujeron a una larga Guerra Civil, quedando el país dividido en dos: -Los rebeldes triunfaron en la España rural. Dos áreas separadas: Galicia, Castilla, Álava, Navarra, Aragón y N. Extremadura; y Andalucía Occ. Además, Mallorca e Ibiza, y Marruecos. Sus apoyos sociales serían: terratenientes y pequeños propietarios, oligarquía financiera e industrial, sectores del ejército y la Iglesia. -Permanecieron fieles a la República las ciudades más importantes (Madrid, Barcelona…) y las zonas industriales. También dividida en dos zonas (Cornisa cantábrica y Centro-Mediterránea). Sus apoyos sociales: la clase obrera, las clases medias urbanas y un sector de la burguésía y del ejército. 2.Contexto internacional. La desigual ayuda exterior: La Guerra Civil Española estalló en un momento de gran tensión internacional. -El bando rebelde de Franco obtuvo la ayuda de la Legión Cóndor y Mussolini. Contó con tropas marroquíes integradas en el ejército y con la colaboración de Portugal. -La República obtuvo la ayuda de la URSS y de las Brigadas Internacionales, voluntarios reclutados por la Internacional Comunista. Pero Gran Bretaña y Francia, siguiendo la política de apaciguamiento con Hitler, optaron por no apoyar la República. Frente al apoyo germano-italiano al bando nacional, la asistencia exterior a la República fue mínima. Y la “no intervención” fue decisiva para que la contienda se decantara del lado nacional. 2. El desarrollo de la guerra. 2.1. La guerra de movimientos y la marcha hacia
Madrid (Julio a Noviembre de 1936): El objetivo de los sublevados era tomar Madrid. El ejército de África, gracias al “puente aéreo”, logró cruzar el Estrecho, iniciando un rápido avance hacia Madrid. En el camino, Yagüe desvió las columnas para tomar Badajoz (brutal represión) y, más tarde, Franco desvió de nuevo las tropas para rescatar en Toledo al coronel Moscardó, que se hizo fuerte en el Alcázar. En Octubre llegaron a las cercanías de Madrid. Así, quedaba comunicado el sur con Castilla la Vieja. Mientras, Mola tomó Irún y San Sebastián, quedando aislada la zona cantábrica de la frontera con Francia. 2.2. Fracaso nacional de la ofensiva sobre Madrid (Noviembre 1936 a Marzo 1937): El conflicto se convirtió en una guerra de desgaste a causa de la resistencia de Madrid, bombardeada por aire y asediada por todos lados. El Gobierno se trasladó a Valencia y el general Miaja defendíó Madrid con eficacia: -El ejército republicano, debido a la movilización popular y a los refuerzos extranjeros, rechazó un ataque frontal en la Ciudad Universitaria, donde perecíó el anarquista Durruti, que había llegado con una columna para la defensa de la capital. -Las tropas franquistas intentaron cercar Madrid. Pero fracasarían en las batallas del Jarama (una de las más encarnizadas) y de Guadalajara (derrota de las tropas italianas). En el frente sur, Queipo de Llano tomó Málaga, caída que representó el fracaso de las milicias (desorganizadas). Era necesario crear un ejército popular disciplinado, idea apoyada por los partidos y los militares republicanos.