La Guerra de la Independencia Española (1808-1814)
Desarrollo de la Guerra
Primera Fase (Verano de 1808)
Una vigorosa reacción popular sorprendió a los ejércitos franceses, quienes decidieron ocupar el territorio español. Sitios como los de Zaragoza, Valencia y Girona sometieron a las ciudades que habían proclamado su independencia. En Andalucía, el ejército del general Castaños venció a las tropas francesas en Bailén (1808), obligando a José I a abandonar Madrid.
Segunda Fase (Finales de 1808-1812)
Napoleón llegó a la Península con un ejército de casi 250.000 hombres y recuperó el control de Madrid. Durante tres años, el ejército francés sufrió una guerra de desgaste contra la guerrilla. Controlaron las principales ciudades, excepto Cádiz, pero no las zonas rurales.
Tercera Fase (1812-1814)
La ofensiva británica, liderada por el general Wellington, desembarcó en Portugal y venció a los franceses en Arapiles. En 1813, el Tratado de Valençay puso fin a la guerra. La participación británica fue decisiva, uniendo fuerzas con los españoles y con la ayuda indirecta de los rusos.
Las Juntas y la Convocatoria de las Cortes de Cádiz
Entre mayo y agosto de 1808, se formaron 13 juntas provinciales de defensa. En septiembre, algunas formaron la Junta Suprema Central Gubernativa del Reino, que asumió la regencia hasta el regreso de Fernando VII. Su misión era combatir a los franceses y redactar una constitución.
Surgieron dos bandos: los afrancesados (liberales minoritarios que apoyaban a los franceses) y los resistentes o patriotas (divididos en liberales, que buscaban un régimen basado en las ideas de la Revolución Francesa, y absolutistas, que rechazaban a José I y cualquier constitución).
La Formación de las Cortes de Cádiz
Se eligieron representantes de 33 ciudades. El objetivo era acabar con la sociedad estamental y la monarquía absoluta, unificando una ciudad libre de franceses. Se reunieron en la Isla de León (San Fernando) el 20 de febrero de 1811 y se trasladaron a Cádiz hasta 1814, cuando volvieron a Madrid el 4 de mayo.
El objetivo de las juntas era redactar una constitución. En 1810, se convocaron las Cortes Generales de Cádiz con unos 95 diputados. Las elecciones fueron complicadas por la ocupación francesa y la falta de experiencia electoral. Además, se incluyeron representantes de las colonias americanas. El sufragio era censitario. De los 240 diputados convocados, 95 firmaron la Constitución. Se distinguen tres grupos: absolutistas, liberales y americanistas (mayormente liberales).
Los trabajos comenzaron antes de la formación de las Cortes, influenciados por las ideas de Gaspar Melchor de Jovellanos. Se basaron en una consulta al país. El discurso inaugural lo dio el liberal Diego Muñoz Torrero.