La Crisis del 1808
La situación social y económica del país era muy grave. Las guerras sucesivas, el hambre causada por la escasez de las cosechas y las epidemias habían provocado una importante pérdida de la población. El comercio con las colonias estaba colapsado desde la guerra de 1796 y desde 1806 el bloqueo impuesto por Napoleón contra Gran Bretaña agravó aún más la situación. Se sumaba la bancarrota del Estado, debido a que las continuas guerras habían provocado un endeudamiento creciente.
Por otra parte, la indignación de todos los grupos sociales se dirigía contra Godoy, pero también contra los reyes. Se le acusaba de las derrotas militares y se le hacía responsable del hundimiento económico. También, la oposición fue concretando en torno al príncipe Fernando, apartado del gobierno por Godoy. En octubre del 1807 se produjo el proceso de El Escorial.
Tratado de Fontainebleau y el Motín de Aranjuez
El bloqueo en 1806 contra el comercio británico fue respaldado por la mayoría de los estados europeos, pero los portugueses se negaban a cumplirlo, y en 1807 Napoleón decidió invadir Portugal. Firmó con el gobierno español el tratado de Fontainebleau por el que se autorizaba al ejército francés a atravesar España camino de Portugal.
Poco a poco fueron entrando en España varios cuerpos de ejército francés, más de los pactados en el tratado. Empezaron a producirse incidentes entre la población y los soldados franceses. En el 1808 se produjo el motín de Aranjuez, cuando los partidarios de Fernando tomaron el asalto a palacio. Carlos IV se vio obligado a abdicar, cediendo la corona a su hijo.
Las Abdicaciones de Bayona
En Bayona tuvieron lugar unas negociaciones vergonzosas. Napoleón exigió la renuncia de la familia al completo. Fernando abdicó en favor de sus padres y estos lo hicieron a favor de Napoleón. Carlos IV solo se preocupó de que se garantizara la unidad de las posesiones de la Corona y el exclusivismo de la religión católica. Napoleón entregó el reino a su hermano José.
La Guerra de Independencia
1808
El levantamiento del 2 de mayo se produjo por la alarma de que la familia real había salido de la capital. Se generalizó la lucha callejera contra los franceses, una lucha desigual que terminó con el aplastamiento de la resistencia popular. El ejército español se mantuvo al margen y solo algunos oficiales desobedecieron.
Murat dictó un bando en el que proclamó su autoridad absoluta en todo el territorio y decretó la pena de muerte para los esidentes. Las clases privilegiadas y las instituciones del Antiguo Régimen acataron a la autoridad francesa. Pero la reacción popular fue distinta, la renuncia de Fernando VII se interpretó como impuesta por la fuerza, la rebelión se extendió por todas las ciudades del país.
Primera Fase
La relación de fuerzas era muy desigual. La española estaba en clara inferioridad de condiciones, y además la ayuda de Inglaterra y Portugal les reforzó considerablemente. El mando francés nunca pensó que invadir España fuera a ser algo realmente complicado. Cuando surgió la acción guerrillera, los generales no supieron reaccionar, y acabaron actuando por su cuenta.
El sitio de Zaragoza, cuya resistencia fue organizada por el general Palafox, las tropas francesas fueron derrotadas en la batalla de Bailén. Los franceses se vieron obligados también a levantar el sitio de Zaragoza. Además, el cuerpo expedicionario inglés, al mando de Wellington, vencía a las tropas francesas en Lisboa. Napoleón decidió intervenir personalmente y en una campaña ocupó Burgos, derrotó tropas españolas y fue hacia la capital. Madrid se rindió el 4 de diciembre.
Segunda Fase (Guerrillas)
En 1809 los franceses consiguieron vencer la resistencia y avanzar hacia el sur. Pese al tropiezo de Talavera, donde Wellington consiguió derrotarles, en 1810 conquistaron Andalucía, excepto Cádiz. Allí inició una guerra de desgaste, caracterizada por la imposibilidad de que las tropas francesas controlaran efectivamente el territorio por la lucha cada vez más organizada de las partidas guerrilleras.
Las guerrillas aparecieron en 1808 como unidades de paisanos armados con el objetivo de mantener en constante amenaza a los franceses (guerrillero más importante Francisco Abad). Los guerrilleros rehuían de la batalla cara a cara, y optaban por golpear, emboscadas…
Tercera Fase 1812-1814
A partir de 1811 la guerra cambia de rumbo. Tras la derrota de Torres Vedras, los franceses abandonaron Portugal y después Wellington avanzó por el sur y reconquistó Badajoz. Napoleón tomó la decisión de atacar Rusia, y se llevó a sus mejores tropas de España. Las tropas de Wellington entraban en Salamanca y más tarde, tuvo lugar la batalla de Los Arapiles, en la que ganaron las tropas inglesas.
En 1813 Napoleón fue derrotado y obligó a José I cruzar la frontera.
Revolución Liberal, José Bonaparte
La población se negaba a aceptarle. Compensó por poner el estatuto real de Bayona, que servía para dar una imagen de legalidad y modernidad a la nueva monarquía. Hubo medidas de modernización: Supresión de secretarías y consejos y sustitución por ministros. Abolición de la jurisdicción señorial y la eliminación de aduanas interiores. Disolución de la Inquisición, reducción de conventos.
Los afrancesados, creían que José I conservaría la integridad nacional y la independencia económica.
Composición de las Cortes de Cádiz
Mientras la junta del liberalismo daba paso a un consejo de regencia, se celebraron las elecciones en medio de muchas dificultades. El consejo de regencia entregaba toda la autoridad a las Cortes, consumando así el proceso revolucionario.
La mayoría de la composición de las cortes fue variando, la mayoría procedía de las capas medias urbanas, también de eclesiásticos y miembros de la aristocracia. Predominaban las ideas liberales puesto que entre los refugiados en Cádiz abundaban los partidos de las reformas.
Constitución de 1812
En 1812 quedaba aprobada la primera carta magna de la historia de España. Tuvieron mucho cuidado en la elaboración de los derechos del individuo, algo esencial en la ideología liberal y principal ruptura con el antiguo régimen. Se empieza por afirmar que la soberanía reside en la nación, se establece la división de poderes, y se declara el Estado como una monarquía moderna hereditaria.
El poder ejecutivo lo ejerce el rey, que nombra libremente a sus secretarios, los cuales responden antes las cortes, pero no pueden ser cesados por ellas. Se recogían hasta doce limitaciones a la autoridad real.
El poder legislativo reside en las cortes con el Rey. Las leyes las hacen las cortes y el rey las promulga. Se establece que las Cortes sean unicamerales y elegidas por sufragio universal indirecto.
El poder judicial corresponde a los tribunales y se reconoce dos fueros especiales, el militar y el eclesiástico. La Constitución reconoce la confesionalidad del Estado y la exclusividad de la religión católica. Se establece también un ejército permanente bajo la autoridad de las cortes y una milicia nacional.
La administración del Estado, el país se dividía en provincias y se establece la elección de los alcaldes por el pueblo. Tuvo tres periodos de vigencia. 1812-1814/ 1820-1823/ 1836-1837.